Otra vez ocurrió en un hogar salteño. Conexiones eléctricas deficientes, instalaciones de gas defectuosas y el mal uso de las mismas son un combo peligroso. Esta vez provocaron un accidente que pudo terminar en tragedia. Por suerte no hubo que lamentar víctimas fatales. Al momento de iniciarse el fuego los habitantes de la casa no se encontraban. Este incidente produjo pérdidas materiales importantes para sus dueños. Según Jorge Vázquez, propietario de la vivienda, "se perdió todo". El desasosiego fue tan grande que su mujer tuvo que ser asistida por personal del Samec tras sufrir una crisis de nervios.
El incendio ocurrió en el barrio Democracia, alrededor de la medianoche del sábado. Según Jorge, la catástrofe fue "producto de un cortocircuito". Quiere pensar que fue producto de la mala suerte y no de alguien mal intencionado, "la policía no me dijo nada todavía, yo creo que fue un accidente, no quiero pensar que esto haya sido premeditado", expresó la víctima.
Aparentemente, el incendio fue provocado por la explosión de una garrafa. Esto hizo que se prendiera fuego un colchón y que las llamas se propagaran por toda la casa.
Un vecino fue el encargado de llamar a los bomberos. Junto a otros, intentaron apagar el fuego y alejar la garrafa de gas envasado, para que el daño no fuese mayor, pero fue imposible.
Según los vecinos el incendio se extendió en un instante. "Fue rapidísimo. Quisimos apagarlo, pero no pudimos. Era tan bravo el fuego que tuvimos que llamar a los bomberos. Fueron ellos los que terminaron apagando el incendio. Afortunadamente pudieron llegar pronto", finalizaron los vecinos de Jorge.
"No había nadie en la casa, por suerte. No tenemos que lamentar una víctima fatal, pero nosotros perdimos todo. "Se prendió fuego todo, hasta la garrafa no sirve", relató Jorge, con la voz quebrada.
Jorge contó a El tribuno que en esa casa vive junto a su mujer, los dos solos. "Esa noche no había nadie, ni ella, ni yo estábamos. Yo estaba en la canchita jugando al fútbol con mis amigos. Mi señora se fue a la casa de nuestra hija a cuidar sus nietos, en Manantial Sur", expresó el vecino.
Quizás la mayor pérdida que tengan que lamentar estos salteños sean sus herramientas de trabajo, que con tanto esfuerzo pudieron conseguir. "Para subsistir hago changuitas. Tengo un tallercito de chapa y pintura y mi señora es peluquera. Pero mire ahora, todas las herramientas que teníamos se perdieron", relató el vecino.
La casa quedó totalmente inhabitable. Tóxica, para cualquier ser humano que quiera habitarla.
"Nos quedamos con lo puesto, se quemó todo. Yo ahora estoy durmiendo por las noches en el auto que me prestó un amigo. Mi señora esta viviendo con nuestra hija", explicó con lágrimas en los ojos.
Solidaridad
"Esperamos que alguien se acerque a nuestra casa a donarnos algunas cosas. Necesitamos ropa, herramientas, chapas, ventanas, puertas y utensilios de cocina. Como si fuera fácil en estos tiempos, hay que empezar de nuevo", agregó Jorge.
¿Habrá salteños que quieran ayudar? Para los que quieran colaborar, tienen que enviar las donaciones a manzana 374 A lote 3, barrio Democracia o bien comunicarse al celular 3876611918.
El incendio ocurrió en el barrio Democracia, alrededor de la medianoche del sábado. Según Jorge, la catástrofe fue "producto de un cortocircuito". Quiere pensar que fue producto de la mala suerte y no de alguien mal intencionado, "la policía no me dijo nada todavía, yo creo que fue un accidente, no quiero pensar que esto haya sido premeditado", expresó la víctima.
Aparentemente, el incendio fue provocado por la explosión de una garrafa. Esto hizo que se prendiera fuego un colchón y que las llamas se propagaran por toda la casa.
Un vecino fue el encargado de llamar a los bomberos. Junto a otros, intentaron apagar el fuego y alejar la garrafa de gas envasado, para que el daño no fuese mayor, pero fue imposible.
Según los vecinos el incendio se extendió en un instante. "Fue rapidísimo. Quisimos apagarlo, pero no pudimos. Era tan bravo el fuego que tuvimos que llamar a los bomberos. Fueron ellos los que terminaron apagando el incendio. Afortunadamente pudieron llegar pronto", finalizaron los vecinos de Jorge.
"No había nadie en la casa, por suerte. No tenemos que lamentar una víctima fatal, pero nosotros perdimos todo. "Se prendió fuego todo, hasta la garrafa no sirve", relató Jorge, con la voz quebrada.
Jorge contó a El tribuno que en esa casa vive junto a su mujer, los dos solos. "Esa noche no había nadie, ni ella, ni yo estábamos. Yo estaba en la canchita jugando al fútbol con mis amigos. Mi señora se fue a la casa de nuestra hija a cuidar sus nietos, en Manantial Sur", expresó el vecino.
Quizás la mayor pérdida que tengan que lamentar estos salteños sean sus herramientas de trabajo, que con tanto esfuerzo pudieron conseguir. "Para subsistir hago changuitas. Tengo un tallercito de chapa y pintura y mi señora es peluquera. Pero mire ahora, todas las herramientas que teníamos se perdieron", relató el vecino.
La casa quedó totalmente inhabitable. Tóxica, para cualquier ser humano que quiera habitarla.
"Nos quedamos con lo puesto, se quemó todo. Yo ahora estoy durmiendo por las noches en el auto que me prestó un amigo. Mi señora esta viviendo con nuestra hija", explicó con lágrimas en los ojos.
Solidaridad
"Esperamos que alguien se acerque a nuestra casa a donarnos algunas cosas. Necesitamos ropa, herramientas, chapas, ventanas, puertas y utensilios de cocina. Como si fuera fácil en estos tiempos, hay que empezar de nuevo", agregó Jorge.
¿Habrá salteños que quieran ayudar? Para los que quieran colaborar, tienen que enviar las donaciones a manzana 374 A lote 3, barrio Democracia o bien comunicarse al celular 3876611918.
Varios siniestros en pocos días
Durante los últimos días se produjeron varios incendios en diferentes puntos de la provincia. Se puede contar entre ellos el ocurrido en Alvarado al 2100 donde se quemaron un automóvil, heladeras, cocinas y todas las herramientas de una carpintería. A pesar de la magnitud no hubo que lamentar víctimas. El sábado por la noche hubo un principio de incendio en la cocina del hospital Materno Infantil que no tuvo mayores consecuencias pero que disparó un enorme operativo policial. En Tartagal, se incendió una casilla precaria de madera como consecuencia de una vela que cayó sobre un colchón.
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Otra vez ocurrió en un hogar salteño. Conexiones eléctricas deficientes, instalaciones de gas defectuosas y el mal uso de las mismas son un combo peligroso. Esta vez provocaron un accidente que pudo terminar en tragedia. Por suerte no hubo que lamentar víctimas fatales. Al momento de iniciarse el fuego los habitantes de la casa no se encontraban. Este incidente produjo pérdidas materiales importantes para sus dueños. Según Jorge Vázquez, propietario de la vivienda, "se perdió todo". El desasosiego fue tan grande que su mujer tuvo que ser asistida por personal del Samec tras sufrir una crisis de nervios.
El incendio ocurrió en el barrio Democracia, alrededor de la medianoche del sábado. Según Jorge, la catástrofe fue "producto de un cortocircuito". Quiere pensar que fue producto de la mala suerte y no de alguien mal intencionado, "la policía no me dijo nada todavía, yo creo que fue un accidente, no quiero pensar que esto haya sido premeditado", expresó la víctima.
Aparentemente, el incendio fue provocado por la explosión de una garrafa. Esto hizo que se prendiera fuego un colchón y que las llamas se propagaran por toda la casa.
Un vecino fue el encargado de llamar a los bomberos. Junto a otros, intentaron apagar el fuego y alejar la garrafa de gas envasado, para que el daño no fuese mayor, pero fue imposible.
Según los vecinos el incendio se extendió en un instante. "Fue rapidísimo. Quisimos apagarlo, pero no pudimos. Era tan bravo el fuego que tuvimos que llamar a los bomberos. Fueron ellos los que terminaron apagando el incendio. Afortunadamente pudieron llegar pronto", finalizaron los vecinos de Jorge.
"No había nadie en la casa, por suerte. No tenemos que lamentar una víctima fatal, pero nosotros perdimos todo. "Se prendió fuego todo, hasta la garrafa no sirve", relató Jorge, con la voz quebrada.
Jorge contó a El tribuno que en esa casa vive junto a su mujer, los dos solos. "Esa noche no había nadie, ni ella, ni yo estábamos. Yo estaba en la canchita jugando al fútbol con mis amigos. Mi señora se fue a la casa de nuestra hija a cuidar sus nietos, en Manantial Sur", expresó el vecino.
Quizás la mayor pérdida que tengan que lamentar estos salteños sean sus herramientas de trabajo, que con tanto esfuerzo pudieron conseguir. "Para subsistir hago changuitas. Tengo un tallercito de chapa y pintura y mi señora es peluquera. Pero mire ahora, todas las herramientas que teníamos se perdieron", relató el vecino.
La casa quedó totalmente inhabitable. Tóxica, para cualquier ser humano que quiera habitarla.
"Nos quedamos con lo puesto, se quemó todo. Yo ahora estoy durmiendo por las noches en el auto que me prestó un amigo. Mi señora esta viviendo con nuestra hija", explicó con lágrimas en los ojos.
Solidaridad
"Esperamos que alguien se acerque a nuestra casa a donarnos algunas cosas. Necesitamos ropa, herramientas, chapas, ventanas, puertas y utensilios de cocina. Como si fuera fácil en estos tiempos, hay que empezar de nuevo", agregó Jorge.
¿Habrá salteños que quieran ayudar? Para los que quieran colaborar, tienen que enviar las donaciones a manzana 374 A lote 3, barrio Democracia o bien comunicarse al celular 3876611918.
El incendio ocurrió en el barrio Democracia, alrededor de la medianoche del sábado. Según Jorge, la catástrofe fue "producto de un cortocircuito". Quiere pensar que fue producto de la mala suerte y no de alguien mal intencionado, "la policía no me dijo nada todavía, yo creo que fue un accidente, no quiero pensar que esto haya sido premeditado", expresó la víctima.
Aparentemente, el incendio fue provocado por la explosión de una garrafa. Esto hizo que se prendiera fuego un colchón y que las llamas se propagaran por toda la casa.
Un vecino fue el encargado de llamar a los bomberos. Junto a otros, intentaron apagar el fuego y alejar la garrafa de gas envasado, para que el daño no fuese mayor, pero fue imposible.
Según los vecinos el incendio se extendió en un instante. "Fue rapidísimo. Quisimos apagarlo, pero no pudimos. Era tan bravo el fuego que tuvimos que llamar a los bomberos. Fueron ellos los que terminaron apagando el incendio. Afortunadamente pudieron llegar pronto", finalizaron los vecinos de Jorge.
"No había nadie en la casa, por suerte. No tenemos que lamentar una víctima fatal, pero nosotros perdimos todo. "Se prendió fuego todo, hasta la garrafa no sirve", relató Jorge, con la voz quebrada.
Jorge contó a El tribuno que en esa casa vive junto a su mujer, los dos solos. "Esa noche no había nadie, ni ella, ni yo estábamos. Yo estaba en la canchita jugando al fútbol con mis amigos. Mi señora se fue a la casa de nuestra hija a cuidar sus nietos, en Manantial Sur", expresó el vecino.
Quizás la mayor pérdida que tengan que lamentar estos salteños sean sus herramientas de trabajo, que con tanto esfuerzo pudieron conseguir. "Para subsistir hago changuitas. Tengo un tallercito de chapa y pintura y mi señora es peluquera. Pero mire ahora, todas las herramientas que teníamos se perdieron", relató el vecino.
La casa quedó totalmente inhabitable. Tóxica, para cualquier ser humano que quiera habitarla.
"Nos quedamos con lo puesto, se quemó todo. Yo ahora estoy durmiendo por las noches en el auto que me prestó un amigo. Mi señora esta viviendo con nuestra hija", explicó con lágrimas en los ojos.
Solidaridad
"Esperamos que alguien se acerque a nuestra casa a donarnos algunas cosas. Necesitamos ropa, herramientas, chapas, ventanas, puertas y utensilios de cocina. Como si fuera fácil en estos tiempos, hay que empezar de nuevo", agregó Jorge.
¿Habrá salteños que quieran ayudar? Para los que quieran colaborar, tienen que enviar las donaciones a manzana 374 A lote 3, barrio Democracia o bien comunicarse al celular 3876611918.
Varios siniestros en pocos días
Durante los últimos días se produjeron varios incendios en diferentes puntos de la provincia. Se puede contar entre ellos el ocurrido en Alvarado al 2100 donde se quemaron un automóvil, heladeras, cocinas y todas las herramientas de una carpintería. A pesar de la magnitud no hubo que lamentar víctimas. El sábado por la noche hubo un principio de incendio en la cocina del hospital Materno Infantil que no tuvo mayores consecuencias pero que disparó un enorme operativo policial. En Tartagal, se incendió una casilla precaria de madera como consecuencia de una vela que cayó sobre un colchón.