Técnicos de la EEA del Inta de El Sombrero realizaron un estudio sobre la intensificación de los sistemas ganaderos en la provincia de Corrientes. Entre otras cuestiones, se analizaron pastos naturales e implantados, y la utilización de algunos verdeos de invierno para la alimentación de la hacienda, según publicó El Litoral.
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Técnicos de la EEA del Inta de El Sombrero realizaron un estudio sobre la intensificación de los sistemas ganaderos en la provincia de Corrientes. Entre otras cuestiones, se analizaron pastos naturales e implantados, y la utilización de algunos verdeos de invierno para la alimentación de la hacienda, según publicó El Litoral.
El trabajo fue llevado adelante por los técnicos María Pereira y Luis Gándara, quienes consideraron que los sistemas ganaderos de la provincia se caracterizan por ser extensivos tradicionales y todavía poco intensivos, en los últimos años se presenta una tendencia hacia sistemas intensivos, en los que se incluyen nuevas tecnología y consecuentemente la producción que se logra supera ampliamente a la media provincial.
“Para esto debemos conocer cuáles son las principales tecnologías que permiten una intensificación en los sistemas ganaderos y cómo se los integra. Existen muchas, pero con el objetivo de aumentar la carga de los sistemas, las tecnologías más difundidas y aplicadas tuvieron una mayor consideración desde la producción de mayor volumen de forrajes para incrementar la producción de kilos de carne por hectárea por año.
Mejoramiento de campo natural con fertilización química y herramientas que mejoran las condiciones suelo-planta (desmalezadora, rolo faca, rastras y otras). Esta tecnología mejora calidad y cantidad de forraje y consecuentemente la producción de carne/ha/año (+30%).
Implantación de pasturas megatérmicas, entre las que se recomiendan Setaria sphacelta, Brachiaria brizantha y otras como Digitaria decumbens (pangola), Acroceras macrum (nilo), Chloris gayana y Brachiaria humidicola. Con estas cubrimos los diferentes tipos de ambientes y tipos de suelos (lomadas arenosas, arcillosos, suelos anegables). Donde el resultado productivo en Kg de carne/ha/año es muy superior a las especies nativas (+100%). El costo de implantación oscila los $2.000 por hectárea.
Los forrajes conservados pueden hacerse básicamente a través del ensilado (silo bolsa) o henificación (rollos). El sorgo y el maíz son las dos especies más utilizadas para el ensilado a planta entera y/o grano maduro, mientras que para la henificación (rollos o fardos) son muy utilizadas la Brachiaria brizantha y Setaria saphacelata. En ambos casos el costo del kilo de forraje conservado oscila entre $0,40 y $0,70.
“Con una hectárea de sorgo o maíz ensilado como planta entera con un rinde de 30 toneladas de materia verde podríamos alimentar a 20 vaquillas o novillos (200 kg/cab) durante 120 días. Ya estaríamos liberando aproximadamente 40 ha de un campo natural para la recría”, señala el estudio.
También considera que con una hectárea de pastura con dos cortes para la confección de rollos se podrían cosechar 15 a 20 rollos, lo que permitiría recriar a 10 a 15 vaquillas o novillos durante 120 días. En ambos casos es necesario suplementar con 0,5 a 1 kg/cab/día con algún suplemento proteico.
Entre los verdeos de invierno, consideraron que la avena negra o el raigrass presentan buena adaptación a la mayoría de los suelos de la provincia y su producción depende del año (precipitaciones y temperaturas) y momento de siembra. El costo de implantación es de aproximadamente $1.000 a $1.500 por hectárea.
También señalaron que la suplementación es algo esencial para optimizar el usos de los recursos forrajeros, a su vez permite alcanzar las ganancias de peso necesarias para generar recrías más cortas (pasar de un entore de 3 años a uno de 18 a 24 meses) o la terminación de animales para darle el grado de gordura necesario para su comercialización.
Las suplementaciones más comunes son para corregir deficiencias de proteína (heno y silos) con Expeller de soja algodón o girasol y concentrados proteicos entre los más utilizados y para mejorar los niveles de energía se suplementa básicamente con maíz, sorgo afrecho de arroz.