Gustavo Carrizo tiene una de las áreas claves del Gobierno de Salta: la construcción de viviendas. El funcionario detalló las inversiones que vendrán y las casas que se construyeron en la gestión. Y deja algo en claro: "Para bajar el déficit habitacional hay que trabajar todos los años".
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Gustavo Carrizo tiene una de las áreas claves del Gobierno de Salta: la construcción de viviendas. El funcionario detalló las inversiones que vendrán y las casas que se construyeron en la gestión. Y deja algo en claro: "Para bajar el déficit habitacional hay que trabajar todos los años".
¿Cómo encaran la política de planificación habitacional para la provincia?
A través de una decisión política encaramos la política habitacional con el criterio que corresponde, entendiendo que cuando hablamos de una vivienda, hablamos de un hogar, hablamos de mano de obra, de crecimiento y desarrollo. De esa manera hoy podemos decir que tenemos 4 mil viviendas en ejecución, 3 mil viviendas entregadas, 2.500 viviendas con proyectos presentados ante Nación.
El primer año d gestión (2020) ejecutamos un presupuesto de 1700 millones de pesos, en 2021 fue de 2.500 millones, este año fue de 10 mil millones. Y tenemos la proyección para el año que viene de 42.700 millones. A eso le incluimos nosotros todo lo que son las obras de desarrollo urbano del Renabap. Al participar en lo que es el hábitat vemos lo que es red cloacal, red vial, de desagües pluviales.
¿Qué déficit habitacional hay en la provincia?
Hoy tenemos 16.400 futuros beneficiarios. Es gente en condiciones de recibir una vivienda porque están inscriptos con carpeta renovada. La renovación es anual. Seguro que son más los que aspiran a una vivienda, pero no completan la documentación o bien no se inscriben.
¿Tener ingresos en blanco es clave para anotarse?
Partamos de la base que todos tenemos ingresos. Ya sea que reciban alguna ayuda del Estado o tengan algún ingreso independiente, o en relación de dependencia. No es condición sine qua non para inscribirse al IPV un ingreso. Si es condición, por el momento, tener un grupo familiar y no tener otra vivienda en Argentina.
¿Está cerca algún sorteo de casas para la Capital?
En Capital todavía no. Queremos ser cautos. Haremos el sorteo cuando estemos cerca de la finalización de obras. Estamos a punto de sortear 100 viviendas en Orán. Se trata de un proyecto iniciado en 2015. Nos tomamos casi 8 años para finalizar un proyecto. Esto lo reactivamos con nuestra gestión, por medio del programa Reconstruir. Para reducir el déficit hay que trabajar todos los años.
¿Cómo vienen con el Plan Mi Lote ?
Nosotros, el IPV, en el Plan Mi Lote participamos solo en la adjudicación y en la inscripción. Silvina Abilés está al frente del plan.
¿Las nuevas casas tienen concepto de sustentabilidad?
Hay distintos conceptos. Nosotros dejamos de ver la vivienda IPV como una vivienda social, una vivienda para un sector de bajos ingresos, no. Hablamos totalmente de una familia ascendente. Entendemos que tiene que ser una vivienda amplia, con aberturas mucho más amplia que con la que se trabajaba actualmente. Son viviendas que tienen una cochera, tienen un tratamiento térmico con un índice que ayuda a reducir el consumo de energía. Después tenemos calefones solares, las puertas son de madera y las aberturas de aluminio con doble vidriado, lo que se busca es no consumir tanto calor en invierno y no consumir tanto frío en verano. Eso nos produce un descenso de la energía tradicional.
Tienen proyectos de construcción de edificios, pensando en un ahorro de espacios...
Tenemos Pereyra Rozas. Hoy en día hablamos que alberga alrededor de 3.000 familias. Hablar de ese número de familias en un predio de 100 hectáreas es una densificación lograda. Lo que buscamos es eso. Buscamos construir una ciudad y el logro de nuestros organizadores y desarrolladores urbanos es buscar la sustentabilidad urbana. Y eso lo logramos a partir de la consolidación de manchas urbanas. Buscamos la reducción del desplazamiento de los habitantes, dentro de un nuevo conjunto. Aquí se reduce los costos operativos, lo que implica el gasto de la vida urbana y buscar preservar el equilibrio entre lo que son los el medio urbano, rural y natural. Todos esos conceptos son lo que buscamos cuando hablamos de una gestión sustentable.
¿Cómo vienen con la construcciones adecuadas a las diferentes geografías de la provincia?
En La Poma estamos por entregar viviendas. Son casa hechas con adobe, que es el material que mejor maneja las inclemencias climáticas y todas las alternancias que tiene la zona. En el mismo contexto estamos trabajando en Seclantás en la zona del Valle de Luracatao. Ahí estamos trabajando con adobe, barro, con madera y piedra de la zona, porque en esa temperatura, esos materiales se comportan de mejor forma que si usáramos los que tenemos en la ciudad.
¿Ya terminaron las viviendas destinadas a los adultos mayores en Pereyra Rozas?
Están prestas a su finalización. Parece increíble que van 12 meses de ejecución y ya están para finalizar. Eso hay que hacer, cuando se contrata una obra, esa obra tiene un plazo que se tiene que cumplir. Lo que se está haciendo en Casa activa es un proyecto innovador. Son 32 unidades habitacionales que van ser entregadas en comodatos a beneficiarios Pami y se tendrá que hacer un estudio con los pasos a dar, no solo para el Pami, sino para el Ministerio de Desarrollo Social. Ahí se va a requerir una ambientación, ya que el predio tiene un centro de día y una pileta de natación.