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Peter Hegseth, secretario de Defensa de Estados Unidos, aseguró que el bombardeo realizado en la noche del sábado sobre tres centrales nucleares de Irán devastó el programa que el régimen de los ayatolás venía desarrollando.
Hegseth, junto a general Dan Caine, jefe del Estado Mayor, explicaron en conferencia de prensa que la operación militar se denominó Martillo de Medianoche.
El funcionario de la administración Trump sostuvo que el desarrollo nuclear iraní era una amenaza para Estados Unidos, lo que motivó al presidente Donald Trump a actuar. “Anoche por orden del presidente Trump, el comando central de Estados Unidos llevó a cabo un ataque de precisión en medio de la noche contra tres instalaciones nucleares en Irán con el fin de destruir o degradar severamente el programa nuclear de Irán”, explicó Hegseth.
El general Caine explicó que los cazas B-12 volaron 18 horas desde Estados Unidos a Irán, cargando combustible en pleno vuelo. Se emplearon 75 armas de gran precisión. Fue un operativo que llevó “meses de posicionamiento y preparación para poder estar listos”, dimensionó el funcionario.
“Los cazas iraníes no volaron, y parece que los sistemas de misiles tierra-aire iraníes no nos detectaron durante la misión”, detalló el militar.
Mientras Hegshet declaró que la maniobra fue “un éxito increíble y abrumador“, Caine por su parte reseñó que “las evaluaciones iniciales indican que los tres sitios sufrieron daños y destrucción extremadamente severos”.
El secretario de Defensa aclaró que la operación Martillo de Medianoche no fue sobre un cambio de régimen, sino para “neutralizar” una amenaza sobre los intereses de Estados Unidos y sobre Israel, como aliado.
“Muchos presidentes han soñado con dar el golpe final al programa nuclear de Irán, y ninguno pudo hasta el presidente Trump. La operación que planeó el presidente Trump fue audaz y fue brillante, mostrando al mundo que la disuasión estadounidense está de vuelta. Cuando este presidente habla, el mundo debe escuchar”, sintetizó.