En todos los deportes existe un respeto hacía la figura del árbitro, pero en el rugby el acatamiento de los jugadores es mucho más riguroso. Por eso sorprende tanto la insólita reacción que tuvo Josaia Raisuqe cuando el colegiado decretó el final del partido: lo alzó por los aires con mucha euforia. Lógicamente, terminó expulsado y afronta una dura sanción.
Ocurrió en el partido entre AS Béziers Hérault y USON Nevers que se jugó el jueves en el Stade de la Mediterranee, un duelo correspondiente a la decimoquinta jornada de la Pro D2, el campeonato de segunda división en Francia.
Raisuqe, oriundo de Fiji y ex jugador del Stade Français del Top 14, no pudo ocultar su alegría cuando el árbitro Laurent Millotte decretó el cierre de un duelo muy apretado partido que el Nevers acabó ganando por 30-25 ante Béziers. Fueron unos pocos segundos en los que los tomó de la cintura y lo elevó por encima de su cabeza para festejar el triunfo, como a Simba en El Rey León.
Inmediatamente, cuando puso sus pies en el suelo, Millotte le mostró la tarjeta roja a Raisuqe. El jugador de 26 años, quien hace dos temporadas fue el top try scorer de la Pro D2, probablemente sea duramente sancionado y se pierda varios partidos.
A priori, Josaia Raisuqe será suspendido automáticamente con un partido debido a la tarjeta roja recibida. Pero el comité disciplinario seguramente tome cartas en el asunto y deje al ala fuera de los terrenos de juego por varios encuentros.
En los antecedentes de Raisuqe hay sucesos muchos más graves, sobre todo fuera del campo. Este jugador que representó a la selección de Fiji de Rugby 7 ya protagonizó un escándalo en julio de 2017, cuando tocó los pechos a una mujer en la calle tras salir borracho de una fiesta y luego golpeó a los amigos de la víctima. Por aquel episodio fue despedido del Stade Français y estuvo algunos meses inactivo hasta que recaló en la segunda división.
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En todos los deportes existe un respeto hacía la figura del árbitro, pero en el rugby el acatamiento de los jugadores es mucho más riguroso. Por eso sorprende tanto la insólita reacción que tuvo Josaia Raisuqe cuando el colegiado decretó el final del partido: lo alzó por los aires con mucha euforia. Lógicamente, terminó expulsado y afronta una dura sanción.
Ocurrió en el partido entre AS Béziers Hérault y USON Nevers que se jugó el jueves en el Stade de la Mediterranee, un duelo correspondiente a la decimoquinta jornada de la Pro D2, el campeonato de segunda división en Francia.
Raisuqe, oriundo de Fiji y ex jugador del Stade Français del Top 14, no pudo ocultar su alegría cuando el árbitro Laurent Millotte decretó el cierre de un duelo muy apretado partido que el Nevers acabó ganando por 30-25 ante Béziers. Fueron unos pocos segundos en los que los tomó de la cintura y lo elevó por encima de su cabeza para festejar el triunfo, como a Simba en El Rey León.
Inmediatamente, cuando puso sus pies en el suelo, Millotte le mostró la tarjeta roja a Raisuqe. El jugador de 26 años, quien hace dos temporadas fue el top try scorer de la Pro D2, probablemente sea duramente sancionado y se pierda varios partidos.
A priori, Josaia Raisuqe será suspendido automáticamente con un partido debido a la tarjeta roja recibida. Pero el comité disciplinario seguramente tome cartas en el asunto y deje al ala fuera de los terrenos de juego por varios encuentros.
En los antecedentes de Raisuqe hay sucesos muchos más graves, sobre todo fuera del campo. Este jugador que representó a la selección de Fiji de Rugby 7 ya protagonizó un escándalo en julio de 2017, cuando tocó los pechos a una mujer en la calle tras salir borracho de una fiesta y luego golpeó a los amigos de la víctima. Por aquel episodio fue despedido del Stade Français y estuvo algunos meses inactivo hasta que recaló en la segunda división.