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García Salado: “El desafío es recuperar al menos 30% del agua que se pierde” 

El presidente de Aguas del Norte cree que lo que falta es producto de la indiferencia histórica de la clase política y quiere cambiar el libreto de cara al futuro. Su máximo objetivo es lograr minimizar las pérdidas de agua al 20% para obtener beneficios cuantiosos en la prestación del servicio.
Domingo, 13 de junio de 2021 02:10

Luis García Salado es un abogado salteño de 69 años que tras una larga carerra en la función pública, hace un año y medio tomó el desafío de lidiar con uno de los poblemas más sensibles de la provincia, el acceso al agua potable. Con entusiasmo y una energía inédita, este funcionario enfrenta las obras en curso y las que se proyectan, arreglar lo que se rompe, mantener en condiciones lo existente. Por hacer, queda todo. 

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Luis García Salado es un abogado salteño de 69 años que tras una larga carerra en la función pública, hace un año y medio tomó el desafío de lidiar con uno de los poblemas más sensibles de la provincia, el acceso al agua potable. Con entusiasmo y una energía inédita, este funcionario enfrenta las obras en curso y las que se proyectan, arreglar lo que se rompe, mantener en condiciones lo existente. Por hacer, queda todo. 

¿Desde una mirada ambiental, cómo define el problema del agua?

El problema del agua es un problema de educación, por eso estamos organizando con el ministro Matías Cánepa una capacitación para docentes, de modo que puedan transmitir a los alumnos conceptos básicos sobre el cuidado del agua que es un recurso finito, del que además depende la vida. Sin agua no hay nada, entonces lo que se busca es que la gente entienda el valor del agua, que el agricultor entienda la importancia de no contaminar el agua porque esa agua va a las napas subterráneas y contamina los pozos. Y no tenemos tantas plantas potabilizadoras como se necesitan. Cada planta es un laboratorio donde se analiza el agua, es el filtro de lo que el agua no debe contener, pero faltan y por eso es imperante no contaminar. 

Además de no contaminar ¿enseñarán a no desperdiciar?

Lo tenemos estudiado. En Salta capital se desperdicia mucha agua con pérdidas, mi desafío es lograr una recuperación de al menos 30% de las pérdidas de agua que darían múltiples beneficios: no agoto las napas subterráneas, tendría una reducción del uso de cloro ya que se usaría solo en los pozos que abastecen a las redes y no en los que estarían parados, tendría por consiguiente un gran ahorro de energía y cuando viene la época seca, octubre y noviembre, en lugar de hacer corte y programación, se pondrían en uso los pozos de reserva. El beneficio sería monstruoso no teniendo pérdidas. 

Lo que me propongo es concretar el proyecto de minimizar las pérdidas de agua, sabemos lo que pasa cuadra por cuadra en Salta capital, pero no hay recursos económicos suficientes para lograrlo todavía, aunque sí tenemos el proyecto de llegar al 20% de pérdidas en toda la provincia. 

¿Cómo piensa lograrlo?

Tengo un muy buen equipo de gente, yo los llamo “los dinosaurios” por la experiencia que tienen: el ingeniero Caramela, el ingeniero Ortíz, Sergio Hoyos, gente honesta, trabajadora, muy capaz desde lo técnico, conocen todo sobre el servicio y son de mi absoluta confianza. Tenemos todo analizado con respecto a las redes, a lo que está bien y a lo que hay que cambiar. En toda la provincia hay un 33% de redes instaladas que hay que cambiar, y que están en el 62% de las localidades de la provincia que son las que pagan el servicio, aunque Aguas del Norte presta servicio en el 100% de la provincia, donde además tenemos un programa de asistencia técnica a localidades no asistidas con el servicio y ahí está el desfasaje económico con el que lidiamos porque la empresa no tiene ningún reconocimiento económico por ese trabajo a pesar de que se emplean equipos, camiones, personal, bombas. En la gestión anterior se reconocía y se pagaba ese trabajo pero ahora no lo están haciendo.

 

¿Por qué esa diferencia?

Primero por cómo encontraron la provincia sin un peso, y luego por la pandemia que obligó a priorizar una serie de gastos imprevistos para afrontar la situación sanitaria. Yo recibí la empresa con una deuda de 400 millones de pesos, tenía que pagar a los principales acreedores, que son los proveedores de bombas y productos químicos y los hablé y armamos un plan de pago en 10 meses sin intereses, mientras nos seguían proveyendo normalmente y nosotros pagando normalmente los productos y las cuotas de la deuda. Esa deuda la pagué. 

¿Hay muchos morosos con Aguas del Norte, es decir que se les pueda cobrar para invertir en obras?

A Aguas del Norte le debe la Provincia de la gestión anterior y de esta gestión también, los municipios devengan alrededor de 8 millones de pesos mensuales por el servicio de agua y en la gestión anterior no habían pagado nunca. Ya en esta gestión hablamos con el ministro Dib Ashur para plantear el pago de la deuda y solo algunos están pagando con la coparticipación. Esta es una empresa comercial, es una sociedad anónima, se rige por la ley de sociedades, por el contrato de trabajo, y por un convenio colectivo. Con esto apunto a que del 100% de la torta del presupuesto de Aguas del Norte, tengo un 20% de usuarios que no paga y está en morosidad; solo desde 2018 a 2020, le están debiendo a Aguas del Norte 1.300 millones de pesos entre provincia, municipios y particulares. Hay particulares que deben 100 mil y 150 mil pesos de agua y como están detectados, empezarán a recibir las intimaciones con el plan de pago con beneficios en el pago de los intereses de acuerdo al plazo en el que elijan pagar.

Y las tarifas, ¿se van a actualizar?

Hace un año que no actualizamos las tarifas de este servicio esencial. Si no se puede actualizar por la pandemia, necesitaríamos que la Provincia nos subsidie porque las obras no pueden parar y se necesita dinero para hacerlas. 

Si el mapa de agua de la provincia estuviese marcado por colores, ¿cuáles serían las zonas rojas?

Una zona roja en cuanto a la prestación del servicio sería Salta capital, donde se pierde el 54% del agua que se introduce al sistema, tenemos más de 140 pozos y tres vías de ingreso de agua: los ríos, el subálveo que es a través de drenes y los pozos. Con la cantidad de pozos que hay en la capital, Aguas del Norte se convierte en el principal cliente de EDESA, pagamos 55 millones de pesos mensuales en energía y cuando se corta la luz, se corta el agua y las redes de distribución se vacían, entonces cuando vuelve la energía, hay que esperar tres horas o más para que se vuelva a introducir el agua en la red. Eso pasa en todas las localidades donde se presta el servicio con pozos. 

Otras áreas rojas por la falta de provisión de agua, serían Santa Victoria Este, Rivadavia, San Martín, lugares donde nunca se invirtió tanta plata como en la gestión de Gustavo Sáenz y es importante decir que todos los proyectos que llevó y lleva el Gobernador a la Nación para conseguir fondos, son hechos por Aguas del Norte porque somos un equipo y trabajamos e coordinación con el ministro Camacho de Infraestructura, que es excelente. 

También hay zonas rojas por la mala calidad del agua, por ejemplo hay mucho flúor en el agua de Morillo, arsénico en San antonio de los Cobres, en Anta y otros puntos. Lo ideal es instalar plantas de ósmosis inversa en esos lugares, pero es imposible porque el costo de mantenimiento es impresionante y la necesidad técnicos que regulen filtros, membranas y bombas, es excesiva. De cada litro además se recupera el 34% del agua y nada más. 

En La Unión hay una y el año pasado se rompieron los dos filtros y el técnico estaba en Formosa y por la pandemia no podía salir de esa provincia, el otro técnico estaba en el Chaco y tampoco podía venir, entonces les pedimos los filtros e instrucciones a riesgo de perder la garantía de la planta. Hay varias en el interior de Salta. Reconocemos que es todo muy difícil, a mi me desvela no tener el dinero suficiente para las obras que solucionen la falta de agua de la gente.

¿Se siente a veces con la manos atadas frente a la demanda? 

Me desespera que del 100% del presupuesto de Aguas del Norte que son 3.500 millones de pesos, haya un 20% de usuarios que no pagan, un 49% que va para personal y aportes previsionales y así y todo la cantidad de personal es mucho menor a la que se necesita por cantidad de habitantes. Son 1.060 empleados en toda la provincia.Yo me le saco el sombrero a los trabajadores de pico y pala que están media noche y madrugada en la calle con el agua hasta la cintura arreglando lo que se rompe. Son realmente valiosos. El 23% es para impuestos, el 16% para pagar la energía; y me queda solo un 18% para la prestación del servicio. Es muy difícil hacer lo necesario así.

Lleva 18 meses al frente de esta empresa, ¿se plantea cambiar la historia?

Yo hago una fuerte crítica a la indiferencia histórica de la clase política. Donde no hay agua y cloacas es porque nunca se hicieron las obras necesarias. Nosotros queremos cambiar la historia, sin dudas. 

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