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El mundo del fútbol quedó paralizado tras la noticia de la muerte de Diogo Jota, el delantero portugués que brillaba en el Liverpool de Inglaterra. La tragedia ocurrió durante la madrugada del jueves, cuando el futbolista, de 27 años, perdió la vida en un accidente automovilístico en Portugal.
Según trascendió, el Lamborghini en el que viajaba sufrió un pinchazo en uno de los neumáticos, lo que provocó que Jota perdiera el control y se estrellara violentamente. Tras el impacto, el vehículo se incendió y el jugador no logró salir a tiempo, falleciendo en el lugar.
La noticia sacudió al ambiente deportivo y rápidamente comenzaron a multiplicarse los mensajes de despedida. Entre ellos, uno de los que más conmovió fue el de Lionel Messi, quien se hizo eco del trágico suceso a través de sus redes sociales.
En su cuenta de Instagram, Messi compartió una historia donde se ve a Jota celebrando un gol, acompañada del breve pero sentido mensaje: “QEPD”. La publicación del capitán argentino se viralizó de inmediato y reflejó el impacto que causó la partida del futbolista luso.
Diogo Jota se había consolidado como una de las figuras más queridas por la afición del Liverpool, gracias a su entrega, velocidad y capacidad goleadora. Había sido clave en varias campañas recientes y también era una pieza habitual en la selección nacional de Portugal.
El accidente generó una oleada de dolor en el fútbol europeo y entre fanáticos de todo el mundo. Varios clubes y compañeros expresaron su tristeza y recordaron al delantero como un deportista comprometido y una persona humilde fuera de la cancha.
La despedida de Messi resume el sentimiento de millones de fanáticos: el fútbol pierde no solo a un gran jugador, sino también a un ser humano querido y respetado.