No terminó bien el homenaje a Martín Miguel de Güemes en Vaqueros. Todo era una fiesta en conmemoración del 201º aniversario del paso a la inmortalidad del héroe gaucho, cuando el espectáculo del Chaqueño Palavecino fue interrumpido por la Policía de Salta, que le pidió al cancante que baje del escenario y dé por concluido el recital en el festival “Vaqueros le canta a Güemes”.
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No terminó bien el homenaje a Martín Miguel de Güemes en Vaqueros. Todo era una fiesta en conmemoración del 201º aniversario del paso a la inmortalidad del héroe gaucho, cuando el espectáculo del Chaqueño Palavecino fue interrumpido por la Policía de Salta, que le pidió al cancante que baje del escenario y dé por concluido el recital en el festival “Vaqueros le canta a Güemes”.
El artista comenzó a cantar recién a las cuatro de la madrugada de hoy y, mientras hacia las delicias del público y sus fanáticos con el cancionero, la Policía subió al escenario y le pidió que termine con su actuación. “Ya no vuelvo a Vaqueros, no le debo nada a nadie”, dijo enojado. “Me sentí usado”, agregó y aclaró que “está todo bien con el intendente” de la localidad, Daniel Moreno. “La gente, el pueblo, estaba alegre y que suban y te corten, para qué diablos venimos” concluyó el Chaqueño. El público que disfrutaba del festejo lamentó que tuviera que irse.
"Perdón a todos, me voy. Ganó el policía encargado. Los mandan a cortarme a mí. Yo no soy delincuente. Soy pueblo", dijo, antes de retirarse y de tirar un micrófono al piso.