“Me meten en ese quilombo con esa vieja conchuda que ni la conocía”, se escuchó de boca de Nicolás Pachelo sobre María Marta García Belsunce, a partir de la reproducción de una escucha telefónica en el juicio.
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“Me meten en ese quilombo con esa vieja conchuda que ni la conocía”, se escuchó de boca de Nicolás Pachelo sobre María Marta García Belsunce, a partir de la reproducción de una escucha telefónica en el juicio.
Fue uno de los tres nuevos audios que se conoció del caso y durante el juicio en el Tribunal 4 de San Isidro contra Pachelo acusado de matar a su vecina, el 27 de octubre de 2002.
En una de esas escuchas telefónicas, a partir que Pachelo tenía su teléfono intervenido por la causa, fue del 15 de diciembre de 2002: “Me meten en ese quilombo con esa vieja conchuda que ni la conocía. Investigan a todos los socios del club y había otras versiones que yo estaba peleado con la mina a muerte y es todo mentira”, se escuchó en palabras del ahora acusado.
Los otros audios fue a partir de conversaciones de Pachelo con un periodista y también la descripción de un arma de fuego, un fusil, que él quería vender.
Un vigilador contó que tenía encargado monitorear a Pachelo
“Un compañero me dijo que tenía que vigilarlo porque era un chorro de guante blanco, que cuando se iba la gente entraba a robar”, surge de la lectura de la declaración que hizo el empleado de seguridad Carlos Alberto Villalba durante la instrucción de la causa y que ahora ratificó en el juicio.
Según detalló ante los jueces, él “tenía la función de vigilar a `Romeo y Julieta`, ellos son Pachelo y su señora”.
En ese sentido, explicó que tenía que modular con otros puestos de vigilancia cuando había movimientos de Pachelo aunque aclaró que “no veía bien”.
Incluso aclaró: “veo todo borroso, como un bulto” y el juez quiso ponerlo en práctica cuando le preguntó si lo veía a él estando a dos metros: “Veo todo borroso”, insistió.
El vigilante de la empresa Cazadores dijo que él estaba en el puesto de seguridad 4, en la esquina de la casa de Pachelo.