La postura de las cámaras de tabaco de Salta y Jujuy es contundente. Rechazan categóricamente la aprobación en el Senado nacional del convenio marco de la OMS (Organización Mundial de la Salud) para el control del tabaco. Aseguran que lo que buscan es la destrucción tabacalera en las siete provincias productoras.
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La postura de las cámaras de tabaco de Salta y Jujuy es contundente. Rechazan categóricamente la aprobación en el Senado nacional del convenio marco de la OMS (Organización Mundial de la Salud) para el control del tabaco. Aseguran que lo que buscan es la destrucción tabacalera en las siete provincias productoras.
Representantes del sector mostraron su preocupación y remarcaron que están en peligro cientos de miles de puestos de trabajo, en diálogo con El Tribuno.
Esteban "Tuti" Amat Lacroix, presidente de la Cámara del Tabaco de Salta, calificó como "un éxito" la reunión que se realizó ayer en la Coprotab (Cooperativa de Productores Tabacaleros). "Nosotros sabemos que de aprobarse este tratado internacional lo único que va a traer es la eliminación de la producción. Tendría rango supralegal y constitucional. De aprobarse, irá por arriba de nuestras leyes. Los legisladores estarían delegando sus funciones y nos estarían legislando desde afuera", expresó el referente tabacalero.
Con certeza opinó que, de aprobarse el convenio marco de la OMS los principales países productores de tabaco, como Brasil, China y Estados Unidos, seguirán cultivando de la forma que lo están haciendo ahora. "Por ejemplo, en EEUU no se aprobó este tratado y en Brasil el convenio no tiene el rango legal como aquí en Argentina. Es así que sus legisladores pueden modificar cualquier anexo que vaya en perjuicio de sus productores. Acá no, estamos delegando todo", dijo Amat Lacroix.
El titular de la Cámara también indicó que se destruiría la producción nacional de tabaco pero no se dejarían de vender cigarrillos, que serían importados. "Tendríamos un millón y medio de personas desocupadas en el país que viven directa o indirectamente de esto. Es gravísimo, si no se toma conciencia, lo que puede provocar aprobar un tratado de esta naturaleza".
El referente tabacalero expresó que, para que todos estén en igualdad de condiciones con este convenio, en primer lugar se tendría que "declarar ilegal la venta de cigarrillos en el mundo". Consideró que, con este tratado solo se estaría perjudicando al país. "Lo único que van a hacer es quitarle el trabajo a Argentina y dárselo a Brasil, Estados Unidos o China, porque se van a seguir vendiendo cigarrillos".
Situación en Jujuy
Por su parte, Pedro Pascuttini, presidente de la Cámara del Tabaco de Jujuy y a su vez presidente de la Federación Argentina de Productores Tabacaleros, también expuso cuál será la posición que tomarán las entidades que preside y explicó como afectaría el cambio a las economías regionales.
"No estamos de acuerdo para nada, porque atenta contra la producción, atenta contra los productores, contra sus familias, contra los trabajadores. No vemos cuáles son los intereses que están moviendo a instalar de nuevo este tratamiento de un convenio que es de normativas ultranacionales".
El representante tabacalero comentó que con este proyecto se busca "desalentar la producción" en las provincias productoras. "En este sentido, no podríamos tener ningún tipo de asistencia, de posibilidad de tener dinero a través de asistencias bancarias para producir. Es decir, nos cerrarían todas las vías que puedan permitirnos seguir produciendo", manifestó Pedro Pascuttini. Y continuó: "Toda la legislación que nos impondrían no es que la van a hacer en Argentina. Son organizaciones supranacionales que hacen todas las reglamentaciones que van a dirigir y a imponer para que no se produzca realmente".
El titular de la Federación reforzó la idea de que la falta de producción afectaría notablemente las economías de las provincias productoras: Salta, Jujuy, Misiones, Tucumán, Corrientes, Catamarca y Chaco.
"En el caso del NOA, es una de las principales actividades que tenemos, no solamente de mano de obra intensiva y artesanal. Muchos pueblos viven directa o indirectamente de la actividad tabacalera", remarcó Pedro Pascuttini.
El representante tabacalero describió la iniciativa como "un flagelo" y dijo que no se puede permitir que se apruebe. "La postura que sostenemos nosotros es no aceptarlo, rechazarlo e impulsar a nivel del Congreso de la Nación el tratamiento para que sea rechazado en el recinto", sentenció Pedro Pascuttini.