¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

16°
28 de Abril,  Salta, Centro, Argentina
PUBLICIDAD

Se llevó a un discapacitado sobre el capot por 5 cuadras

La víctima es encargada de cobrar estacionamiento. Al ser embestido se agarró de la parte delantera del auto para no ser arrollado. El ebrio fue detenido. La alcoholemia le dio positiva.
Lunes, 10 de julio de 2017 00:00

Un joven discapacitado habilitado municipalmente para cobrar estacionamiento en la zona de la Balcarce fue lesionado por un vehículo junto a su compañero, pero además al ser arrollado quedó sobre el capot del vehículo, que lo llevó calle abajo hasta casi metros de la central de Policía, sobre calle Santiago del Estero.

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

Un joven discapacitado habilitado municipalmente para cobrar estacionamiento en la zona de la Balcarce fue lesionado por un vehículo junto a su compañero, pero además al ser arrollado quedó sobre el capot del vehículo, que lo llevó calle abajo hasta casi metros de la central de Policía, sobre calle Santiago del Estero.

La increíble historia fue relatada a El Tribuno por Aníbal Luciano Rojas, un permisionario municipal, quien aseguró que quedó traumado por la inhumana acción del sujeto, que finalmente fue detenido por el 911.

Ocurrió el viernes a la madrugada cuando a la hora de cierre de los distintos boliches y pubs de la zona un sujeto subió a su automóvil, un Ford Eco Sport, y encendió el mismo para retirarse. En esos momento, según el relato de uno de los damnificados, el sujeto se negó a pagar los 50 pesos del estacionamiento que existe sobre esa cuadra -20 de Febrero entre Necochea y Alsina-.

El conductor dijo que no tenía por qué pagar y que le abrieran paso, arrancó raudamente y le pisó uno de los pies al permisionario.

En ese momento el compañero de trabajo David Alejandro Barrios estaba delante del vehículo, intentando llamar al 911.

De allí, cuando el vehículo le chocó las piernas, lo elevó sobre el capot donde quedó postrado boca abajo.

Barrios, quien padece una severa discapacidad motriz, quedó sin poder moverse.

Según Rojas, una de las víctimas y testigo del hecho, el sujeto, completamente ebrio, comenzó a insultar al permisionario para que se bajara del capot, pero Barrios tiene graves secuelas motrices debido a una hemiplejía espástica, así que no podía hacer eso.

El conductor, fuera de sí, arrancó y frenó bruscamente para que cayera, pero al advertir que el hombre se había aferrado al capot con uñas y dientes, arrancó y se fue por calle 20 de Febrero hacia el sur.

"Fue algo inhumano, el tipo arrancó primero despacio y después se fue calle abajo, cruzó la avenida Entre Ríos y a pesar de los gritos y bocinazos de otros automovilistas siguió con mi compañero en el capot, mientras nosotros pedíamos al 911 que lo detuviera antes que Barrios se cayera y fuera aplastado".

"Nos quedamos todos con el corazón en la boca durante más de diez minutos sin noticias de mi compañero. Hasta que me llevaron por calle 20 de Febrero hasta Santiago del Estero, casi en la Central de Policía. Allí se encontraba el sujeto, muy ebrio casi sin poder articular palabras, explicando por qué llevaba a mi compañero sobre su capot. Entonces llegaron más policía y nos invitaron a denunciar al sujeto en la Comisaría 1".

"La policía se llevó al conductor para que le extraigan sangre para el dosaje, mientras le hacían una alcoholemia al parecer en el mismo lugar donde detuvo su marcha, perseguido por el 911".

"La verdad es que tanto yo como mi compañero no sufrimos lesiones graves, pero quedamos shockeados por la violencia exhibida y por la impunidad de esta gente que conduce totalmente alcoholizada".

Rojas aseguró que estuvieron en la Comisaría 1 hasta que trajeron al conductor detenido y al vehículo que quedó secuestrado seguramente después por Tránsito municipal.

Cuando trajeron al detenido a la hora de los sucesos aún se encontraba ebrio.

No sé qué quiso hacer

Luciano Rojas dijo a El Tribuno que en la ebriedad que manifestaba, el conductor les dijo a los del 911 que les llevaba el “trapito” hasta la Central de Policía porque le quisieron cobrar. 
Si quería entregarlo a la policía podría haber buscado otro método un poco más humano, porque mi compañero padece una seria discapacidad motriz.

.

 

Temas de la nota

PUBLICIDAD