Birmania dijo comprender la preocupación de la comunidad internacional por las
olas de emigrantes que huyen de su territorio, pero argumentó que no es el único país responsable de esta crisis.
El ministro de Información, Ye Htut, dijo que su Gobierno entiende "la inquietud de la comunidad internacional" pero que "en vez de culpar a Birmania de todos estos problemas (...) estos asuntos deberían ser resueltos por los socios regionales".
Decenas de miles de musulmanes rohingya, víctimas de la marginación en el oeste de Birmania, huyen desde hace tiempo en embarcaciones precarias a través de la Bahía de Bengala.
En los últimos años, a estos se han unido los migrantes económicos del vecino
Bangladesh que tratan de escapar de la pobreza. Actualmente, Birmania es blanco de la presión internacional después de que en el último mes miles de migrantes fueran abandonados en abarrotadas embarcaciones por los pasadores, que huyeron tras el endurecimiento de la ley en su contra.
Birmania dijo comprender la preocupación de la comunidad internacional por las
olas de emigrantes que huyen de su territorio, pero argumentó que no es el único país responsable de esta crisis.
El ministro de Información, Ye Htut, dijo que su Gobierno entiende "la inquietud de la comunidad internacional" pero que "en vez de culpar a Birmania de todos estos problemas (...) estos asuntos deberían ser resueltos por los socios regionales".
Decenas de miles de musulmanes rohingya, víctimas de la marginación en el oeste de Birmania, huyen desde hace tiempo en embarcaciones precarias a través de la Bahía de Bengala.
En los últimos años, a estos se han unido los migrantes económicos del vecino
Bangladesh que tratan de escapar de la pobreza. Actualmente, Birmania es blanco de la presión internacional después de que en el último mes miles de migrantes fueran abandonados en abarrotadas embarcaciones por los pasadores, que huyeron tras el endurecimiento de la ley en su contra.