Era la 1 de la madrugada de hoy en la ciudad israelí de Beersheba cuando Florencia Aides, de 26 años, aceptó una videollamada con El Tribuno. Hay seis horas de diferencia. Ella había pasado gran parte del día resguardada en un refugio, junto a su familia. Mientras se establecía la conexión por Zoom, diez misiles fueron disparados desde la Franja de Gaza sobre Beersheba. La cúpula de hierro, el escudo antimisiles de Israel, impidió que cayeran sobre la ciudad. A pesar de eso, Florencia, que vivió en Salta hasta enero pasado, se veía y escuchaba tranquila.
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Era la 1 de la madrugada de hoy en la ciudad israelí de Beersheba cuando Florencia Aides, de 26 años, aceptó una videollamada con El Tribuno. Hay seis horas de diferencia. Ella había pasado gran parte del día resguardada en un refugio, junto a su familia. Mientras se establecía la conexión por Zoom, diez misiles fueron disparados desde la Franja de Gaza sobre Beersheba. La cúpula de hierro, el escudo antimisiles de Israel, impidió que cayeran sobre la ciudad. A pesar de eso, Florencia, que vivió en Salta hasta enero pasado, se veía y escuchaba tranquila.
¿Cómo llegaste a Israel?
Me vine en enero y terminamos en la ciudad de Beersheba que es una de las ciudades más grandes que tiene Israel. Hoy es una situación fuera de lo común. Me vine con mi familia, donde ya estaban instalados mis padres desde diciembre del año pasado y después llegamos con mi marido y mi hijo.
Ahora estás en un refugio...
Estamos en un búnker por seguridad, porque Israel está pasando un momento muy complicado y la gente está en ‘modo alerta’. Israel es un país demasiado seguro, que tiene a su gente protegida y hay un protocolo de seguridad que hay que seguir. Es una sensación un poco extraña.
¿Dónde está ese refugio?
Yo vivo en un departamento. Desde que llegué a la ciudad decidimos alquilar con mi familia, pero en este preciso momento estoy en un refugio en otra parte de Beersheba porque decidimos estar con mi familia, tanto con mi mamá, con mi papá y con mi hermano. Estas son situaciones que ameritan que la gente esté unida, entonces preferimos venirnos y estar seguros acá. De todas maneras Israel cuenta con estos búnkeres en todas partes para gente que circula por la calle, para gente que está viviendo en departamentos y demás. Hay departamentos incluso en todo el país que tienen una habitación que es de resguardo y seguridad. Acá no hay persona que no esté resguardada y cuidada por el Estado de Israel.
¿Ustedes estuvieron recién con las alarmas encendidas, no?
Sí, fue así. Fueron en total diez misiles tirados desde la frontera de Gaza directamente sobre Beersheba. Lo que pasa es que Beersheba es una de las ciudades más grandes y es uno de los blancos que tiene en potencia.
¿A cuántos kilómetros de esa ciudad está la Franja de Gaza?
Estamos a 40 kilómetros.
Hasta enero estuviste en la Argentina, que es un país de paz, ¿qué sentís al vivir esto?
Mirá mi realidad es la siguiente, y creo que coincido con toda mi familia, y es que a pesar de haber estado en un país que no pasa por estas situaciones, yo volvería a elegir Israel. Es el país que elegí para vivir a costa de esto. Nosotros ya sabíamos que esto podía pasar o que era una probabilidad. No sabía que nos iba a tocar muy pronto como en este caso, pero, como te explico, Israel cuida mucho a su pueblo, las fuerzas están preparadas para estas cuestiones y eso no pasa en la Argentina. Justamente ese fue uno de los motivos por los que me vine acá. Yo tengo un nene muy pequeño de 6 años, el cual no recibía buena educación, no había seguridad..., es un país que está, a mi parecer, tocando fondo. Y nada. Israel, a pesar de que tiene sus conflictos, cuida a su gente y es lo que Argentina no hace. Soy argentina porque nací ahí pero soy israelí porque decido y seguiría decidiendo vivir acá.
¿Hay mucha gente en el refugio donde estás?
Bastante, hay israelíes, rusos y de otras nacionalidades. La verdad que la gente es bastante cálida, te brinda su apoyo. Nos han llamado hoy familiares de una amiga de mi madre diciendo que cualquier cosa podemos ir a su casa que es al norte de la ciudad, que ahí está un poco más seguro. La gente es así, te abre la puerta sin conocerte. Es otro mundo. Literalmente es otro mundo.
A pesar de lo que sucede se te ve tranquila...
Es porque el pueblo de Israel te da esa tranquilidad. No dejan que sus personas estén expuestas en ningún momento y eso es muy importante en cualquier país. En realidad son muchas cosas. Yo creo que tengo más sentimientos negativos por todo lo que sale en Argentina en relación a lo que está pasando aquí, porque considero que los medios no están informados. Hoy me levanté y empecé a leer y leía cosas como que los terroristas son los israelíes. La verdad que me quedé impactada. Me parece muy injusto porque hay un montón de argentinos viviendo acá en Israel, un país que nos acogió como si hubiéramos nacido aquí y que nos protege como parte de los suyos. Es inquietante la verdad.