El quinto mes del año cerró con una fuerte suba en el precio de los alimentos, impulsado principalmente por un nuevo aumento en el precio de la carne.
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El quinto mes del año cerró con una fuerte suba en el precio de los alimentos, impulsado principalmente por un nuevo aumento en el precio de la carne.
En Salta, los cortes de carne de vaca siguen aumentando en los locales de Salta y la escala parece no tener fin. En las carnicerías de proximidad, en los barrios, la nalga que es tan importante para las milanesas el kilo ya superó los 2000 pesos. El peceto, los 2500 pesos.
Siempre hablando en promedios para una carnicería del sur de la ciudad, para el mes de mayo, el kilo de cuadril subió de $1.600 a $2.100, la paleta de $1.400 a $1.800 y matambre de 2 mil a 2300 pesos.
Por supuesto que en los mayoristas y supermercados hay ofertas aunque, en el día a día, la carne se lleva gran parte del presupuesto. Las costillas para el asado llegan a los 2 mil pesos y el vacío lo sigue de cerca. Sin embargo los carniceros aseguran que las ventas no disminuyeron y esto sucede porque el precio del pollo está alto.
Hoy en día, un kilo de pechuga casi llega a los 2000 pesos, lo mismo que un kilo de milanesas de pollo preparadas. Conviene siempre comprar el pollo completo que salen por unos 700 pesos de promedio. "Yo ya no traigo pollo porque nadie lo lleva. Lo único que sale son los elaborados como milanesas, hamburguesas y albóndigas, que todo ronda los 2 mil pesos el kilo, y después los cortes más baratos como alitas. La gente ve que les conviene comprar un blando de 1800 pesos y hacer salsas o guisos que rinde más", dijo un carnicero de San Luis.
El cerdo sigue siendo la vedette y el pechito con manto (costillas y vacío) cuesta unos 1300 pesos de promedio, y el solomillo o la bondiola que son cortes 100 por ciento aprovechable promedian los 2 mil pesos.
En consecuencias, casi nadie compra el pollo, salvo que compre la caja de 20 kilos que cuesta 10 mil pesos de promedio. Son muchas las familias que se asocian y compran las cajas porque con esos precios quedan a 500 pesos el kilo.
De acuerdo al relevamiento de la consultora LCG, en la cuarta semana de mayo la suba de precios de los alimentos promediaron 3,5 por ciento, con un incremento importante en el rubro carnes. El aumento de la carne explicó el 70 % de ese incremento semanal. Excluyendo ese rubro la suba hubiese sido de 1,5%.
Con este dato, la inflación mensual alcanzó el 8 por ciento. Las subas de esta semana fueron explicadas sobre todo por el aumento de 7,8 por ciento en carnes.
El rubro comidas listas para llevar lidera la inflación mensual con un aumento de 15,2 por ciento punta a punta. En segundo lugar se ubican los lácteos con un aumento de 12 por ciento promedio en las últimas cuatro semanas. Le sigue de cerca el rubro condimentos con un aumento de 11,5 por ciento en el periodo. En cuarto lugar, y todavía por encima de la inflación mensual promedio, se ubicó el azúcar con 10,1 por ciento de aumento, los aceites con 9,7 por ciento, las bebidas por 8,4 por ciento y panificados con 8,3 por ciento.
Por debajo del promedio de aumento mensual quedaron las verduras (6,7 por ciento), carnes (4,4 por ciento) y frutas (3,3 por ciento). Por debajo del promedio semanal se ubicaron aceites (3,3%), productos lácteos y huevos (1,6%), panificados (1,5 %), verduras (1,4%), azúcar (0,8%), frutas (0,4%), bebidas (0,3%) y condimentos (0,1%).
El pollo, vuela
El INDEC dice que el pollo subió un 40 por ciento en lo que va del año. Sin embargo, en las pollerías de barrio el kilo pasó de 400 pesos a $750. Ahora bien la caja de 20 kg. pasó de $8900 a 10 mil.