El pasado 16 de abril se realizó en la EEA Salta del INTA, Cerrillos, la “Jornada de semilla de poroto”, organizada por la Dirección de la EEA y la Asociación Cooperadora de la misma. Participaron una veintena de asistentes, entre productores, asesores y exportadores de legumbres de Salta y Jujuy; debido a la situación sanitaria, la convocatoria fue restringida y se realizó de acuerdo con el protocolo sanitario vigente.
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El pasado 16 de abril se realizó en la EEA Salta del INTA, Cerrillos, la “Jornada de semilla de poroto”, organizada por la Dirección de la EEA y la Asociación Cooperadora de la misma. Participaron una veintena de asistentes, entre productores, asesores y exportadores de legumbres de Salta y Jujuy; debido a la situación sanitaria, la convocatoria fue restringida y se realizó de acuerdo con el protocolo sanitario vigente.
El objetivo de jornada fue mostrar los lotes de semilla de alta calidad de poroto tipo blanco alubia (Alubia Selección Cerrillos, Paloma y Perla INTA) y tipo negro pequeño (NAG 12 INTA) que se llevan adelante en el predio.
“Esta semilla es puesta a disposición de la producción a través de la Asociación Cooperadora, quien apoyó este proyecto desde 2017, año en que se comenzó por realizar un exhaustivo trabajo de depuración de los lotes, aplicando la tecnología desarrollada en INTA para la producción de semilla de alta calidad”, explicó la licenciada Viviana Failde, integrante del Grupo Innovación en Sistemas Agrícolas.
Guiados por los técnicos del INTA, los asistentes recorrieron ensayos de mejoramiento genético de poroto de distintos tipos comerciales, de donde saldrán las nuevas variedades, de superior calidad, con mejores y más estables rendimientos que los actuales.
Los anfitriones hicieron hincapié en la necesidad de mantener y aumentar la calidad y competitividad del producto a exportar. “Uno de los pilares de ello es la utilización de semilla de calidad, tanto genética como sanitaria y biológicamente hablando”, remarcaron.
El ingeniero agrónomo Mario De Simone, uno de los integrantes del INTA involucrados en el proyecto, destacó la necesidad de organización, fortaleciendo a cada uno de sus integrantes, donde la solución de los problemas de cada eslabón sea buscada en conjunto.
“En síntesis, se pudo apreciar que la institución ha realizado mucho trabajo en la generación de variedades y de tecnología de cultivo, observado en los lotes de semilla, pero que hay un futuro promisorio, ya que en forma constante e ininterrumpida se ha seguido trabajando en mejoramiento genético, tanto en forma tradicional como con métodos biotecnológicos para seguir avanzando en brindar a la producción más y mejores variedades y tecnología, que en definitiva son parte de los objetivos y deberes institucionales”, resumió Failde.