Los narcos no paran y sobre todo en la frontera caliente del norte argentino. Frente a esto las fuerzas nacionales y provinciales siguen luchando contra el narcotráfico. El martes por la tarde en Pichanal personal policial intervino en el momento en que se realizaba una transacción de droga.
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Los narcos no paran y sobre todo en la frontera caliente del norte argentino. Frente a esto las fuerzas nacionales y provinciales siguen luchando contra el narcotráfico. El martes por la tarde en Pichanal personal policial intervino en el momento en que se realizaba una transacción de droga.
Fuentes consultadas por El Tribuno indicaron que al parecer se trató de una entrega, dado que los uniformados recibieron un llamado anónimo donde les indicaron con precisión la transacción que dos grupos iban a realizar. Tras recepcionar la información, una comisión policial se alistó y salió a las calles; irrumpir y sorprender a los narcos era el objetivo.
Cerca de las 16 del martes señalaron que en la calle Rivadavia, cerca de las inmediaciones del cementerio municipal, dos bandos narcos intercambiarían mercadería; el mensajero dejó la hora exacta. Tres horas después, con la policía haciendo guardia en el lugar, se hizo presente un VW Gol Pawer y una moto; los ocupantes del primer vehículo entregaron una mochila a los motociclistas. En ese momento intervinieron los efectivos y ambos vehículos se dieron a la fuga en distintas direcciones. Los motociclistas lograron escapar arrojando dos mochilas en la vía pública y los del auto fueron detenidos. Con la presencia de testigos los uniformados abrieron las mochilas donde había 17 bultos con sustancias blanquecinas, las que sometidas a pruebas de narcotest dieron positivo para cocaína con un peso total de 17,775 kilos.