Un grupo de vecinos de villa San Antonio denunciaron en nuestro medio que ya no se puede vivir en las calles de ese viejo barrio salteño.
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Un grupo de vecinos de villa San Antonio denunciaron en nuestro medio que ya no se puede vivir en las calles de ese viejo barrio salteño.
Tanto hombres como mujeres señalaron que los vendedores de drogas ya tomaron posesión de las siguientes calles: Los Partidarios, Ituzaingó, Los Infernales, Damián Torino y pasaje Astigueta, donde un centenar de jóvenes a toda hora deambulan vendiendo, comprando, robando o consumiendo drogas. "Los autos pasan y los dealers inmediatamente les venden la mercancía. Están a toda hora y en la noche se realizan las juntaderas donde comienzan a beber para luego pelear por sus clientes, con los vecinos, con cualquiera que ingrese a esas calles sin el consentimiento de los jefes que distribuyen la droga", contaron. .
"Esto no es todo", dicen los vecinos: los robos son a diario, a las personas, a los automóviles estacionados, a las viviendas; a veces cualquier cosa que puedan vender es inmediatamente levantada.
"No hay ninguna forma pacífica de reclamar, tampoco de denunciar, porque los drogadictos entran en las comisarías y a las dos horas vuelven al barrio sabiendo quién los denunció", expresaron.
"Ahí se tornan ya un peligro para las personas que no compartimos sus vicios y formas de vida", dijeron. Agregaron que la policía acude a los llamados por los desmanes o porque están desnudos caminando por las calles y manteniendo relaciones sexuales en plena luz del día, contra la pared de cualquier vecino. "Cuando llega la policía empiezan a pelear con ella. Luego, muchas personas salen en defensa de estas personas y en contra de la seguridad y tranquilidad pública. Eso no lo podemos entender", dijeron.