Un sangriento hecho de violencia intrafamiliar trascendió ayer en el norte de la provincia. Una mujer, quien fuera identificada por fuentes policiales como Gallie Mimessi, fue atacada a cuchilladas. Según las fuentes, la víctima sufrió varios cortes en su cuerpo. El agresor, quien utilizó un arma blanca, luego del salvaje acto se dio a la fuga a bordo de un vehículo, hasta el cierre de esta edición no había novedades de su detención.
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Un sangriento hecho de violencia intrafamiliar trascendió ayer en el norte de la provincia. Una mujer, quien fuera identificada por fuentes policiales como Gallie Mimessi, fue atacada a cuchilladas. Según las fuentes, la víctima sufrió varios cortes en su cuerpo. El agresor, quien utilizó un arma blanca, luego del salvaje acto se dio a la fuga a bordo de un vehículo, hasta el cierre de esta edición no había novedades de su detención.
La mujer, conocida médica de Tartagal, tuvo que ser llevada de urgencia a la Clínica San Antonio de esa ciudad, desde donde fue trasladada al hospital Juan Domingo Perón. En medio de la intervención policial, las fuentes señalaron que los efectivos le habrían aplicado una feroz golpiza a un joven que intentó ayudar a la víctima.
Fuentes de la investigación consultadas por El Tribuno indicaron que el hecho ocurrió entre las 16 y las 17, la mujer fue objeto de varios cortes, agresión que según señalaron se desató en el interior de una vivienda por parte de un sobrino de la damnificada. Otras de las versiones que se dieron a conocer ayer, en redes sociales, sostuvieron que la doctora fue hallada ensangrentada en la calle Sarmiento y Warnes de la norteña ciudad. Según vecinos, los gritos que se escucharon fueron aterradores.
Desde un primer momento el hermetismo fue total por parte de los organismos oficiales encargados de informar al respecto. Al parecer, además del cruento episodio familiar, se sumó un presunto hecho de apremios por parte de las fuerzas policiales en perjuicio de un joven que tras observar a la médica ensangrentada en la vía pública lo primero que hizo fue intentar asistirla.
Testigos en el lugar afirmaron que el joven al ver un patrullero empezó a gritarles para que trasladaran a la víctima, sin embargo y por motivos que se desconocen los uniformados habrían violentando al socorrista y se lo llevaron en calidad de detenido.
Los testigos también agregaron que la mujer se estaba desangrando dado que la ambulancia nunca llegó, con lo cual un médico veterinario llevó a la víctima hasta el instituto de salud.