Los más de 40 trabajadores que ingresaron al hospital local durante la etapa crítica de la pandemia en la ciudad de Orán dejarían de prestar sus servicios y entre los posibles afectados hay médicos, administrativos y psicólogos.
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Los más de 40 trabajadores que ingresaron al hospital local durante la etapa crítica de la pandemia en la ciudad de Orán dejarían de prestar sus servicios y entre los posibles afectados hay médicos, administrativos y psicólogos.
En la mañana del jueves se manifestaron estos trabajadores del hospital de Orán cortando la calle Pizarro.
La protesta obedeció a la falta de pago a los monotributistas, algunos de los cuales se les adeudan varios meses, y los trabajadores contratados, a los cuales se les vencieron los contratos y los otros que los tienen a punto de vencerse en las próximas semanas.
El corte se dio sobre calle Pizarro esquina Alvear y tenía como modalidad 10 minutos de corte y 15 de paso de vehículos.
Organizan una caravana
Los protestantes anunciaron que están organizando para el lunes una caravana por las calles de la ciudad para que se haga visible su reclamo y no descartaron hasta un corte de ruta.
Cabe señalar que días pasados, en una asamblea en ATE, los afiliados presentes denunciaron el achique y restricción sistemática del recurso humano en Salud.
"Lo que era una percepción pudimos trasladarlo a números. Perdimos en los últimos 20 años más de 300 cargos de la estructura del hospital San Vicente de Paúl y esta realidad se repite en todas las localidades del interior", dijeron ayer.
La secretaria general de la seccional Orán de ATE detalló la situación de los trabajadores precarizados del hospital San Vicente de Paúl. En total son más de 70, sumándose los del PEC y monotributistas.
Indicó que una de las mayores preocupaciones es el futuro laboral de más de 40 trabajadores que ingresaron durante el pico alto de la pandemia en la ciudad con los llamados "contratos COVID-19", cuyo vencimiento será el 31 de marzo. "El tiempo pasa volando, ¿qué pasará con estos compañeros?", fue uno de los interrogantes de Pizola.
El resto de los trabajadores precarizados son los que integran el PEC, monotributistas y aquellos que cobran con recibos prestados. Cabe mencionar que los que integran este último grupo no figuran en la estructura del Ministerio, ya que no hay un instrumento legal que los avale.
"Apoyamos a los compañeros y compañeras precarizados que fueron despedidos en las últimas semanas y nos preocupa el 31 de marzo, porque caen todos los contratos COVID. Son un total 75 compañeros que no tendrán continuidad y servicios enteros quedarán desmantelados", expresó Julia Pizola, delegada de ATE, a los medios locales.
"En los últimos 20 años observamos que hay una política de achique del Estado. En 1996 teníamos 1.020 trabajadores y hoy tenemos 750. Hemos perdido más de 200 cargos", dijo.
Esteban: Van a seguir trabajando
Así lo anunció el ministro de Salud de la provincia, Juan José Esteban, en relación a los reclamos del personal del PEC, que según lo informado trabajarían hasta el 31 de marzo. El ministro anunció que deben estar tranquilos porque van a seguir trabajando.
En cuanto a la situación de los contratos COVID, dijo que serán analizados en su totalidad y se trabajará arduamente para llegar a buen puerto.
Una psicóloga para 100 mil
Al vencimiento de los contratos COVID se suma el reclamo de psicólogas. El hospital San Vicente de Paúl cuenta con un equipo de salud mental de tres psicólogas. Ellas brindan contención y tratamiento psicológico a todas las personas que lo requieran y en 2020 ayudaron a contener a centenares de personas que sufrieron COVID-19.
En los próximos días darían de baja a dos de esas profesionales contratadas de manera precarizada durante la pandemia.
Alejandra Paniagua, una de las psicólogas que ingresó con contrato COVID, manifestó que durante el año pasado se los renovaban cada 3 meses pero la última notificación que recibieron es que rigen solo hasta el 31 de marzo.
La profesional indicó que si esto ocurre el nosocomio quedaría con una sola psicóloga (de planta permanente) para una población de más de 100 mil habitantes aproximadamente.
La preocupación entre los trabajadores que estuvieron durante esos meses críticos crece cada vez más. “No nos abocamos solo a COVID, siempre fuimos multifunción”, expresó.