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La crisis deportiva que atraviesa Boca Juniors ya no admite dilaciones. Con 11 partidos sin ganar, la peor seguidilla en la historia del club, el presidente Juan Román Riquelme tiene decidido reconfigurar por completo la estructura del fútbol profesional y amateur. La derrota ante Huracán encendió las alarmas y aceleró un proceso de cambios que incluye nombres, funciones y hasta estructuras.
Según se informó, “la decisión está tomada”: se vienen modificaciones profundas dentro del Consejo de Fútbol, el círculo de confianza que Riquelme conformó con excompañeros de su época gloriosa como jugador. Por primera vez desde que llegó a la dirigencia, el ídolo máximo de Boca pondrá en revisión a su núcleo más íntimo en Ezeiza.
La posibilidad de que el Consejo de Fútbol sea directamente disuelto gana fuerza. En su lugar, se analiza la incorporación de un manager con experiencia que aporte profesionalismo y distancia emocional en la toma de decisiones. Se trataría de un cambio de paradigma para un modelo que hasta ahora había sido defendido a ultranza por Riquelme.
¿Quiénes integran el Consejo de Fútbol?
Actualmente, el Consejo está conformado por Mauricio “Chicho” Serna, Raúl Cascini, Marcelo Delgado y Jorge Bermúdez. Serna, incorporado en 2022, se convirtió en el vocero del grupo en momentos clave, como la reciente eliminación en Copa Argentina ante Atlético Tucumán. Fue él quien también anunció, en su momento, la salida de Fernando Gago.
Cascini y Delgado siguen participando activamente del día a día. Bermúdez, en cambio, permanece en Colombia desde principios de 2023 y cumple funciones a distancia. Su última aparición pública vinculada al club fue durante la final de la Copa Libertadores frente a Fluminense, el 4 de noviembre del año pasado.
El Consejo fue creado por Riquelme al iniciar su carrera como dirigente y durante años fue considerado una apuesta personal. Sin embargo, el deterioro deportivo y la presión de los hinchas hicieron mella. La Bombonera promete estallar el próximo 9 de agosto ante Racing, y el termómetro social no perdona.
Russo, cada vez más cuestionado
La crisis también salpica al cuerpo técnico. Aunque Miguel Ángel Russo lleva apenas siete partidos en este nuevo ciclo, las dudas son crecientes. El episodio bochornoso por el cambio de Miguel Merentiel, que el DT justificó como un "problema de papeles", fue la gota que colmó el vaso.
Según trascendió, Russo intentará imponer reglas internas más estrictas a partir de este mismo martes, cuando el plantel retome los entrenamientos. También se prevé una depuración del grupo: varios futbolistas sin lugar podrían ser apartados, en un intento por ordenar el vestuario y recuperar el foco competitivo.
A esta altura, nadie tiene el puesto asegurado. Boca atraviesa una crisis que exige respuestas urgentes, y Riquelme está dispuesto a pagar costos políticos para frenar la caída. Se vienen días clave en la Ribera.