Con resultados negativos a los últimos testeos por coronavirus, el plantel de River comenzará hoy a meterse en su propia “burbuja” sanitaria en su predio de la localidad bonaerense de Ezeiza, con un “refuerzo” que le viene como anillo al dedo: el agregado del lateral paraguayo Jorge Moreira, que tendrá su segunda oportunidad en el millonario, a partir de la liberación del cupo de extranjeros por la venta del enganche colombiano Juan Fernando Quintero a China.
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Con resultados negativos a los últimos testeos por coronavirus, el plantel de River comenzará hoy a meterse en su propia “burbuja” sanitaria en su predio de la localidad bonaerense de Ezeiza, con un “refuerzo” que le viene como anillo al dedo: el agregado del lateral paraguayo Jorge Moreira, que tendrá su segunda oportunidad en el millonario, a partir de la liberación del cupo de extranjeros por la venta del enganche colombiano Juan Fernando Quintero a China.
Moreira retornó a River tras un año en el Portland Timbers de la Major League Soccer de los Estados Unidos y comenzará un aislamiento dentro de una burbuja sanitaria, con la que el entrenador Marcelo Gallardo intentará recrear las condiciones que afrontarán en el reinicio de la Copa Libertadores, previsto para el 17 de septiembre.
Con el paraguayo, Gallardo tomó una decisión diferente a otros futbolistas que retornaron de préstamos, como Iván Rossi, Joaquín Arzura y Morán Correa, que trabajarán separados del primer equipo.
Moreira llegó a River en 2016 y jugó como titular la primera temporada, pero luego una lesión en el tobillo le hizo perder terreno y ya no pudo volver a jugar regularmente.
Gonzalo Montiel se ganó el puesto en base a sus actuaciones y por eso el paraguayo aceptó ir a buscar reencontrarse con su juego en el Portland, reciente campeón de la MLS, que no le renovó contrato.
El paraguayo ocupará el lugar vacante por la cesión del juvenil Franco Paredes a Defensa y Justicia junto con Enzo Fernández.
Así, el plantel del millonario, que dio negativo en su totalidad a los nuevos testeos por coronavirus realizados en la jornada de ayer, estará desde hoy aislado en el hotel Holiday Inn de Ciudad Evita, muy cercano al predio River Camp, donde harán doble turno hasta el sábado 29 de agosto, en la primera fase de entrenamientos grupales dentro de esta nueva normalidad del fútbol argentino por la pandemia de coronavirus, de cara al regreso oficial, que tiene como principal objetivo en el calendario del equipo de Núñez el regreso de la Libertadores.
El objetivo, al margen de acostumbrarse a la modalidad que deberá cumplir cuando retome la principal competencia internacional del continente y sus viajes por Sudamérica, es acelerar la preparación y aumentar los estímulos, ya pudiendo compartir ejercicios, sin necesidad de dividirse en grupos de un máximo de seis jugadores, como ocurrió en las primeras dos semanas.
El que no estará junto al resto del grupo por lógicas razones es Ezequiel Centurión, cuarto arquero del plantel, que todavía no recibió el alta médica tras haber dado positivo en coronavirus en los primeros testeos, previo a retomar la práctica.
Luego de esta etapa, River afrontará otros 14 días de trabajos con hisopados semanales como recta final antes del reestreno en la máxima competencia internacional de clubes.
El conjunto de Marcelo Gallardo tiene tres puntos en el parejo Grupo D de la Libertadores, al igual que sus tres rivales, aunque cuenta con mejor diferencia de gol, y visitará al San Pablo el jueves 17 de septiembre, a las 19, en la metrópolis brasileña.
El equipo liderado por el Muñeco Gallardo, quien logró dos Libertadores en sus cinco años de gestión, irá a Perú una semana más adelante para su duelo ante el Binacional (22 de septiembre) en la temida altura incaica, y después cerrará como local del poderoso San Pablo de Dani Alves y compañía (30 de septiembre) y la Liga de Quito (20 de octubre).
Cabe recordar que a los mencionados dos compromisos coperos River los jugará como local en el estadio “Libertadores de América” de Independiente de Avellaneda, debido que el Monumental no estará disponible por la refacción de sus instalaciones. Y que en el momento de oficializarse la vuelta del fútbol argentino, el equipo de Núñez le ofreció a la AFA su propio predio de Ezeiza.