Gendarmería Nacional si bien tenían una orden de allanamiento, en el marco de una investigación por narcotráfico, en la solicitud judicial el domicilio que figuraba nada tenía que ver con el allanado. Los dueños de casa leyeron el documento y alertaron a los uniformados que se habían equivocado de numeración, los gendarmes realizaron una comunicación y lejos de desistir siguieron en el lugar. Se terminaron llevando bolsas con ropa pese a las facturas de compra que les exhibió la dueña.
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Gendarmería Nacional si bien tenían una orden de allanamiento, en el marco de una investigación por narcotráfico, en la solicitud judicial el domicilio que figuraba nada tenía que ver con el allanado. Los dueños de casa leyeron el documento y alertaron a los uniformados que se habían equivocado de numeración, los gendarmes realizaron una comunicación y lejos de desistir siguieron en el lugar. Se terminaron llevando bolsas con ropa pese a las facturas de compra que les exhibió la dueña.
"Se equivocaron en la numeración, era en la calle San Martín y pasaje Lucardi 26 donde debían llevar a cabo el procedimiento y entraron en la casa número 82. Desde el Juzgado de Garantías 2 de Salta mandaron a allanar buscando ciertas personas y objetos que estuvieran vinculados a una causa con la cual mi cliente no tiene relación. Ingresaron al domicilio equivocado", apuntó el abogado de la familia damnificada, Norberto Gabriel Ru. Según la familia, se trató de una irrupción violenta, sin previo aviso y a punta de pistola. "Una de las hijas de los dueños sostuvo que la apuntaron con un arma de fuego y sufrió un shock". La menor tuvo que ser atendida por personal de Salud.
Los damnificados, la pareja y cuatro hijos, a través de su representante legal analizaron lo sucedido y en el transcurso de esta semana presentarán la denuncia. Se trata de un yerro grave por parte de la fuerza nacional que a solicitud de la Fiscalía Federal y el Juzgado 2 de Salta capital ingresaron a la vivienda equivocada. "Una vez que se dieron cuenta de que no era la casa que debían allanar, en el acta que suelen hacer en ese tipo de procedimientos dejaron constancia de eso", apuntó el abogado en diálogo con El Tribuno.
Luego de entablar una comunicación telefónica, y sabiendo que estaban en el lugar equivocado, los gendarmes decidieron secuestrar bolsas con ropa que al parecer supusieron ilegal, sin argumentar dicho accionar. La dueña de casa les exhibió las facturas perteneciente a esa mercadería pero fue en vano. Lo paradójico del mal procedimiento, en medio de un enorme despliegue, es que los uniformados se fueron del lugar sin siquiera asomarse a la casa que debía allanar.
El vínculo del mal proceder
El allanamiento equivocado puede tener relación con el operativo que durante la madrugada del domingo realizaron los gendarmes con la detención de un hombre que transportaba más de 84 kilos de cocaína. Luego del procedimiento, donde intervino la Fiscalía Federal a cargo de Santiago Snopek, desde el Juzgado de Garantías interviniente ordenaron al menos siete allanamientos, cinco en la ciudad de Orán. Sospechan que uno de ellos fue el equivocado.