¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

22°
25 de Abril,  Salta, Centro, Argentina
PUBLICIDAD

Homenaje al profesor y culturista Esteban Andreu Emram

El próximo sábado 16 harán una fecha clasificatoria de “El hombre más fuerte de Sudamérica”, con atletas de todo el país.
Jueves, 07 de julio de 2022 02:46

Cuando regresó a Tartagal, en tiempos cuando en el norte casi no se conocía la disciplina del fisicoculturismo, porque sus exponentes solo se veían en el cine o la televisión, su figura resultaba impactante. Era tan así, que su presencia en un paseo por el centro de la ciudad en motocicleta o en el reencuentro con los amigos de su niñez y adolescencia, eran suficiente para darle amplia difusión al culturismo profesional.

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

Cuando regresó a Tartagal, en tiempos cuando en el norte casi no se conocía la disciplina del fisicoculturismo, porque sus exponentes solo se veían en el cine o la televisión, su figura resultaba impactante. Era tan así, que su presencia en un paseo por el centro de la ciudad en motocicleta o en el reencuentro con los amigos de su niñez y adolescencia, eran suficiente para darle amplia difusión al culturismo profesional.

En junio de 1997 el profesor de educación física, fisicoculturista e instructor Esteban Andreu abría aquel modesto gimnasio que con el tiempo se transformó en el mayor centro de entrenamiento del norte, del que salieron atletas que compitieron y lo siguen haciendo a nivel nacional e internacional y que dejaron bien en alto el culturismo norteño y otras disciplinas afines.

Con el tiempo fueron las mujeres (aunque mucho menos en número que los hombres) las que empezaron a incursionar en esta práctica que más que una disciplina deportiva es un estilo de vida que requiere de conocimientos en materia de alimentación, de horas de entrenamiento diario, de mucha concentración mental y de una entrega casi permanente, balanceando proteínas, carbohidratos y fibras a diario, que los hacen lucir figuras talladas.

Al profesor Esteban Andreu Emran siempre le gustó llamarle "maternidad" a su gimnasio "El Mega Gym", que en el mes de junio ya cumplió sus primeros 25 años "porque si bien el culturismo hace rato cumplió mayoría de edad, sigo formando a nuevos atletas", explicaba en una entrevista este tartagalense que se formó en Tucumán y que año tras año fue incorporando mayor conocimiento, a la vez que competía y sumaba a nuevos tartagalenses a esta verdadera pasión.

Tal como se merece este maestro, los atletas actuales planificaron para el próximo sábado 16 de este mes un homenaje a "Piriqui" (el apodo nunca se condijo demasiado con la figura de Esteban), para lo cual realizarán una fecha clasificatoria del South American Strongest Man (el hombre más fuerte de Sudamérica). Con este motivo llegarán a Tartagal atletas de todo el país que conocen y admiran la trayectoria del culturista homenajeado.

Hay pocos profesionales

Como en toda disciplina, muchos son los chicos y chicas que se vuelcan con entusiasmo al culturismo, pero muy pocos los que quedan y se hacen profesionales. El profesor Andreu, con su ojo bien entrenado para estas lides, sabe distinguir muy bien quién tiene toda la disciplina que requiere el culturismo y allí se dispone a trabajar al lado de su discípulos. Pero en los últimos años fue una chica quien cumplió todas las expectativas de Andreu y un poco más, al punto que hoy Mariana Fernández es su compañera en el culturismo, pero también su compañera de vida y la persona que lo ayuda a llevar adelante el gimnasio, el trabajo con todos los que concurren y con los nuevos atletas que se disponen a competir.

Mariana campeona

En el año 2018 la atleta Mariana Fernández se consagró campeona nacional de culturismo en la categoría máster, una de las más competitivas. Al año siguiente se ocupó de entrenar a dos discípulas de General Mosconi y de Orán, que hicieron una excelente performance a nivel nacional, pero cuando todos estaban en el mejor momento sobrevino la pandemia y como la pareja supo explicarlo en su momento, "los primeros en cerrar y los últimos en abrir fueron los gimnasios", lo que significó un golpe artero en la actividad laboral de la pareja que también afectó por lógica sus ánimos. A pesar de que para luchar contra el COVID-19 todas las opiniones científicas apuntaban a que una buena calidad de vida, y la actividad física y deportiva eran barreras fundamentales para el avance de la enfermedad, los gimnasios debieron cerrar, "cuando en realidad tendrían que haber sido considerados, guardando todos los protocolos de seguridad e higiene, una actividad esencial", opinaba Andreu en ese momento. A Mariana siempre le gustó lo visual como las artes manuales, la decoración, el diseño de modas y cuando niña soñaba en Metán, su ciudad natal, con ser modelo. Fue durante los interminables meses de la pandemia que los dos atletas pudieron reconvertirse a una actividad tan alejada de una férrea disciplina deportiva como es el culturismo y se volcaron a la pastelería. Mientras entrenaban solos en ese amplio salón que es el gimnasio, Mariana comenzó a trabajar con el fondant para hacer tortas personalizadas; Esteban se ocupó de las compras de insumos y así capearon ese temporal que para ellos fueron los dos años de pandemia.

La reapertura de todas las actividades los tuvo como los últimos en habilitar el gimnasio, que dejó algunas secuelas en la salud del profesor Andreu, pero su disciplina física y mental lo hicieron enfrentar la situación con mucha más solvencia que a cualquier otra persona, que seguramente con un mismo cuadro clínico lo hubiera pasado mucho peor. Andreu, durante muchos años había organizado diversos encuentros y torneos y en las próximas semanas seguramente con esa sonrisa casi eterna, con esos comentarios cortitos pero graciosos, con esa mansedumbre que lo caracterizan, se emocionará por el merecido homenaje que en definitiva Tartagal le brindará por haber incorporado en toda la región una nueva disciplina deportiva que casi ni se conocía hasta su regreso a Tartagal, pero, sobre todo, será el reconocimiento por promocionar cada día de trabajo, el cuerpo, la mente y la vida sana en el norte.

CORRESPONSALÍA TARTAGAL

PUBLICIDAD