Los investigadores del crimen de la líder trans Amancay Diana Sacayán, hallada ayer atada y apuñalada en su departamento del barrio porteño de Flores, creen que el asesino puede ser un conocido y aún no descartan el robo como un posible móvil del homicidio, informaron fuentes policiales.
"Se están tomando declaraciones y ya hay algunos datos de las personas que solían frecuentar a la víctima en su domicilio. Se está trabajando sobre ellas", dijo a Télam un vocero.
El mismo informante dijo que la pesquisa está orientada en buscar como sospechosos a "gente que tuviera ganada la confianza de la víctima", ya que algunos testigos la vieron arribar al edificio acompañada, aunque nadie la vio luego salir.
Uno de los elementos clave para la pesquisa es el teléfono celular de la víctima, que fue encontrado en la escena del crimen y ya fue mandado a peritar por expertos informáticos en búsqueda de alguna comunicación, mensaje o contacto que pueda identificar al asesino o precisar los últimos movimientos de Sacayán (40).
Otro de los datos tenidos en cuenta por los pesquisas es que la víctima tenía previsto concurrir al XXX Encuentro Nacional de Mujeres que se realizó en Mar del Plata.
Como no viajó, sus amistades comenzaron a llamarla para preguntar los motivos de su ausencia, pero nunca recibieron respuestas, por lo que los investigadores no descartaban que el crimen se haya cometido entre el sábado y el domingo últimos.
Según se conoció ayer, la autopsia confirmó que Sacayán fue asesinada de una puñalada en el abdomen, dato coherente con la gran cantidad de sangre hallada el martes alrededor de su cuerpo.
Otras marcas y heridas en el cuerpo demuestran que la víctima realizó movimientos para intentar protegerse de la agresión, para la cual se cree que se utilizó un cuchillo hallado en la escena del crimen, el cual estaba ensangrentado y se mandó a peritar.
Por lo que vio el médico policial que concurrió al levantamiento del cuerpo, Sacayán presentaba también heridas en un glúteo y en los brazos y fue hallada tirada en el piso, al costado de una cama, en posición decúbito lateral y con algunas ataduras realizadas con prendas de vestir para su inmovilización.
Por otra parte, ayer siguieron declarando familiares y amigos de la víctima, quienes contaron con el apoyo de la Dirección General de Orientación y Protección a Víctimas del Ministerio Público Fiscal.
Además, el juez de instrucción 33, Gustavo Pierreti, que interviene en la causa, autorizó la entrega del cuerpo a los allegados, quienes realizarán el velatorio anoche a partir de las 21 en la sede de la Asociación Boliviana de Laferrere, situada en Zárate 6066.
Los pesquisas tampoco descartan aún la posibilidad de un homicidio en ocasión de robo, ya que el departamento fue hallado todo revuelto.
"Al no vivir nadie con ella, no sabemos con precisión si hay algún faltante de dinero u objetos de valor, pero no podemos descartarlo. Había un gran desorden. Ahora tenemos que determinar si el asesino revisó todo para robar o si lo hizo en búsqueda de un juego de llaves para salir y no lo encontró".
Es que el crimen se descubrió justamente porque el portero del edificio vio el martes al mediodía que la puerta del departamento, en el piso 13 de avenida Rivadavia 6747, estaba abierta porque la habían forzado desde adentro.
La conclusión de los investigadores es que el asesino ingresó con el consentimiento de la víctima y luego de cometer el crimen no encontró las llaves para abrir la puerta y tuvo que forzarla para poder escapar.
Las fuentes comentaron que la líder trans solía cerrar la puerta de su casa con llave porque hacía poco había sido víctima de un robo en ese mismo departamento.
Tratan de identificar al homicida
Los pesquisas esperan que se pueda identificar al autor del hecho a partir de alguna de las huellas o rastros levantados el martes en el lugar del hecho por los peritos de la Unidad Criminalística Móvil de la Policía Federal.
El fiscal también dispuso trabajar en forma conjunta con la Unidad Fiscal Especializada de Violencia contra las Mujeres (UFEM), a cargo de su colega Mariela Labozetta, y el martes mismo ordenó que se trabaje según los protocolos de la "Guía de actuación para las Fuerzas Policiales y de Seguridad federales para la Investigación de Femicidios en el lugar del hallazgo".
Sacayán era líder de la Asociación Internacional de Lesbianas, Gays y Bisexuales (ILGA), dirigente del Movimiento Antidiscriminatorio de Liberación (MAL) y trabajaba en el Programa de Identidad Sexual del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI).
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Los investigadores del crimen de la líder trans Amancay Diana Sacayán, hallada ayer atada y apuñalada en su departamento del barrio porteño de Flores, creen que el asesino puede ser un conocido y aún no descartan el robo como un posible móvil del homicidio, informaron fuentes policiales.
"Se están tomando declaraciones y ya hay algunos datos de las personas que solían frecuentar a la víctima en su domicilio. Se está trabajando sobre ellas", dijo a Télam un vocero.
El mismo informante dijo que la pesquisa está orientada en buscar como sospechosos a "gente que tuviera ganada la confianza de la víctima", ya que algunos testigos la vieron arribar al edificio acompañada, aunque nadie la vio luego salir.
Uno de los elementos clave para la pesquisa es el teléfono celular de la víctima, que fue encontrado en la escena del crimen y ya fue mandado a peritar por expertos informáticos en búsqueda de alguna comunicación, mensaje o contacto que pueda identificar al asesino o precisar los últimos movimientos de Sacayán (40).
Otro de los datos tenidos en cuenta por los pesquisas es que la víctima tenía previsto concurrir al XXX Encuentro Nacional de Mujeres que se realizó en Mar del Plata.
Como no viajó, sus amistades comenzaron a llamarla para preguntar los motivos de su ausencia, pero nunca recibieron respuestas, por lo que los investigadores no descartaban que el crimen se haya cometido entre el sábado y el domingo últimos.
Según se conoció ayer, la autopsia confirmó que Sacayán fue asesinada de una puñalada en el abdomen, dato coherente con la gran cantidad de sangre hallada el martes alrededor de su cuerpo.
Otras marcas y heridas en el cuerpo demuestran que la víctima realizó movimientos para intentar protegerse de la agresión, para la cual se cree que se utilizó un cuchillo hallado en la escena del crimen, el cual estaba ensangrentado y se mandó a peritar.
Por lo que vio el médico policial que concurrió al levantamiento del cuerpo, Sacayán presentaba también heridas en un glúteo y en los brazos y fue hallada tirada en el piso, al costado de una cama, en posición decúbito lateral y con algunas ataduras realizadas con prendas de vestir para su inmovilización.
Por otra parte, ayer siguieron declarando familiares y amigos de la víctima, quienes contaron con el apoyo de la Dirección General de Orientación y Protección a Víctimas del Ministerio Público Fiscal.
Además, el juez de instrucción 33, Gustavo Pierreti, que interviene en la causa, autorizó la entrega del cuerpo a los allegados, quienes realizarán el velatorio anoche a partir de las 21 en la sede de la Asociación Boliviana de Laferrere, situada en Zárate 6066.
Los pesquisas tampoco descartan aún la posibilidad de un homicidio en ocasión de robo, ya que el departamento fue hallado todo revuelto.
"Al no vivir nadie con ella, no sabemos con precisión si hay algún faltante de dinero u objetos de valor, pero no podemos descartarlo. Había un gran desorden. Ahora tenemos que determinar si el asesino revisó todo para robar o si lo hizo en búsqueda de un juego de llaves para salir y no lo encontró".
Es que el crimen se descubrió justamente porque el portero del edificio vio el martes al mediodía que la puerta del departamento, en el piso 13 de avenida Rivadavia 6747, estaba abierta porque la habían forzado desde adentro.
La conclusión de los investigadores es que el asesino ingresó con el consentimiento de la víctima y luego de cometer el crimen no encontró las llaves para abrir la puerta y tuvo que forzarla para poder escapar.
Las fuentes comentaron que la líder trans solía cerrar la puerta de su casa con llave porque hacía poco había sido víctima de un robo en ese mismo departamento.
Tratan de identificar al homicida
Los pesquisas esperan que se pueda identificar al autor del hecho a partir de alguna de las huellas o rastros levantados el martes en el lugar del hecho por los peritos de la Unidad Criminalística Móvil de la Policía Federal.
El fiscal también dispuso trabajar en forma conjunta con la Unidad Fiscal Especializada de Violencia contra las Mujeres (UFEM), a cargo de su colega Mariela Labozetta, y el martes mismo ordenó que se trabaje según los protocolos de la "Guía de actuación para las Fuerzas Policiales y de Seguridad federales para la Investigación de Femicidios en el lugar del hallazgo".
Sacayán era líder de la Asociación Internacional de Lesbianas, Gays y Bisexuales (ILGA), dirigente del Movimiento Antidiscriminatorio de Liberación (MAL) y trabajaba en el Programa de Identidad Sexual del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI).