Luego de cinco días de protesta la semana pasada en las puertas de la Municipalidad de Santa Victoria Este y una tregua de dos días para recibir respuestas que nunca llegaron, las comunidades aborígenes de la zona volvieron a movilizarse ayer.
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Luego de cinco días de protesta la semana pasada en las puertas de la Municipalidad de Santa Victoria Este y una tregua de dos días para recibir respuestas que nunca llegaron, las comunidades aborígenes de la zona volvieron a movilizarse ayer.
Esta vez sonaron fuerte en el lugar las amenazas de endurecimiento de las medidas y aseguraron que hoy no permitirán que nadie ingrese al edificio comunal.
“Nos dijeron que en la tarde del miércoles debía venir en helicóptero el hermano del gobernador, Rodolfo Urtubey. Es la segunda vez que viene a Santa Victoria, y una vez más nos ha fallado porque aquí nunca apareció”, dijo Ralmiro Rivero, de la comunidad wichi de La Puntana.
Y agregó: “La igualdad de oportunidades es una ficción, porque a nosotros no nos llega. Esto es motivo más que suficiente para tomar fuertes medidas y que alguien nos traiga soluciones”.
Igual posición tuvo Alejo Gallardo, de la comunidad de Misión La Paz y empleado de Salud Pública.
“Nosotros analizamos que esta es una jugada política que nos hicieron y que, en definitiva, no quieren soluciones”, dijo Gallardo al explicar que tenían la promesa de contar con el vehículo para venir a la Capital el martes y a último momento les dijeron que tenía desperfectos.“Nosotros investigamos y la camioneta estaba en un domicilio particular. Todo fue una mentira, por eso permanecemos apostados en las puertas de la Municipalidad y no vamos a dejar entrar a nadie”, remarcó.
Gallardo comentó que estuvo cuatro días en Salta con autoridades de Salud para avanzar en el pedido de construcción de un nuevo puesto sanitario en Las Vertientes, donde la comunidad permanece en el lugar y mantiene secuestrada una camioneta del hermano del intendente Moisés Balderrama.
“En Salud nos dijeron que ellos no manejan fondos y además, por la descentralización de recursos, deslindaron toda responsabilidad en el intendente, que no hace nada. Un nuevo puesto para la enorme comunidad de la zona no está previsto ni en los planes de la Intendencia ni en el Fondo de Reparación Histórica”, explicó y aseguró finalmente que “esto se complica porque no hay autoridades en la provincia que respondan a nada ni a nadie”.