Sectores de la producción, el comercio y la industria de la provincia esperan conocer el texto definitivo del nuevo Consenso Fiscal, que se firmaría hoy en la Casa Rosada, para pronunciarse contra eventuales subas de impuestos que ahondarían las dificultades que enfrentan en medio de una pandemia que vuelve a rondar con variantes de preocupación y ascendentes curvas de contagios.
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Sectores de la producción, el comercio y la industria de la provincia esperan conocer el texto definitivo del nuevo Consenso Fiscal, que se firmaría hoy en la Casa Rosada, para pronunciarse contra eventuales subas de impuestos que ahondarían las dificultades que enfrentan en medio de una pandemia que vuelve a rondar con variantes de preocupación y ascendentes curvas de contagios.
Si bien aún no se conocieron definiciones oficiales al respecto, fuentes del Ministerio de Economía de la Provincia aseguraron ayer a este diario que el acuerdo del presidente Alberto Fernández con los gobernadores no se traduciría en Salta en una mayor presión fiscal.
En este contexto, autoridades de la Cámara de Comercio e Industria y la Unión Industria de Salta (UIS) coincidieron en remarcar que, en lugar de mayores cargas, se necesitan medidas para alentar las inversiones, apuntalar proyectos y estimular el empleo en la actividad privada.
“Adelantamos nuestro desacuerdo a cualquier suba de impuestos y aumento de la presión fiscal, porque solo generan más desempleo y menos inversión. Son recetas que nunca funcionaron”, manifestó el presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Salta, Daniel Betzel.
“Se está hablando de una suba de ingresos brutos y de otros impuestos como los de herencia y de transferencia de bienes. En ingresos brutos nosotros estamos hoy en un 5%, lo que de por sí ya es una barbaridad. El aumento de la voracidad fiscal lo único que hace es desanimar la inversión”, sostuvo Betzel.
En la misma línea se pronunció la titular de la Unión Industrial de Salta, Paula Bibini, quien aclaró que la entidad se maneja con la misma información que tiene hoy la Unión Industrial Argentina (UIA) en relación con los topes que se establecerían para las alícuotas de ingresos brutos.
La representante de la Unión de Industrias del Norte Argentino destacó que el Consenso Fiscal para 2022 ratificaría la autonomía de las provincias para fijar sus impuestos. Más allá de esa restitución, exenta de cuestionamientos, Bibini dejó en claro que para el sector industrial los pactos fiscales precedentes resultaron gravosos. “La experiencia de Salta, en particular, no fue positiva para la industria con el Consenso Fiscal de 2017, porque en particular estaba exenta de impuesto a los ingresos brutos y en ese momento se fijó una alícuota del 2%”, reseñó. La exministra de Producción, Trabajo y Desarrollo Sustentable de Salta recordó que, a la par de aquella imposición tributaria, se estableció un cuadro decreciente por el cual la alícuota de ingresos brutos debía bajar medio punto porcentual por año hasta volver a cero a partir de 2022. “Sin embargo, por el pacto de consenso fiscal firmado en 2019 se resolvió congelar ese cuadro decreciente, con lo cual hoy la industria continúa pagando un 1,5%”, subrayó.
“En concreto, se generó desde 2017 un aumento de la presión fiscal que hasta el día de hoy se mantiene y que no hace más que agrandar la base imponible que tenemos los empresarios de la provincia en relación con todo lo que tenemos que pagar”, resumió la titular de la UIS.
“Nuestra posición, hoy por hoy, es de total desacuerdo con cualquier aumento de la presión fiscal porque haría todavía más difícil que podamos llevar adelante nuestras inversiones y crecer. Más impuestos desalientan la actividad productiva y generan menos trabajo. Este tipo de medidas no ayudan a que la Argentina crezca. Me parece que están en un camino completamente equivocado al no tomar en cuenta lo que viene planteando el sector privado. No se puede seguir aumentando impuestos porque la situación no da para más. Lo que nosotros estamos pidiendo es que, de alguna manera, merme la presión impositiva”, subrayó Bibini.
La referente del sector industrial de la región hizo notar que al incierto escenario se sumó la reciente medida con la que el Gobierno nacional ratificó la prórroga de la doble indemnización por despido. “Los sectores industriales de la provincia y la región se manifestaron en absoluto desacuerdo con la continuidad de este tipo de medidas restrictivas que para nada alientan la contratación de nuevo personal. Son decisiones totalmente desalentadoras . Hoy la industria está preocupada y en alerta por la cantidad de medidas, de tipo sorpresivas, que se van tomando y que no garantizan para nada la seguridad jurídica que una inversión industrial a largo plazo requiere”, acotó Bibini.
Las entidades del sector agropecuario de Salta, a su vez, advierten desde hace largo tiempo que el Estado, a través de las retenciones y otros impuestos nacionales, provinciales y municipales, se queda con más del 65% de la renta del productor. El desdoblamiento cambiario y los fletes a puerto son también objeto de insistentes reclamos de la actividad rural de la región. El transporte de cada tonelada de granos producidos en el NOA en camiones hasta las terminales portuarias de Rosario cuesta más de 50 dólares y los precios en pizarras de la soja o el maíz terminan siendo ilusorios. En la soja productores reciben, con todo, menos de 200 dólares por tonelada.