El Papa Francisco exteriorizó su dolor por la muerte de dos nenes de 7 y 10 años durante un incendio en un taller clandestino del barrio porteño de Flores y remarcó que desea que "nunca más sucedan estas cosas, fruto de las injusticias".
El Sumo pontífice envió una carta por intermedio del legislador porteño y presidente de La Alameda, Gustavo Vera, para ser leída en una misa realizada el jueves, con el fin de recordar a los dos pequeños fallecidos.
"A todos ustedes que se reúnen para orar por Orlando y Rodrigo Camacho les hago llegar mi cercanía y los acompaño en el dolor y el sufrimiento. Lo sucedido me causa mucho dolor. Estoy junto a ustedes y pido al Señor nos ayude a que nunca más sucedan estas cosas, fruto de injusticias. Con afectuoso cariño. Que Jesús los bendiga y la Virgen Santa los cuide", remarcó Francisco en la misiva. En ese sentido, la convocatoria la hicieron La Alameda, vecinos de Flores y autoridades religiosas junto al sacerdote Néstor de la iglesia de la Visitación. También estuvieron el obispo auxiliar Juan Carlos Ares, quien fue designado en la vicaría de Villa Devoto a fines del año pasado.
Ni bien ocurrió la tragedia, Vera mantuvo una comunicación telefónica con el Papa, quien expresó su profundo dolor ante esta situación.
Justamente, el presidente de La Alameda junto al Sumo Pontífice, cuando éste era Arzobispo de Bs. As, mantuvieron una dura batalla diaria contra esta problemática.
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El Papa Francisco exteriorizó su dolor por la muerte de dos nenes de 7 y 10 años durante un incendio en un taller clandestino del barrio porteño de Flores y remarcó que desea que "nunca más sucedan estas cosas, fruto de las injusticias".
El Sumo pontífice envió una carta por intermedio del legislador porteño y presidente de La Alameda, Gustavo Vera, para ser leída en una misa realizada el jueves, con el fin de recordar a los dos pequeños fallecidos.
"A todos ustedes que se reúnen para orar por Orlando y Rodrigo Camacho les hago llegar mi cercanía y los acompaño en el dolor y el sufrimiento. Lo sucedido me causa mucho dolor. Estoy junto a ustedes y pido al Señor nos ayude a que nunca más sucedan estas cosas, fruto de injusticias. Con afectuoso cariño. Que Jesús los bendiga y la Virgen Santa los cuide", remarcó Francisco en la misiva. En ese sentido, la convocatoria la hicieron La Alameda, vecinos de Flores y autoridades religiosas junto al sacerdote Néstor de la iglesia de la Visitación. También estuvieron el obispo auxiliar Juan Carlos Ares, quien fue designado en la vicaría de Villa Devoto a fines del año pasado.
Ni bien ocurrió la tragedia, Vera mantuvo una comunicación telefónica con el Papa, quien expresó su profundo dolor ante esta situación.
Justamente, el presidente de La Alameda junto al Sumo Pontífice, cuando éste era Arzobispo de Bs. As, mantuvieron una dura batalla diaria contra esta problemática.