La niña M., que mantuvo al país en vilo tras estar desaparecida durante tres días, fue recuperada ayer. Si bien la primera reacción de todos fue de felicidad porque apareció con vida, lo que dejó el caso es un fuerte debate en torno a la vulnerabilidad de los chicos en el contexto de la pobreza que azota al país. Hay que tener en cuenta que la niña vivía en situación de calle.
Por el trajín y el estrés, la niña permaneció anoche internada en el hospital Prof. Dr. Juan P. Garrahan. En tanto, Carlos Savanz, quien se llevó a la nena, permanece detenido e imputado provisoriamente del delito de “sustracción, retención y ocultamiento de un menor de 10 años”.
La niña de siete años era buscada desde hacía tres días, cuando Carlos Alberto Savanz (39) se la llevó en bicicleta desde el barrio porteño de Villa Lugano hacia la zona oeste del conurbano. Fue hallada ayer sana y salva en la ciudad de Luján junto a su captor.
La niña se hallaba en un cajón de plástico en la parte trasera de una bicicleta junto al hombre que se la llevó. El hallazgo se produjo minutos después de las 8 gracias al llamado de una vecina al 911, tras el cual un móvil del Comando de Patrullas de Luján se dirigió al lugar.
“Volvía de dejar a mi nena en el jardín. Venía por las calles La Plata y Buenos Aires y, justo en esa esquina, veo al chico en la bicicleta con ese cajoncito de plástico atrás y una caja de cartón. Me llamó la atención y di la vuelta, empecé a seguirlo. Un camionero que se había dado cuenta también me hace señas. Lo seguí seis o siete cuadras y llamé al 911”, contó la vecina al canal Todo Noticias.
El secretario de Seguridad, Eduardo Villalba, contó que “(Savanz) no ofreció ninguna resistencia. Fue una detención normal producto del llamado de un vecino activando todos los protocolos del Alerta Sofía y del Sistema Federal de Búsqueda de Personas”, dijo a radio AM750.
A su vez, el abogado de la familia de la menor, Rodolfo Baqué, estuvo en contacto con la niña tras el hallazgo y afirmó que se encontraba en buen estado de salud aunque “con frío, hambre y shockeada” y que cuando habló telefónicamente con su madre, le dijo que la extrañaba, que la quería y le preguntó varias veces: “¿Cuándo venís mamá?”.
Desde el miércoles, cerca de mil efectivos de tres fuerzas de seguridad con motos, camionetas, helicópteros y perros, habían centrado la búsqueda en la zona de Luján y General Rodríguez, ya que allí la niña y el captor habían sido captados por última vez por las cámaras de seguridad y vistos por testigos.
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La niña M., que mantuvo al país en vilo tras estar desaparecida durante tres días, fue recuperada ayer. Si bien la primera reacción de todos fue de felicidad porque apareció con vida, lo que dejó el caso es un fuerte debate en torno a la vulnerabilidad de los chicos en el contexto de la pobreza que azota al país. Hay que tener en cuenta que la niña vivía en situación de calle.
Por el trajín y el estrés, la niña permaneció anoche internada en el hospital Prof. Dr. Juan P. Garrahan. En tanto, Carlos Savanz, quien se llevó a la nena, permanece detenido e imputado provisoriamente del delito de “sustracción, retención y ocultamiento de un menor de 10 años”.
La niña de siete años era buscada desde hacía tres días, cuando Carlos Alberto Savanz (39) se la llevó en bicicleta desde el barrio porteño de Villa Lugano hacia la zona oeste del conurbano. Fue hallada ayer sana y salva en la ciudad de Luján junto a su captor.
La niña se hallaba en un cajón de plástico en la parte trasera de una bicicleta junto al hombre que se la llevó. El hallazgo se produjo minutos después de las 8 gracias al llamado de una vecina al 911, tras el cual un móvil del Comando de Patrullas de Luján se dirigió al lugar.
“Volvía de dejar a mi nena en el jardín. Venía por las calles La Plata y Buenos Aires y, justo en esa esquina, veo al chico en la bicicleta con ese cajoncito de plástico atrás y una caja de cartón. Me llamó la atención y di la vuelta, empecé a seguirlo. Un camionero que se había dado cuenta también me hace señas. Lo seguí seis o siete cuadras y llamé al 911”, contó la vecina al canal Todo Noticias.
El secretario de Seguridad, Eduardo Villalba, contó que “(Savanz) no ofreció ninguna resistencia. Fue una detención normal producto del llamado de un vecino activando todos los protocolos del Alerta Sofía y del Sistema Federal de Búsqueda de Personas”, dijo a radio AM750.
A su vez, el abogado de la familia de la menor, Rodolfo Baqué, estuvo en contacto con la niña tras el hallazgo y afirmó que se encontraba en buen estado de salud aunque “con frío, hambre y shockeada” y que cuando habló telefónicamente con su madre, le dijo que la extrañaba, que la quería y le preguntó varias veces: “¿Cuándo venís mamá?”.
Desde el miércoles, cerca de mil efectivos de tres fuerzas de seguridad con motos, camionetas, helicópteros y perros, habían centrado la búsqueda en la zona de Luján y General Rodríguez, ya que allí la niña y el captor habían sido captados por última vez por las cámaras de seguridad y vistos por testigos.
Imputado
Carlos Savanz quedó imputado provisoriamente del delito de sustracción, retención y ocultamiento de un menor de 10 años, informó el Ministerio Público Fiscal (MPF) de la Nación.
La conducta investigada se califica como “constitutiva del delito de sustracción, retención y ocultamiento de un menor de 10 años, aunque está siendo evaluado el encuadre legal a partir de lo que surja de los estudios periciales respecto de la niña”. Este delito contemplado en el artículo 145 del Código Penal prevé una pena de entre 5 y 15 años de prisión.
De acuerdo al informe, “inmediatamente cumplidas las medidas de rigor y definida en consecuencia la imputación, está previsto recibirle declaración indagatoria al imputado”, lo que podría ocurrir en las próximas horas.
Reflexión
Tras ver a la niña, la abuela Élida reflexionó sobre lo sucedido y dijo que el hombre que se la llevó en bicicleta “capaz que la llevó engañada. Lo que sé es que mi hija no la regaló”, aseveró.
“Yo creo que fue un chirlito de Dios para que mi hija se dé cuenta y deje esa porquería (por su adicción a las drogas). Sabés cuántas veces fuimos a buscar ayuda, pero nadie nos ayudó”, añadió. Sobre ese punto, Élida confesó que ayer su hija le dijo que si aparecía M. iba a “dejar la droga. Teníamos miedo de que la mate o la lastime, no encontrarla”, afirmó Elida sobre el captor.