La comunidad de Cerrillos conmemora hoy los diez años de la partida del diácono Diego Guzmán, quien estuvo durante varios años a cargo de las actividades parroquiales del pueblo y vicarías de la zona. Se trató de una figura relevante en el ámbito social y religioso.
Guzmán fue también telegrafista, concejal, juez de paz e intendente interino. Trabajó en la Comisión Pro Templo para construir el nuevo edificio de la iglesia local. Vale la pena recordar que en 1844 un terremoto afectó al segundo oratorio erigido en honor a San José, por lo que fue demolido a mediados del siglo XIX. Luego, el presbítero Serapio Gallegos levantó uno nuevo. Dicho edificio se derrumbó a mediado de 1980, a causa del deterioro de su estructura y fue reemplazado el actual. Como presidente del Concejo Deliberante, en 1973, impulsó la creación del primer colegio secundario del pueblo.
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La comunidad de Cerrillos conmemora hoy los diez años de la partida del diácono Diego Guzmán, quien estuvo durante varios años a cargo de las actividades parroquiales del pueblo y vicarías de la zona. Se trató de una figura relevante en el ámbito social y religioso.
Guzmán fue también telegrafista, concejal, juez de paz e intendente interino. Trabajó en la Comisión Pro Templo para construir el nuevo edificio de la iglesia local. Vale la pena recordar que en 1844 un terremoto afectó al segundo oratorio erigido en honor a San José, por lo que fue demolido a mediados del siglo XIX. Luego, el presbítero Serapio Gallegos levantó uno nuevo. Dicho edificio se derrumbó a mediado de 1980, a causa del deterioro de su estructura y fue reemplazado el actual. Como presidente del Concejo Deliberante, en 1973, impulsó la creación del primer colegio secundario del pueblo.
En 1988 fue ordenado diácono. A partir de entonces brindó servicios en iglesias y vicarías de distintos puntos del departamento Cerrillos y de la zona sur de la ciudad de Salta.
Por su compromiso con la comunidad en el ámbito vecinal, gremial y político fue declarado ciudadano ilustre por el Concejo Deliberante en 2009.
A raíz de una vida de servicio social se ganó el cariño y el reconocimiento de su pueblo. Esta semana, vecinos, amigos y familiares lo recordarán durante las misas que se celebrarán en la parroquia San José.