El próximo 30 de abril, harán setenta años de aquel día que el gobernador Carlos Xamena creó la Escuela Superior de Ciencias Naturales, casa que un año después pasó a depender de la Universidad Nacional de Tucumán con el rango de Facultad. Y si bien, no fue la primera casa universitaria de Salta, con el tiempo se transformó en la fragua donde se comenzó a modelar la futura universidad nacional.
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El próximo 30 de abril, harán setenta años de aquel día que el gobernador Carlos Xamena creó la Escuela Superior de Ciencias Naturales, casa que un año después pasó a depender de la Universidad Nacional de Tucumán con el rango de Facultad. Y si bien, no fue la primera casa universitaria de Salta, con el tiempo se transformó en la fragua donde se comenzó a modelar la futura universidad nacional.
El 30 de abril de 1951, el gobernador Carlos Xamena rubricó, en acuerdo general de ministros el histórico Decreto N´ 6466 por el cual se creaba la Escuela Superior de Ciencias Naturales. De la lectura de ese instrumento, resulta interesante rescatar algunos conceptos de sus considerandos. Y sirve, a los fines de tener una idea de cómo era, a mitad del siglo 20, la realidad educativa de nuestra provincia. Por el documento se toma conocimiento que en pleno siglo XX, el Noroeste argentino, incluido Tucumán, aún no tenía un instituto de enseñanza superior especializado en Ciencias Naturales. Más adelante habla de la necesidad que por entonces tenía Salta de contar con una casa de estudios superiores ya que por cuestiones económicas, muchos estudiantes "no pueden emprender estudios universitarios. Muchos anhelos vocacionales -sostiene- por el conocimiento de aquellas disciplinas (Geología y Biología) se han visto y se ven frustrados, la mayoría de las veces porque no le es permitido al estudiante, alcanzar una licenciatura en Geología o Biología, en orden de las posibilidades financieras, o las de carácter social y emotivo, por el alejamiento del alumno del hogar, distante del propio contralor de los padres".
Luego el documento sostiene que es importante que los habitantes de nuestra región conozcan y estudien su propio suelo. "En orden a los propios valores de la enseñanza superior, es necesario que los geólogos, botánicos, zoólogos, paleontólogos y antropólogos salteños que egresen de una escuela especializada, conozcan su suelo ya que en ninguna otro lugar del país y ni del mundo, sería dado al estudiante, como en nuestra provincia, entrar en contacto con el potencial de la naturaleza, tan extraordinario en Salta; porque es evidente -sin desmedro para nadie- que los estudiantes y doctorados en Ciencias Naturales, cuando llegan con sus títulos de capacitación a nuestro medio, deben comenzar a estudiar de nuevo, ya que alejados del Noroeste argentino no pudieron aprender, sino en teoría, los caracteres de este suelo, tan distintos cuando se observan experimentalmente sobre el propio terreno".
Y concluye, "en Salta debe servirse a la cultura, a la ilustración del pueblo y no cerrar las posibilidades de la enseñanza a quienes desean estudiar, aprender o introducirse en el conocimiento de las disciplinas universitarias, tanto más cuanto es un deber del Gobierno propender a ellos".
Enseñanza gratuita
En la parte resolutiva del decreto, el gobernador Carlos Xamena, crea la Escuela Superior de Ciencias Naturales y dispone que su funcionamiento sea "bajo la directa dependencia del Ministerio de Gobierno y como instituto anexo del Museo Provincial de Ciencias Naturales". Establece que impartirá enseñanza en forma gratuita, según la Ley Universitaria N´ 13.031 de 1947, que estableció la gratuidad de la enseñanza universitaria en la Argentina.
En el artículo segundo, la norma adelanta que el Gobierno de Salta gestionará la incorporación de la Escuela Superior al nuevo régimen universitario establecido por mencionada ley universitaria de 1947. Es decir que desde un principio, se pensó que el nuevo establecimiento debía ser incorporado a la Universidad Nacional de Tucumán, por ser de su jurisdicción.
Más adelante, el documento da detalles sobre las orientaciones de las carreras de Biología y Geología, condiciones de ingreso, modalidades de estudio, programas, títulos a otorgarse y temas presupuestarios.
Asimismo, designa como director del establecimiento, a don Rodolfo Amadeo Sirolli, quien hasta ese momento era titular del Museo Provincial de Ciencias Naturales. Por último, el Ministerio de Gobierno dispone que la sede de la Escuela Superior de Ciencias Naturales, sea en el denominado "Pabellón Centenario" del parque San Martín, predio que hasta entonces era ocupado por el Sporting Club.
Los trámites para el reconocimiento como universidad
Concluida la etapa fundacional de la Escuela Superior de Ciencias Naturales, el gobierno de Salta inició en forma inmediata las gestiones tendientes a que la casa de altos estudios sea reconocida por la Universidad Nacional de Tucumán según la normativa vigente. Los trámites consumieron un año de trabajo y cuando estos concluyeron, el nuevo gobernador de la provincia era el Dr. Ricardo Durand, en tanto don Carlos Xamena era senador nacional.
Y así fue que como resultado de las gestiones iniciadas en 1951, el 16 de diciembre de 1952, la Universidad Tucumán crea con asiento en Salta, la Facultad de Ciencias Naturales, estableciendo que la misma debía comenzar a funcionar el 1´ de abril de 1953. Asimismo, establece que el Instituto de Geología y Minería (Jujuy), la Escuela de Minas (Jujuy) y Escuela Técnica de Vespucio (Salta) dejan de depender de la Facultad de Ciencias Exactas y Tecnológicas (UNT), pasan a ser parte de la flamante Facultad de Ciencias Naturales de Salta.
La transferencia
Días después de la creación de Facultad de Ciencias Naturales, el 23 de diciembre, se produce la transferencia de la Escuela Superior a la Universidad de Tucumán. El acto se realizó en el Salón Blanco de la Casa de Gobierno, Mitre 23 y es encabezado por el gobernador de Salta, Dr. Ricardo J. Durand y el rector de la Universidad Nacional de Tucumán, Dr. Carlos F. Aguilar.
El convenio consta de nueve artículos y entre otras cosas establece que junto a la Escuela Superior, también pasaba a manos de la Universidad de Tucumán, el Museo de Ciencias Naturales con todos sus bienes muebles e inmuebles, entre ellos el Pabellón Centenario del Parque San Martín.
Por su parte, la universidad aseguraba a los estudiantes salteños la continuidad de los estudios realizados durante 1951, y les reconocía las materias aprobadas.
Desde el punto de vista presupuestario, la Universidad de Tucumán se hacía cargo de los gastos de funcionamiento de Ciencias Naturales, como también de la futura designación de la planta docente y personal no docente, en un todo de acuerdo a las normas de las universidades nacionales.
Los primeros años
Desde 1953, la Facultad de Ciencias Naturales desarrolló sus tareas académicas en Mendoza 2, sede del Museo. Allí permaneció hasta 1960, cuando el gobernador de Salta, don Bernardino Biella, transfirió a la Universidad de Tucumán el inmueble de Buenos Aires 177, para que sea sede de la facultad. En tanto en el museo del parque San Martín, quedaron los laboratorios.
En el caserón de Buenos Aires 177 (hoy Palacio Zorrilla), que desde 1940 había sido Casa de Gobierno, Ciencias Naturales compartió espacio con el Departamento de Humanidades hasta una fecha muy cercana a la creación de la Universidad de Salta, en mayo de 1973. Cabe agregar que en 1969, comenzó la construcción del complejo universitario de Castañares, que con el tiempo pasaría a ser la sede de la UNSa.
Finalmente digamos que el edificio de Buenos Aires 177 y que por años albergó a la Facultad de Ciencias Naturales, luego de que esta casa se mudara a Castañares, pasó a ser sede del rectorado de la universidad hasta que este también se mudó al campo universitario. Luego de ello, ya a fines del siglo pasado, por iniciativa del profesor Eduardo Ashur, la casona fue sede del Museo Universitario de la Ciudad, aun en formación.