PURMAMARCA (Corresponsal) La Virgen de Copacabana de Punta Corral partirá hoy hacia su santuario en las primeras horas de la mañana, acompañada por bandas de sikuris de distintas localidades y por sus fieles creyentes que la trasladarán por el camino de Tumbaya.
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PURMAMARCA (Corresponsal) La Virgen de Copacabana de Punta Corral partirá hoy hacia su santuario en las primeras horas de la mañana, acompañada por bandas de sikuris de distintas localidades y por sus fieles creyentes que la trasladarán por el camino de Tumbaya.
Luego de permanecer por más de un mes en la parroquia Nuestra Señora de los Dolores de Tumbaya, la Mamita del Cerro se despedirá con una misa a las 6 de la mañana para partir finalmente a las 7 con todos los peregrinos.
Desde el pasado 29 de marzo, la imagen fue muy visitada en aquel pueblito, por devotos que llegaban desde distintos puntos de Jujuy, e incluso de otras provincias, simplemente para agradecerle por algo brindado o para cumplir con una promesa, realizada con mucha fe.
Las bandas de sikuris de Purmamarca, Volcán, Tilcara, Tumbaya y Tumbaya Grande, entre otras localidades, serán las encargadas de dejarla nuevamente en su altar en la iglesia de Punta Corral. Allí tocarán para ella las últimas canciones del año, hasta el 2016, cuando irán a traerla nuevamente con los peregrinos.
Recuerdo de una fiel creyente
Julia Pardo vivía en Higueritas, un pequeño lugar ubicado cerca del primer calvario yendo a Punta Corral por el camino de Tumbaya. Ella hace más de 15 años que vivía allí y estaba cada vez que la Virgen de Punta Corral bajaba para el Domingo de Ramos, o cuando los peregrinos y las bandas la llevaban a casa nuevamente. Julia y su familia ponían un pequeño puestito de comida para esas fechas y de esa manera atendían con mucha amabilidad a todo caminante. Cuando llegaba la Virgen salía a saludarla con mucho respeto y con toda la fe que llevaba en su corazón.
Julia falleció días después que la Virgen bajara en este Domingo de Ramos, pero toda la comunidad de Tumbaya y de los parajes cercanos la recordarán hoy cuando ella no esté en su puesto, aunque seguramente acompañará desde el cielo a la Mamita del Cerro y a todos los peregrinos.