"Vas a venir o voy a buscarte?. Contestame. Querés que vaya a buscarte y te mate?", era la voz de un hombre enfadado, extraída de una grabación de un dispositivo móvil que Rosa Ramoa compartió en una entrevista con nuestro medio, esa amenaza que acababa de sufrir.
El hombre denunciado tiene 37 años y se desempeñaría en el Cuerpo de Protección Ciudadana. Pesa en su haber varios sumarios.
La mujer era esposa de un efectivo policial de 37 años que hasta el día de fecha se desempeña en el Cuerpo de Protección Ciudadana, y desde que decidió escaparse del domicilio donde era brutalmente agredida, su vida sigue siendo un verdadero calvario y pide ayuda por temor a que algo le pase. "Tengo miedo que me mate", dijo. Con más de una treintena de denuncias ordenadas en una carpeta y con los ojos a punto de estallar en lágrimas, Rosa Ramoa decidió de una vez por todas hacer públicas las constantes agresiones tanto físicas como verbales que sufre por parte de su expareja, un efectivo policial que porta un arma de fuego, que fue denunciado reiteradas veces y que con "notorios desórdenes psicológicos", tiene la "misión" de estar al resguardo de la sociedad.
"En los primeros años de matrimonio quedé embarazada y cuando llevaba el séptimo mes de gestación, me dio una paliza que quedé inconsciente y perdí a mi bebé. Me tenía encerrada días enteros en su casa, hasta que decidí escaparme, pero mi exmarido es amigo de mi mamá, ella me echó de mi casa y anduve deambulando por mucho tiempo", contó Rosa Ramoa.
La mujer manifestó que las denuncias que realizó en las seccionales 32º de Malvinas, en la 2º de Gorriti y la 50º de Campo Verde, lugares donde fue atacada en la vía pública por su expareja, nunca prosperaron. "Debe ser porque es policía goza de todos esos privilegios, pero tengo mucho miedo de aparecer muerta. Tiene una mente siniestra, sabe mis horarios y de los de mi novio, sabe mi número de teléfono, me sigue y constantemente me amenaza", dijo llevándose una mano a la boca, como tratando de callar lo que decía.
La estadística sobre violencia de género, según datos policiales, tiene un promedio de 4 denuncias por día en nuestra provincia, pero solo muy pocas de ellas prosperan en alguna Fiscalía. Pero cuando ya es tarde, cuando la mujer fue brutalmente golpeada o cuando el daño es irreversible.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla
"Vas a venir o voy a buscarte?. Contestame. Querés que vaya a buscarte y te mate?", era la voz de un hombre enfadado, extraída de una grabación de un dispositivo móvil que Rosa Ramoa compartió en una entrevista con nuestro medio, esa amenaza que acababa de sufrir.
El hombre denunciado tiene 37 años y se desempeñaría en el Cuerpo de Protección Ciudadana. Pesa en su haber varios sumarios.
La mujer era esposa de un efectivo policial de 37 años que hasta el día de fecha se desempeña en el Cuerpo de Protección Ciudadana, y desde que decidió escaparse del domicilio donde era brutalmente agredida, su vida sigue siendo un verdadero calvario y pide ayuda por temor a que algo le pase. "Tengo miedo que me mate", dijo. Con más de una treintena de denuncias ordenadas en una carpeta y con los ojos a punto de estallar en lágrimas, Rosa Ramoa decidió de una vez por todas hacer públicas las constantes agresiones tanto físicas como verbales que sufre por parte de su expareja, un efectivo policial que porta un arma de fuego, que fue denunciado reiteradas veces y que con "notorios desórdenes psicológicos", tiene la "misión" de estar al resguardo de la sociedad.
"En los primeros años de matrimonio quedé embarazada y cuando llevaba el séptimo mes de gestación, me dio una paliza que quedé inconsciente y perdí a mi bebé. Me tenía encerrada días enteros en su casa, hasta que decidí escaparme, pero mi exmarido es amigo de mi mamá, ella me echó de mi casa y anduve deambulando por mucho tiempo", contó Rosa Ramoa.
La mujer manifestó que las denuncias que realizó en las seccionales 32º de Malvinas, en la 2º de Gorriti y la 50º de Campo Verde, lugares donde fue atacada en la vía pública por su expareja, nunca prosperaron. "Debe ser porque es policía goza de todos esos privilegios, pero tengo mucho miedo de aparecer muerta. Tiene una mente siniestra, sabe mis horarios y de los de mi novio, sabe mi número de teléfono, me sigue y constantemente me amenaza", dijo llevándose una mano a la boca, como tratando de callar lo que decía.
La estadística sobre violencia de género, según datos policiales, tiene un promedio de 4 denuncias por día en nuestra provincia, pero solo muy pocas de ellas prosperan en alguna Fiscalía. Pero cuando ya es tarde, cuando la mujer fue brutalmente golpeada o cuando el daño es irreversible.