Directivos del hospital público Materno Infantil presentaron un proyecto para ampliar el laboratorio de medicamentos donde se preparan jarabes, cremas y diversos remedios para cubrir los tratamientos de los niños que reciben asistencia allí. Son alrededor de 1.000 los pacientes crónicos que requieren medicamentos todos los meses. Además, se preparan fármacos para los sectores de Neonatología, que tiene 60 camas, y Oncología, que en ocasiones tiene nueve pacientes internados e internación pediátrica.
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Directivos del hospital público Materno Infantil presentaron un proyecto para ampliar el laboratorio de medicamentos donde se preparan jarabes, cremas y diversos remedios para cubrir los tratamientos de los niños que reciben asistencia allí. Son alrededor de 1.000 los pacientes crónicos que requieren medicamentos todos los meses. Además, se preparan fármacos para los sectores de Neonatología, que tiene 60 camas, y Oncología, que en ocasiones tiene nueve pacientes internados e internación pediátrica.
Es que el espacio actual donde funciona el laboratorio quedó pequeño para satisfacer la demanda existente, y por ese motivo planean adecuarlo y expandirlo.
Dos áreas se consideran para la iniciativa: una no estéril y otra estéril. En la primera se elaboran los medicamentos que se suministran vía oral, parenteral (intravenosa, intramuscular) o dérmicos que no se consiguen en farmacias, ya que estas no comercializan las dosis para niños. Esto ocurre por ejemplo en los casos de los chicos con cardiopatías u otras enfermedades crónicas que necesitan un tratamiento específico.
“Entonces necesitamos prepararlos con las características para que sean administrados en los niños. Las dosis tienen que cubrir la gama de peso: desde un recién nacido hasta un adolescente”, explicó Virginia Ocaña, responsable de la Unidad Farmacia y Esterilización.
Agregó que todo el tiempo se preparan medicamentos nuevos. “Aparece un tratamiento que tiene que adecuarse a un niño, entonces buscamos fórmulas magistrales. Ahora, por ejemplo, buscamos cómo mejorar el nivel de glucemia de un recién nacido”.
Por otro lado, se necesita acondicionar un área estéril segura donde se preparen los fármacos para pacientes críticos que requieren quimioterapia y tratamientos oncológicos.
El hospital Materno Infantil posee equipos sofisticados, específicos y muy caros que no tienen las farmacias de Salta para fraccionar drogas como las que se suministran vía intravenosa o intramuscular. “Sin embargo, los tenemos colocados en un espacio común, entonces tenemos que dividir el personal en turnos porque no podemos trabajar simultáneamente, lo cual ocasiona demoras. Aspiramos a poder crear estas áreas sectorizadas en las que podamos preparar de forma simultánea todo, mejorar las condiciones de trabajo y cubrir la demanda de la población, de nuestros pacientes”, recalcó Ocaña.
Donaciones
El presupuesto estimado de la obra es de 15 millones de pesos, según detalló la responsable.
Será financiada con fondos de la Fundación Hospital Público Materno Infantil.
Las personas o empresas que puedan o deseen realizar sus donaciones tienen que contactarse a la siguiente página web: http://aonorte.gob.ar/donar -fundacion-hpmi/
“Encontrarán en el sitio varias opciones, desde 100 pesos por mes, hasta la elección del monto o una donación por única vez. Las personas que quieran ayudar pueden contribuir para lograr algo que va a ser para la comunidad, a partir de sus propios aportes”, hizo hincapié.
El plazo de realización dependerá de la recolección de los fondos. “Si los recursos son suficientes se podrá iniciar y terminar en un solo tiempo, si no será necesario hacer una priorización y armar el laboratorio por bloques”, dijo.
La nueva infraestructura debe tener particularidades, como pisos, techos sin rugosidades, pinturas especiales, piletas, un sector para ropa estéril y de preparación. “Todo tiene que ser lavable, desinfectable, similar a un quirófano, sin riesgo de contaminación”, detalló.
También está previsto aplicar un sistema de ventilación de área filtrado, ya que al sector no puede ingresar aire ambiente contaminado. Este sistema tal vez sea lo más costoso. Los profesionales del hospital estiman que si bien la inversión será grande, se amortizará rápidamente.
“Una de las tareas que se hará es fraccionar los medicamentos para que sean utilizados por varios pacientes. Por ejemplo, hay una droga para tratamiento oncológico que cuesta 600 mil pesos el frasco. Si trabajamos en espacio estéril seguro podemos fraccionarlo en dos partes y aprovechar para que la reciba otro paciente más”, finalizó Ocaña, quien también es farmaceútica.