Una valiosa valija repleta de cocaína fue abandonada en el interior de un ómnibus de larga distancia cuando personal federal subió a inspeccionar la unidad del transporte público de pasajeros interurbano.
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Una valiosa valija repleta de cocaína fue abandonada en el interior de un ómnibus de larga distancia cuando personal federal subió a inspeccionar la unidad del transporte público de pasajeros interurbano.
La gran sorpresa se llevaron los gendarmes cuando en el interior del ómnibus dejaron una valija en los asientos traseros, equipaje que nadie quiso reclamar.
En total se secuestraron 17 kilos de cocaína distribuidos en los ya conocidos ladrillos de la droga prensada.
Ocurrió al inspeccionar un transporte de pasajeros y pedirle a cada uno que baje del vehículo con sus pertenencias. Un equipaje quedó abandonado.
Al abrirlo, los gendarmes encontraron 17 paquetes con la droga en su interior.
"Efectivos del Control Fijo "28 de Julio", dependientes del Escuadrón 20 "Orán", detuvieron la marcha de un colectivo larga distancia a fines de realizar una inspección física y documentológica en el operativo de prevención vial emplazado sobre la ruta 50", informaron desde la fuerza.
En la oportunidad, el personal de la fuerza solicitó a los pasajeros descender del rodado con sus respectivas pertenencias, pero al momento del control observaron una valija abandonada, sin propietario, por lo que procedieron a abrirla en presencia de testigos y hallaron 17 paquetes rectangulares envueltos en cinta de embalar.
El equipo de Criminalística de la Unidad efectuó la prueba del narcotest a los paquetes, que arrojaron resultado cromáticamente positivo para cocaína con un peso total de 17,755 kilogramos.
Intervino la Fiscalía Federal descentralizada de Orán, que orientó el secuestro del estupefaciente, en infracción a la ley 23.737.