Con la ayuda de un perro, efectivos de Gendarmería secuestraron un cargamento de 45 kilogramos de cocaína, que dos sujetos trasladaban ocultos en un tanque de combustible adulterado de una camioneta que procedía de Salvador Mazza, en la frontera con Bolivia y que tenía como destino la ciudad de Buenos Aires.
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Con la ayuda de un perro, efectivos de Gendarmería secuestraron un cargamento de 45 kilogramos de cocaína, que dos sujetos trasladaban ocultos en un tanque de combustible adulterado de una camioneta que procedía de Salvador Mazza, en la frontera con Bolivia y que tenía como destino la ciudad de Buenos Aires.
El procedimiento se concretó el sábado pasado, por la noche, en el puesto control El Naranjo, 18 kilómetros al norte de Rosario de la Frontera. Extrañamente, desde la fuerza no se proporcionó información alguna en torno al hecho, en el que habría dos detenidos.
Fuentes extraoficiales dijeron que hay fotografías sorprendentes del operativo. Los portavoces consultadas por El Tribuno, dijeron que el alcaloide, de máxima pureza y valuado en $2.000.000, fue detectado por un perro antinarcóticos de la fuerza.