River Plate armó un verdadero equipo de los sueños para la Copa de la Liga Profesional de Fútbol (LPF), y Boca consiguió tres refuerzos de alto vuelo en el cierre de un mercado de pases que contó con 200 transferencias de cara al torneo que comenzará hoy.
El plantel que dirige Marcelo Gallardo, último campeón del fútbol argentino, sumó ocho nuevos futbolistas, entre los que se destacan el colombiano Juan Fernando Quintero, uno de los héroes en Madrid cuando River le ganó la Libertadores a Boca en 2018, y Ezequiel Barco, proveniente a préstamo a Atlanta United, para reforzar la faz ofensiva ante a la inminente salida de Julián Álvarez a Manchester City de Inglaterra en el segundo semestre.
“Vamos a pelear por todos los frentes. Ojalá tengamos un gran año por delante”, dijo Gallardo en ocasión de la presentación de los refuerzos.
Además, River consiguió a Tomás Pochettino (ex-Austin de MLS), Emanuel Mammana (libre de Zenit de Rusia), Leandro González Pirez (ex-Inter Miami MLS), Elías Gómez (Argentinos Jr.) y Marcelo Andrés Herrera (San Lorenzo).
Por su parte, Boca trajo al sueño de sus hinchas: Darío Benedetto (ex-Elche de España). El atacante, confeso fanático del club, regresó tras un gran paso en el xeneize entre 2016 y 2019, con 38 goles en 62 partidos a nivel local -entre campeonato y copas-, y 8 en 14 a nivel internacional.
Boca concretó además los arribos del defensor Nicolás Figal (ex-lnter Miami MLS), del mediocampista Guillermo “Pol” Fernández (ex Cruz Azul de México) y del arquero Leandro Brey (Los Andes), uno de los mejores de la última Primera Nacional.
Detrás de River y Boca apareció Racing en este mercado de pases, con la llegada del enganche Edwin Cardona, una verdadera apuesta por su talento pero con dudas sobre su capacidad física y su comportamiento afuera de la cancha.
De esta manera, el entrenador Fernando Gago contará con varios futbolistas nuevos, como Gabriel Hauche (libre de Aldosivi), Facundo Mura (Colón/Estudiantes), Gonzalo Piovi (volvió de Colón), Emiliano Insúa (libre de Aldosivi), Jonathan Gómez (a préstamo de Argentinos) y José Luis Gómez (libre de Huracán).
En la vereda de enfrente, Independiente consiguió la contratación de Eduardo Domínguez como entrenador, uno de los directores técnicos más buscados en el mercado local y sudamericano tras haberse consagrado campeón con Colón de Santa Fe en junio pasado.
Sin embargo, la felicidad por la llegada de Domínguez no se tradujo en el arribo de futbolistas y hasta el momento se dieron los desembarcos de los atacantes Damián Batallini y Leandro Fernández, y del lateral Alex Vigo, de buen nivel en Colón y pocos minutos en River.
San Lorenzo sorprendió con la llegada de Ricardo Centurión, sin brillo en Vélez Sarsfield, y con el retorno del delantero paraguayo Adam Barreiro, ambos pedidos por el nuevo DT Pedro Troglio.
Colón de Santa Fe, vigente campeón de la Copa de la Liga, repatrió a Luis “El Pulga” Rodríguez, retuvo a Facundo Farías -en la mira de Boca para mitad de año- y adquirió a Ramón “Wanchope” Ábila.
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River Plate armó un verdadero equipo de los sueños para la Copa de la Liga Profesional de Fútbol (LPF), y Boca consiguió tres refuerzos de alto vuelo en el cierre de un mercado de pases que contó con 200 transferencias de cara al torneo que comenzará hoy.
El plantel que dirige Marcelo Gallardo, último campeón del fútbol argentino, sumó ocho nuevos futbolistas, entre los que se destacan el colombiano Juan Fernando Quintero, uno de los héroes en Madrid cuando River le ganó la Libertadores a Boca en 2018, y Ezequiel Barco, proveniente a préstamo a Atlanta United, para reforzar la faz ofensiva ante a la inminente salida de Julián Álvarez a Manchester City de Inglaterra en el segundo semestre.
“Vamos a pelear por todos los frentes. Ojalá tengamos un gran año por delante”, dijo Gallardo en ocasión de la presentación de los refuerzos.
Además, River consiguió a Tomás Pochettino (ex-Austin de MLS), Emanuel Mammana (libre de Zenit de Rusia), Leandro González Pirez (ex-Inter Miami MLS), Elías Gómez (Argentinos Jr.) y Marcelo Andrés Herrera (San Lorenzo).
Por su parte, Boca trajo al sueño de sus hinchas: Darío Benedetto (ex-Elche de España). El atacante, confeso fanático del club, regresó tras un gran paso en el xeneize entre 2016 y 2019, con 38 goles en 62 partidos a nivel local -entre campeonato y copas-, y 8 en 14 a nivel internacional.
Boca concretó además los arribos del defensor Nicolás Figal (ex-lnter Miami MLS), del mediocampista Guillermo “Pol” Fernández (ex Cruz Azul de México) y del arquero Leandro Brey (Los Andes), uno de los mejores de la última Primera Nacional.
Detrás de River y Boca apareció Racing en este mercado de pases, con la llegada del enganche Edwin Cardona, una verdadera apuesta por su talento pero con dudas sobre su capacidad física y su comportamiento afuera de la cancha.
De esta manera, el entrenador Fernando Gago contará con varios futbolistas nuevos, como Gabriel Hauche (libre de Aldosivi), Facundo Mura (Colón/Estudiantes), Gonzalo Piovi (volvió de Colón), Emiliano Insúa (libre de Aldosivi), Jonathan Gómez (a préstamo de Argentinos) y José Luis Gómez (libre de Huracán).
En la vereda de enfrente, Independiente consiguió la contratación de Eduardo Domínguez como entrenador, uno de los directores técnicos más buscados en el mercado local y sudamericano tras haberse consagrado campeón con Colón de Santa Fe en junio pasado.
Sin embargo, la felicidad por la llegada de Domínguez no se tradujo en el arribo de futbolistas y hasta el momento se dieron los desembarcos de los atacantes Damián Batallini y Leandro Fernández, y del lateral Alex Vigo, de buen nivel en Colón y pocos minutos en River.
San Lorenzo sorprendió con la llegada de Ricardo Centurión, sin brillo en Vélez Sarsfield, y con el retorno del delantero paraguayo Adam Barreiro, ambos pedidos por el nuevo DT Pedro Troglio.
Colón de Santa Fe, vigente campeón de la Copa de la Liga, repatrió a Luis “El Pulga” Rodríguez, retuvo a Facundo Farías -en la mira de Boca para mitad de año- y adquirió a Ramón “Wanchope” Ábila.