La muerte de un menor discapacitado fue el disparador anoche de un multitudinario velatorio en barrio Sarmiento. Cientos de vecinos de todas las edades se acercaron hasta el domicilio de la familia Cruz, golpeada por un descalificante acto de violencia sufrido por un joven discapacitado, Emanuel Martín Cruz, de 17 años, quien fue asesinado por una banda de jóvenes en un desolado como oscuro descampado ubicado en villa Los Sauces.
La muestra de dolor en los vecinos fue casi interminable.
Su padre, que anoche dialogó con El Tribuno, se mostró consternado y no salía de su perplejidad ante lo impensado y antinatural para un padre -si se quiere- que es la pérdida de un hijo adolescente.
Martín Emanuel Cruz, domiciliado en barrio Sarmiento, había ido al parecer junto a otros compañeros a una “juntada” en barrio Santa Rita, y en circunstancias aún no esclarecidas fue perseguido y ultimado de una decena de puñaladas por una banda de jóvenes, tres de los cuales ya están detenidos, quienes lo asesinaron con fines de robo, al parecer.
El hecho se consumó en un desolado terraplén de villa Los Sauces, sobre la naciente de la avenida Juan XXIII, en el oeste de la capital.
El Tribuno dialogó con Martín Cruz (39) enfrente de su domicilio, durante las honras fúnebres de la víctima.
“Estoy muy mal por esta situación. Él era mi compañerito de toda la vida, de todas las pescas. Íbamos siempre y teníamos previsto ir el ayer (por el domingo) al dique”.
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La muerte de un menor discapacitado fue el disparador anoche de un multitudinario velatorio en barrio Sarmiento. Cientos de vecinos de todas las edades se acercaron hasta el domicilio de la familia Cruz, golpeada por un descalificante acto de violencia sufrido por un joven discapacitado, Emanuel Martín Cruz, de 17 años, quien fue asesinado por una banda de jóvenes en un desolado como oscuro descampado ubicado en villa Los Sauces.
La muestra de dolor en los vecinos fue casi interminable.
Su padre, que anoche dialogó con El Tribuno, se mostró consternado y no salía de su perplejidad ante lo impensado y antinatural para un padre -si se quiere- que es la pérdida de un hijo adolescente.
Martín Emanuel Cruz, domiciliado en barrio Sarmiento, había ido al parecer junto a otros compañeros a una “juntada” en barrio Santa Rita, y en circunstancias aún no esclarecidas fue perseguido y ultimado de una decena de puñaladas por una banda de jóvenes, tres de los cuales ya están detenidos, quienes lo asesinaron con fines de robo, al parecer.
El hecho se consumó en un desolado terraplén de villa Los Sauces, sobre la naciente de la avenida Juan XXIII, en el oeste de la capital.
El Tribuno dialogó con Martín Cruz (39) enfrente de su domicilio, durante las honras fúnebres de la víctima.
“Estoy muy mal por esta situación. Él era mi compañerito de toda la vida, de todas las pescas. Íbamos siempre y teníamos previsto ir el ayer (por el domingo) al dique”.
Siempre estuve trabajando en el remís (desde hace ocho años es chófer), le escribí para que vuelva a la casa porque íbamos a ir temprano a pescar y me dijo que ya venía, pero luego me llamó mi hija para decirme: ‘Papá, apuñalaron al Bebé’, así le decíamos. El joven tenía una discapacidad y era apodado ‘Renguito’”.
“Fui a la salita de Villa Primavera, pero ya estaba sin vida mi hijo. Me arrebataron a mi compañero de toda la vida. Dormía conmigo, íbamos a pescar, a acampar”, agregó el hombre, quebrado por la desgracia.
Luego agregó: “Por el hecho hay tres personas detenidas y un montón de versiones sobre el crimen. Una, que fueron a un cumpleaños y al parecer salió de la fiesta y estos matones lo asesinaron. Lo mataron como a un animal o peor, porque ni a un animal matan así, no quiero ni preguntar cuántas puñaladas le dieron”, reflexionó. “Dicen que son tres personas las culpables pero para mí son más. Le robaron las zapatillas, la gorra de la Selección argentina. Las zapatillas se las hallaron al chico de 19 años que lo apuñaló, falta que secuestren el arma blanca, la gorra. El celular estaba en el bolsillo. Pienso que son más personas, no sé”, afirmó. Consultado por el lugar donde lo mataron, en Villa Los Sauces, dijo “es un barrio muy peligroso como muchos otros de Salta”.
Martín Cruz estuvo acompañado por una multitud de vecinos, de quienes dijo: “Lo querían mucho a mi hijo”.