El médico anestesiólogo anteño Juan Ramón López ejerce la gerencia del hospital Juan Domingo Perón de Tartagal desde unas pocas semanas antes de declarada la pandemia de COVID-19. A siete meses del inicio de su gestión brindó un panorama de cómo se encuentra el hospital de referencia de los departamentos San Martín y Rivadavia Banda Norte y consideró que, a pesar del notable descenso de los casos positivos y de fallecimientos en el norte de la provincia, “no podemos anticipar si lo que pasamos fue el pico o si vamos a tener otros más. No tenemos que relajarnos y debemos mirar con mucha atención lo que pasa en la frontera por la decisión del vecino de país Bolivia de flexibilizar casi todas sus actividades”.
inicia sesión o regístrate.
El médico anestesiólogo anteño Juan Ramón López ejerce la gerencia del hospital Juan Domingo Perón de Tartagal desde unas pocas semanas antes de declarada la pandemia de COVID-19. A siete meses del inicio de su gestión brindó un panorama de cómo se encuentra el hospital de referencia de los departamentos San Martín y Rivadavia Banda Norte y consideró que, a pesar del notable descenso de los casos positivos y de fallecimientos en el norte de la provincia, “no podemos anticipar si lo que pasamos fue el pico o si vamos a tener otros más. No tenemos que relajarnos y debemos mirar con mucha atención lo que pasa en la frontera por la decisión del vecino de país Bolivia de flexibilizar casi todas sus actividades”.
En el transcurso de la semana se viralizó en redes sociales que había renunciado a la gerencia de Tartagal....
Yo digo que en Tartagal, como en muchos otros lugares, hay gente que se dedica a hacer este tipo de comentarios porque capaz les incomoda mi presencia o no sé por qué motivos; otros nos dedicamos a trabajar todo el día y cada día que transcurre para hacer frente con previsibilidad a la pandemia. Con mi equipo de trabajo nos enrolamos en ese segundo grupo y tengo la suerte de contar con muchos profesionales de diferentes áreas, muchos de ellos de Tartagal que conocen a su gente y se han puesto al hombro este compromiso con todo el departamento San Martín y vienen haciendo más de lo que pueden. El contador Humberto Ovejero, el pediatra y subgerente Martín Arias, por nombrar solo algunos, trabajan con una responsabilidad, un sentido de pertenencia increíbles. En el trabajo que llevamos adelante como equipo tenemos como nuestro mayor apoyo al gobernador Gustavo Sáenz que tiene una gran empatía por Tartagal; y lo puedo demostrar enumerando las mejoras que tiene este hospital en recursos materiales como en recursos humanos.
¿Cuáles son esas mejoras?
Tenemos designados 57 nuevos enfermeros, 24 nuevos médicos que se suman a los 80 que había cuando yo llegué, se nombraron 2 fisioterapeutas exclusivos para el área COVID , 2 nutricionistas y una farmacéutica más, otra bioquímica, técnicos de seguridad e higiene, 6 camilleros que el hospital no tenía; sumamos 48 camas de atención para pacientes positivos en el mismo hospital , se montó un hospital de campaña de 180 camas en el complejo deportivo que gracias a Dios no hemos tenido que utilizar más que 40 camas en el momento de mayor cantidad de enfermos; teníamos 3 respiradores y ahora tenemos 20, tenemos 100 tubos de oxígeno disponibles -nos colaboró la Clínica Divina Misericordia con esos tubos- y un piso del hospital totalmente equipado para terapia intensiva donde dada la necesidad, podemos atender a 14 pacientes en forma simultánea porque tienen dos paneles de oxígeno cada habitación; en esta semana estamos levantando el hospital de campaña en el kilómetro 6 por la ruta 86, al este de Tartagal para contener especialmente a los enfermos que pertenezcan a las comunidades originarias. Al hospital Perón están llegando especialistas como urólogo, otorrino, endoscopista, oncólogos y tenemos prácticamente resuelto el tema de diálisis. Todo eso que mencioné implica una gran inversión por parte de la provincia. Seguimos teniendo muchas críticas, pero creo que lo que no ayuda es que gente conocida cuando tuvo los síntomas pidió que la llevaran a la ciudad de Salta cuando en este hospital hacemos exactamente lo mismo que se hace en cualquier otro centro público o privado de la provincia. Eso no ayuda y genera inseguridad e incertidumbre en la gente.
"Llevamos 34 personas fallecidas y no son un número: son familias que pasan por un gran dolor. Pero todos con enfermedades prevalentes."
¿Por qué decidieron levantar el hospital en el kilómetro 6?
Porque nos dimos cuenta de que comenzaron a llegar algunos originarios con la sintomatología de COVID-19 de Misión Las Moras o la comunidad El Lucerito; cuando fue nuestra gente encontraron a muchos wichis -pero también criollos- con sintomatología y decían que sus hermanos no querían venir al hospital por temor a que los aislemos o los hagamos quedar en cuarentena. Por eso decidimos levantar el hospital en el kilómetro 6
Tartagal registró números alarmantes de contagios y fallecidos tanto en el hospital como en el sector privado. ¿El pico de la pandemia ya pasó en el norte de la provincia?
Eso no podemos asegurarlo de ninguna manera. Lo que expresan los especialistas a nivel mundial de la pandemia de COVID-19 es que el 80 por ciento de la población en algún momento nos vamos a contagiar, por tanto no podemos pensar que porque llega la primavera o hace calor los números vayan a seguir bajando. Además, tenemos la particularidad de que estamos a 50 kilómetros de Bolivia que, tengo entendido, está abriendo muchas de sus actividades comerciales. Los comerciantes de Bolivia van a cruzar la frontera seguramente para aprovisionarse de bienes y mercaderías y eso no afectará solamente a Salvador Mazza, donde también hubo muchos enfermos asintomáticos o leves. Acá en Tartagal tenemos el shopping, como lo conocemos comúnmente, que son pequeños negocios que se abastecen de mercadería que también ingresa de Bolivia. En la zona tuvimos varias semanas en las que los que practican el coqueo no podían encontrar hojas de coca por ningún lado y hoy está a la venta en muchos negocios, lo que indica que está ingresando con facilidad. En el norte sabíamos que la COVID no iba a venir del sur sino de Bolivia y con esta apertura de actividades en la frontera, con este ir y venir de vendedores y compradores no sabemos qué puede pasar de ahora en más. Lo que debemos hacer es seguirnos cuidando, no relajarnos y ser muy responsables. Mi mensaje para la gente de Tartagal es de agradecimiento porque entendieron que debían quedarse en casa, salir lo estrictamente necesario y cuidarse. Y que sepan que trabajamos todos los días con un gran equipo, en cuidar la salud y la vida de los vecinos.