Un temporal de viento y lluvia que azotó a la ciudad de General Güemes en la tarde del domingo dejó sin techo a por lo menos 20 familias, la mayoría del barrio Nueva Esperanza II. El temporal fue sorpresivo dando inicio alrededor de las 18 con la caída de abundante agua y vientos similares a los de una cola de tornado, como lo describieron algunas personas. El fenómeno duró por espacio de 45 minutos, luego se transformó en una lluvia tranquila por otra media hora, hasta que cesó definitivamente.
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Un temporal de viento y lluvia que azotó a la ciudad de General Güemes en la tarde del domingo dejó sin techo a por lo menos 20 familias, la mayoría del barrio Nueva Esperanza II. El temporal fue sorpresivo dando inicio alrededor de las 18 con la caída de abundante agua y vientos similares a los de una cola de tornado, como lo describieron algunas personas. El fenómeno duró por espacio de 45 minutos, luego se transformó en una lluvia tranquila por otra media hora, hasta que cesó definitivamente.
Desde la Dirección de Defensa Civil salieron en busca de viviendas afectadas apenas cesaron los vientos, dirigiéndose los grupos de rescate a los sectores de la ciudad que ya son considerados como puntos críticos. Lo primero que se hizo fue chequear la crecida del río Mojotoro que pone en riesgo a familias que viven en el paraje Torzalito, muy cerca del cauce. "Por suerte el río no creció demasiado, las familias permanecen seguras, solo tuvimos que asistir con cosas mínimas, pertenecías que se mojaron por la lluvia", explicó Andrea Mamaní, secretaria de Desarrollo Social.
El barrio que se vio más afectado fue el Nueva Esperanza II, que ocupa terrenos donde históricamente decantaron las aguas pluviales, anegando las calles e ingresando en algunas viviendas. En esta oportunidad eso no ocurrió, el agua penetró rápidamente el suelo poroso sin llegar a superar el cordón cuenta que se encuentra en construcción: "Nosotros no sufrimos una inundación, lo que nos pasó fue que el viento levantó todo el techo de nuestra casa dejándonos a la intemperie. La torrencial lluvia nos mojó todo lo que teníamos, fue un momento de terror porque no teníamos dónde refugiarnos, además pudimos haber salido lastimados", manifestó Claudia Soloaga, cuyo hogar familiar es muy humilde.
"Llevamos 6 años levantando nuestra casita, cuando terminamos de techarla, hace unos 7 meses, nos mudamos, y ahora nos sucede esto. Lamentablemente necesitamos ayuda porque comprar chapas nuevas será muy difícil, también necesitamos con urgencia colchones y ropa, todo quedó completamente mojado", agregó. Para paliar la situación, y teniendo en cuenta que el alerta amarillo persiste para esta zona, los bomberos le colocaron un plástico muy resistente como trecho, a fin de que tengan refugio.
Otra vivienda afectada en el barrio fue la de la familia Rodríguez, a la que se le volaron las chapas del techo, pero además un árbol que se encontraba en el fondo fue arrancado de raíz, cayendo sobre la tapia de la cocina: "Por suerte solo hubo un daño menor, pero después se nos mojó todo, no tenemos dónde dormir, estoy trabajando a contrarreloj para poner alguna cobertura en los techos, después veré cuántas chapas puedo recuperar", manifestó Benjamín Rodríguez.
Desarrollo Social hizo entrega en forma inmediata de colchones a las familias más afectadas. Con respecto al pedido de chapas, es una gestión que deberán iniciar en Provincia: "Desde anoche que estamos trabajando, estoy realizando un informe para elevarlo a Provincia y conseguir más ayuda, no hubo evacuados porque no se inundaron, las familias que perdieron los techos no quisieron dejar sus casas por razones de seguridad, pero teníamos todo preparado para recibirlas", manifestó Andrea Mamaní.
El barrio Nueva Esperanza II nació como un asentamiento, un importante porcentaje de viviendas aún son precarias. Un acuerdo firmado con Nación le permitió al ejecutivo municipal conseguir fondos por $380.000.000 para dotar al barrio de iluminación, cloacas, agua, cordones cuneta, tanques elevados y obras que se encuentran en ejecución y hacen que la transitabilidad sea muy difícil en las calles del barrio.
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