Los feriados y asuetos durante las fiestas hacen que las guardias de los hospitales se encuentren totalmente abarrotadas. Teniendo en cuenta que la mayoría asiste por problemas estomacales se recordó que en el país el síndrome urémico hemolítico (SUH) afecta a cerca de cuatrocientas personas por año y entre el tres y el cinco por ciento de ellos deriva en la muerte del paciente. En nuestra provincia, el médico José Gigena recomendó a los jujeños evitar comprar alimentos en la calle y de hacerlo, asegurarse que los expendedores respeten las medidas de higiene.
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Los feriados y asuetos durante las fiestas hacen que las guardias de los hospitales se encuentren totalmente abarrotadas. Teniendo en cuenta que la mayoría asiste por problemas estomacales se recordó que en el país el síndrome urémico hemolítico (SUH) afecta a cerca de cuatrocientas personas por año y entre el tres y el cinco por ciento de ellos deriva en la muerte del paciente. En nuestra provincia, el médico José Gigena recomendó a los jujeños evitar comprar alimentos en la calle y de hacerlo, asegurarse que los expendedores respeten las medidas de higiene.
Argentina es el país del mundo con mayor incidencia de SUH, cuando en Brasil o Chile por ejemplo, se detectan menos de diez casos por año, indicó la doctora en bioquímica e investigadora del Conicet, Cristina Ibarra. Desde que se descubrió la enfermedad, hace 40 o 50 años atrás, Argentina tuvo la mitad de todos los casos del mundo, explicó por su parte el doctor Jaime Lazovski, secretario de Promoción y Programas Sanitarios del Ministerio de Salud de la Nación.
La enfermedad es causada por la Escherichia coli, y si bien no todas sus cepas causan SUH, la mayoría experimenta una leve diarrea o incluso puede tenerla de manera asintomática. Una vez que la bacteria generó el síndrome urémico hemolítico no hay tratamientos disponibles. Se produce una toxina, llamada de Shiga, que daña los órganos, sobre todo el riñón, y si progresa y llega al corazón o al cerebro, las probabilidades de sobrevivir se reducen drásticamente. Antes se creía que sólo afectaba a menores de 5 años, pero cada vez es más frecuente en chicos mayores. En este sentido el médico José Gigena, que se desempeña en la guardia del hospital "San Roque", explicó que se trata de un cuadro que puede evitarse fácilmente con medidas que las personas muchas veces no tienen en cuenta, por ejemplo lavarse las manos al manipular los alimentos y cocinarlos, ya que la bacteria no sobrevive al calor, es decir que muere si se la cocina a más de 70 ºC. “El famoso churrasco semicrudo no debería existir, esa sangre que se ve es sumamente peligrosa”, dijo Gigena. El médico además indicó que es importante no perder la cadena de frío en los alimentos. En los lácteos, la pasteurización es un tratamiento bactericida y su eficacia está garantizada por la cadena de frío, pero cuando ésta se rompe cualquier bacteria puede atacar el producto. También se da la contaminación cruzada al manipular carne cruda y sobre la misma tabla o mesa cortar vegetales de una ensalada. Los problemas digestivos son comunes en la salud de las personas durante las fiestas, y en este sentido Gigena recordó que de persistir más de cuatro horas las nauseas, el malestar abdominal, la fiebre, diarrea y los vómitos, no conviene que la persona se automedique sino que debe dirigirse a una guardia.