Jairo Quiroga, un técnico en perforación que estudió en la sede Tartagal de la Universidad Nacional de Salta, y que está a muy poco de rendir su tesis para ingeniero, presentó el pasado 13 de febrero ante el consejo superior de la UNSa una denuncia por mal desempeño en su función y tareas incompatibles contra el hidrogeólogo Carlos Manjarrés, socio de la empresa GMC Perforaciones. La empresa se quedó con la licitación para la perforación de varios pozos que adjudicó el Ministerio de Infraestructura de la Provincia, a consecuencia de la gravísima crisis hídrica que padecieron los departamentos San Martín y Rivadavia desde noviembre del año pasado y que determinaron, entre otras situaciones, que la prestataria del servicio distribuyera agua no apta para el consumo humano, se dispusieran cortes permanentes en el servicio, entre otras medidas.
inicia sesión o regístrate.
Jairo Quiroga, un técnico en perforación que estudió en la sede Tartagal de la Universidad Nacional de Salta, y que está a muy poco de rendir su tesis para ingeniero, presentó el pasado 13 de febrero ante el consejo superior de la UNSa una denuncia por mal desempeño en su función y tareas incompatibles contra el hidrogeólogo Carlos Manjarrés, socio de la empresa GMC Perforaciones. La empresa se quedó con la licitación para la perforación de varios pozos que adjudicó el Ministerio de Infraestructura de la Provincia, a consecuencia de la gravísima crisis hídrica que padecieron los departamentos San Martín y Rivadavia desde noviembre del año pasado y que determinaron, entre otras situaciones, que la prestataria del servicio distribuyera agua no apta para el consumo humano, se dispusieran cortes permanentes en el servicio, entre otras medidas.
Pasado un mes de su presentación en la casa de altos estudios y sin que se tratara su denuncia, Quiroga llegó hasta la Oficina Anticorrupción de la Nación con un expediente que lleva el N° 0000007430 "porque al parecer a la UNSa como entidad educativa no le interesa investigar el tema que presenté ni las múltiples irregularidades que hay en la sede regional Tartagal, a las que también hago referencia en mi denuncia", comenzó explicando.
Jairo Quiroga explicó que "además de todas las irregularidades que denuncié respecto de la empresa GMC Perforaciones que es del director de la sede Tartagal, quien actúa como consejero y como empresario, en la sede Tartagal hay muchas irregularidades. Una de ellas es que quienes como el director tienen dedicación exclusiva, por lo tanto no pueden desempeñarse en otros cargos rentados por fuera de la universidad, tal como lo establece el estatuto universitario, violan de manera flagrante esa disposición. Sin ir más lejos, el secretario académico de la sede Tartagal, el señor Adrián Ortega, como el mismo director y el vicedirector también tiene dedicación exclusiva. Pero Ortega se desempeña en el IEM (Instituto de Enseñanza Media, que depende de la UNSa) en otro cargo también de dedicación exclusiva".
Agregó: "Este directivo presentó una nota para que se le permita tener dos cargos en esta condición por los que lógicamente percibe una remuneración acorde a la misma. Ese pedido se lo aprobó el propio director de la sede, Carlos Manjarrés, ya que ambos son de la misma línea política. Los cargos exclusivos, por los cuales tienen una remuneración mayor, es precisamente por la importancia en sus cargos, poniendo por delante el mismo ante cualquier otro trabajo, pero también por una cuestión de incompatibilidades".
Respecto de la denuncia que presentó en la Oficina Anticorrupción, el técnico explicó que "hay una maniobra muy irregular en la perforación de un pozo a cargo de GMC Perforaciones, que es del director de la sede Tartagal, Carlos Manjarrés, en Coronel Cornejo, donde se sabía que el agua era salada por una información proporcionada por la empresa YPF hace más de 30 años. La perforación se hizo de forma somera y cuando diagnosticaron que no es apta para el consumo humano decidieron abandonar la obra, no entubarla, no cementarla, no hacer el cercado perimetral que corresponde a pesar de que el presupuesto contempla todos esos trabajos. Pero no es el único caso, ya que una maniobra similar hizo esta misma empresa de Manjarrés en General Ballivián, en un paraje denominado La Loma".
"Todos los estudios daban que el agua se encuentra a 500 metros de profundidad, pero la empresa GMC solo tiene un equipo para hacer perforaciones someras, es decir que no supera los 200 metros. Sabían de antemano que a esa profundidad no van a encontrar agua potable, pero lo mismo se quedaron con la obra, a la que por lógica nunca concluyeron los trabajos, con el consabido perjuicio que eso significa para la gente del departamento San Martín, que no puede tener agua segura; por eso se ha vivido una crisis hídrica tan grande pero que nadie garantiza que no se vuelva a presentar", finalizó.
Designaciones "a dedo"
El estudiante precisó que "manejan un entramado por dentro y por fuera de la universidad, por lo que hace pocos días una docente presentó una queja formal, ya que para los cursos de nivelación el director Manjarrés le asignó los cargos a dos personas sin llamar a concurso. Hablé con esta docente y me explicó que ella no lo hace por perjudicar a las chicas a las que se las asignó a dedo, sino porque con esas actitudes se le niega el derecho al resto de los docentes a participar en un concurso".
AGENCIA TARTAGAL