Se puede prevenir la hipoacusia

Más allá de la cantidad de hipoacúsicos que hay en Jujuy es importante hacer hincapié en la necesidad de que cada vez sean menos los que padezcan la pérdida de audición o que se les agrave mediante la detección temprana. Está enmarcada en un programa pero que necesita ser contemplado para un mejor acceso a las familias.

Se trata del Programa Nacional de Detección de la Hipoacusia que implica la detección, tratamiento y seguimiento. Se desarrolla en el Hospital de Niños "Héctor Quintana" y está enmarcado en la Ley de Discapacidad 25.145.

"Por el momento en el hospital se está haciendo sólo la detección y el diagnóstico, lo que queremos es incorporar la rehabilitación, el tratamiento y seguimiento, para poder estar completo y brindarle mejor servicio al paciente", explicó la fonoaudióloga del Hospital de Niños, del área afín, Paula Mónaco Reif.

Explicó que es clave el diagnóstico y la celeridad en su atención y sobre todo el acceso a los audífonos, que suele durar meses hasta un año según la obra social que tenga el paciente o si no accede a una, debido al alto costo que tienen. La licenciada en Fonoaudiología explicó que aspiran a acortar ese tiempo de modo que el paciente sea equipado lo más tempranamente posible para que su lenguaje y desarrollo auditivo sea normal y mejor inserción en su vida.

En el caso de un hospital, una vez que el bebé nace se le hace el screaning auditivo neonatal, que se indica a todos los niños a partir de las 36 horas y el mes del nacimiento. Se estudian las oto-emisiones acústicas y antes de que el bebé esté dado de alta se procura que se haya realizado el estudio, aunque hay veces que no se terminan de completar, que es lo que se trata de revertir.

Se están atendiendo también a los bebés que nacen en los sanatorios y los del interior, de hecho hay equipo propio en Perico, Palpalá y Ledesma, pero no en todos los hospitales a pesar de la necesidad. Es que con ello se hace análisis de sangre, ecografías, de modo que el niño esté dado de alta sano o bien que se haga el tratamiento o seguimiento.

Si el pequeño no pasa el estudio o se recomienda control, se le da turno a la madre para un mes de modo de hacer uno nuevo; y si no pasa el segundo screaning es derivado a un otorrinolaringólogo donde se le piden nuevos estudios, potencial evocado y otros de audiometría, himpedanciometría y timpanometría.

Entonces se pasa a la segunda etapa de diagnóstico con lo cual se lo vuelve a evaluar con otro estudio de oto-emisión y junto al otorrinolaringólogo y fonoaudiólogo se evalúa si el paciente tiene hipoacusia. Luego inician gestiones para el audífono o implante coclear según el caso.

Más allá de la cantidad de hipoacúsicos que hay en Jujuy es importante hacer hincapié en la necesidad de que cada vez sean menos los que padezcan la pérdida de audición o que se les agrave mediante la detección temprana. Está enmarcada en un programa pero que necesita ser contemplado para un mejor acceso a las familias.

Se trata del Programa Nacional de Detección de la Hipoacusia que implica la detección, tratamiento y seguimiento. Se desarrolla en el Hospital de Niños "Héctor Quintana" y está enmarcado en la Ley de Discapacidad 25.145.

"Por el momento en el hospital se está haciendo sólo la detección y el diagnóstico, lo que queremos es incorporar la rehabilitación, el tratamiento y seguimiento, para poder estar completo y brindarle mejor servicio al paciente", explicó la fonoaudióloga del Hospital de Niños, del área afín, Paula Mónaco Reif.

Explicó que es clave el diagnóstico y la celeridad en su atención y sobre todo el acceso a los audífonos, que suele durar meses hasta un año según la obra social que tenga el paciente o si no accede a una, debido al alto costo que tienen. La licenciada en Fonoaudiología explicó que aspiran a acortar ese tiempo de modo que el paciente sea equipado lo más tempranamente posible para que su lenguaje y desarrollo auditivo sea normal y mejor inserción en su vida.

En el caso de un hospital, una vez que el bebé nace se le hace el screaning auditivo neonatal, que se indica a todos los niños a partir de las 36 horas y el mes del nacimiento. Se estudian las oto-emisiones acústicas y antes de que el bebé esté dado de alta se procura que se haya realizado el estudio, aunque hay veces que no se terminan de completar, que es lo que se trata de revertir.

Se están atendiendo también a los bebés que nacen en los sanatorios y los del interior, de hecho hay equipo propio en Perico, Palpalá y Ledesma, pero no en todos los hospitales a pesar de la necesidad. Es que con ello se hace análisis de sangre, ecografías, de modo que el niño esté dado de alta sano o bien que se haga el tratamiento o seguimiento.

Si el pequeño no pasa el estudio o se recomienda control, se le da turno a la madre para un mes de modo de hacer uno nuevo; y si no pasa el segundo screaning es derivado a un otorrinolaringólogo donde se le piden nuevos estudios, potencial evocado y otros de audiometría, himpedanciometría y timpanometría.

Entonces se pasa a la segunda etapa de diagnóstico con lo cual se lo vuelve a evaluar con otro estudio de oto-emisión y junto al otorrinolaringólogo y fonoaudiólogo se evalúa si el paciente tiene hipoacusia. Luego inician gestiones para el audífono o implante coclear según el caso.