"El costo de ser mujer se refleja en las góndolas del supermercado y se identifica con un color: el "rosa'", expusieron voluntarias de Codelco (Comité de Defensa del Consumidor) en un informe que elaboraron luego de realizar un relevamiento en tres cadenas de supermercados de Salta para medir el impacto de los precios en productos destinados al público femenino.
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"El costo de ser mujer se refleja en las góndolas del supermercado y se identifica con un color: el "rosa'", expusieron voluntarias de Codelco (Comité de Defensa del Consumidor) en un informe que elaboraron luego de realizar un relevamiento en tres cadenas de supermercados de Salta para medir el impacto de los precios en productos destinados al público femenino.
Liliana Musa, Ana Durand Cornejo y Natalia Martínez llevaron a cabo la recolección y análisis de datos con el objetivo de "visibilizar la problemática, para empoderar a las mujeres a la hora de elegir un producto, que lo comparen con los de otro color y no avalar con la compra estas prácticas abusivas que despliegan algunas marcas o empresas".
Desde hace varios meses que las entidades de defensa del consumidor pusieron bajo la lupa esta práctica de marcas y empresas que cobran más caros los productos femeninos a pesar de tener las mismas características que los masculinos, sin embargo, la situación expuesta aún se sostiene.
Por eso, Musa indicó a El Tribuno que "la idea es difundir para que las mujeres comparemos precio y calidad a la hora de comprar y que no se guíen por el color".
En su informe, las abogadas aclaran que "el "impuesto rosa' no es un impuesto en realidad, sino el sobreprecio que pagan las mujeres por productos similares a los que compran los hombres", y plantean: "¿Están las mujeres dispuestas a pagar más por un mismo producto por el solo hecho de tener un color rosa?"
En consecuencia, tomaron al azar tres cadenas de supermercados en las que seleccionaron los mismos productos, marcas y tamaños para realizar la comparación. "Fue un trabajo similar al realizado por la Defensoría del Pueblo de La Plata, cuyo informe reveló que las mujeres pagan 15,56% más que los hombres por productos similares. Y al trabajo realizado por la Asociación de Defensa del Consumidor Protectora en Córdoba, donde surge que el sobreprecio es un 25% en dicha provincia", indicaron.
En el relevamiento realizado en Salta, se detectó que "el ranking lo lideran los yogures que no se salvan del "impuesto rosa', las mujeres pagan entre un 80% y un 100% más caro que los que pagan los hombres por el mismo producto" y que "una importante marca lanzó una campaña dirigida hacia las mujeres, bajo el slogan "Mujeres que crean', comercializando un mismo producto pero con un diseño realizado por mujeres artistas emprendedoras. Estos productos cuestan 80% más que los que están dirigidos al público general".
"El agravante dentro de los lácteos se da cuando el producto está etiquetado para el público femenino con extracalcio y es descremado, claramente dirigido hacia mujeres menopáusicas, en donde el aumento es de mas del 150%", denunciaron.
Por otra parte, revelaron que "en cuanto a los productos de higiene personal, las máquinas de afeitar para mujeres son 20% más caras", pese a que se trata del "mismo producto y marca, pero diferente color". "Con respecto a los perfumes y desodorantes de similar marca, cuestan un 70% mas caro los de mujeres que los de hombres", revelaron.
No obstante, en productos para niños no puede advertirse aún el trato discriminatorio: las pastas de dientes infantiles relevadas en todos los supermercados cuestan lo mismo para varones que para nenas.
Finalmente, las autoras del relevamiento convocaron a los consumidores a "decidir la compra priorizando el trato digno y no discriminatorio por la condición de mujeres".