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Choferes de alta montaña: “Manejar a más de 4.500 msnm en geografías extremas es un reto de todos los días”

En San Antonio de los Cobres preparan choferes especializados para hacer frente a la demanda del sector minero. 
Domingo, 13 de noviembre de 2022 09:59

Hoy el desarrollo minero en la provincia se ha convertido en una usina de oportunidades, por lo tanto de grandes expectativas para el mercado laboral. Si bien se trata de un sector caracterizado por los “buenos salarios”, también es cierto que requiere de preparación. No hay espacio ni lugar para las improvisaciones. 
Lazaro Lamas (41) es chofer de alta montaña y trabaja en GVH, una empresa de logística que brinda servicios al sector minero. Es el encargado de transportar pasajeros, víveres y repuestos, y escoltar convoyes de camionetas, buses y camiones con materiales por los difíciles caminos que atraviesan los cordones montañosos hasta las explotaciones mineras. Es una tarea nada sencilla, pero que lo apasiona. 

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Hoy el desarrollo minero en la provincia se ha convertido en una usina de oportunidades, por lo tanto de grandes expectativas para el mercado laboral. Si bien se trata de un sector caracterizado por los “buenos salarios”, también es cierto que requiere de preparación. No hay espacio ni lugar para las improvisaciones. 
Lazaro Lamas (41) es chofer de alta montaña y trabaja en GVH, una empresa de logística que brinda servicios al sector minero. Es el encargado de transportar pasajeros, víveres y repuestos, y escoltar convoyes de camionetas, buses y camiones con materiales por los difíciles caminos que atraviesan los cordones montañosos hasta las explotaciones mineras. Es una tarea nada sencilla, pero que lo apasiona. 

 

“Hoy puedo decir que conozco la zona como la palma de mi mano, pero de la misma manera puedo afirmar que ningún viaje es igual a otro. El mal estado de los caminos, las condiciones del tiempo, las dificultades propias de la geografía de la región y un tránsito cada vez más intenso y desordenado, tornan cada viaje en un nuevo desafío”, explicó.

 

 

Manejar por encima de los 3.500 msnm hasta los más de 4.660 msnm (Abra del Gallo) requiere de mucha pericia, y ésta se consigue con la experiencia y una minuciosa preparación previa. “La Puna tanto salteña, como jujeña y catamarqueña es muy complicada de transitar. En temporada seca me tocó atravesar verdaderas tormentas de tierra, que reducen la visibilidad a prácticamente cero y las piedritas en suspesión golpean de lleno los parabrisas hasta picarlos por completo. Si no se actúa a tiempo quedan destruídos”, contó Lázaro. Frente a este tipo de situaciones -explicó- hay que aplicar ciertos protocolos, como cruzar la camioneta a contra viento y detenerse. “Las ráfagas son muy bravas, jamás hay que subestimarlas”, resaltó.

 

En época de lluvias, el terreno se pone resbaloso y hay que extremar las medidas de precaución. “Constantemente se debe chequear el camino. Hay quebradas que se pueden pasar, otras que no. En algunas ocasiones hay esperar algunas horas y hasta días para poder continuar camino”, señaló el baquiano. 

 

 

Lazaro recordó que en una ocasión, durante un viaje a Sico su camioneta quedó atascada en el barro, un alud cruzó el camino en plena madrugada. “Me tomó por sorpresa. Bajé, me puse el equipo de lluvia, y pala y pico en mano tuve que desentarrar una a una las ruedas. Por eso es importante contar con las herramientas adecuadas y saber qué hacer en cada caso. Hay que tener llaves especiales, martillos, malacate, tuercas, bulones, cuerdas, etc”, relató.  

En invierno, las bajas temperaturas cercanas a los -10º y el hielo requieren de un manejo especializado. “Sin lugar a dudas, ser chofer de alta montaña requiere de una preparación profesional. Para recorrer la Puna se necesita experiencia. Soy un agradecido a GVH que me dio la oportunidad y a mucha gente valiosa que me enseñó los secretos de este trabajo, como mi maestro Manuel Sosa”, destacó el chofer.

 

Son muchos los puntos a tener en cuenta, detalló el chofer: “Los vehículos no se comportan de la misma manera en altura, es fundamental un buen mantenimiento. Por más que uno conozca la zona, nunca hay que confiarse. Es importantísimo saber cómo actuar frente a cada fenómeno climático, ya sea que se trate de hielo, fuertes vientos o de lluvias intensas”.  

 

 Lázaro Lamas


Adentrarse en los caminos a Minas Pirquitas, Antofagasta de la Sierra, Sico, Cauchari, Tolar Grande, los salares de Arizaro, Del Diablo, Pocitos, Del Hombre Muerto, Olacapato, entre otros puntos extremos, puede resultar para muchos una aventura única en la vida. Para Lázaro es algo de todos los días. “Me gusta mi trabajo, me lleva a terrenos inhóspitos, me aporta mucha experiencia. Uno nunca sabe hasta cuando y hasta donde... Cada viaje y cada hora la disfruto intensamente”, concluyó Lázaro.

 

Preparan conductores de alta montaña    

Este fin de semana se llevó a cabo la primera práctica profesional de los alumnos y alumnas que participan de los cursos para conductores de alta montaña en San Antonio de los Cobres.

Estuvieron a cargo de un chofer senior. En la oportunidad se brindó también una charla técnica y se abordaron temáticas relacionas a las diferentes situaciones que se pueden presentar en la Puna, las medidas de precaución que se deben adoptar, el chequelo de los vehículos, entre otros puntos. Realizaron una parada en Olacapato. Pudieron tener una primera experiencia acerca de los retos que presentan los caminos la Puna, cómo deben modular los conductores de alta montaña, cuales son los códigos de comunicación, etc. Es decir, la aplicación de la teoría aprendida durante los meses previos.

 

De cada práctica participan grupos de entre 4 y 8 choferes. Esto les permite completar las horas de práctica profesional en vehículos de hasta cuatro toneladas preparados para la alta montaña, para el traslado de pasajeros, como líderes de convoyes, escoltando cargamentos, colectivos, indicando los peligros del camino, la presencia de calamina, sedimento suelto, barrancas, curvas ciegas, subidas y bajadas empinadas, trazas desgastadas y salientes. “Es un reto importante”, explicaron desde GVH y DHL Global, a cargo de las actividades. 

Los alumnos se preparan en seguridad e higiene, procedimientos, primeros auxilios, supervivencia, comunicación satelital, inglés, protocolos de bioseguridad, documentación y mecánica básica, entre otros aspectos.  

Vale la pena destacar que en Campo Quijano se brindará la misma capacitación.

 

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