"Voy a decir la verdad, en estos días que pasaron traté de hacer memoria y sin mentirles, no recuerdo nada de lo que pasó. No sé qué va a ser de mí, pero sé que dejé una familia rota", dijo Emanuel Romero en la apertura del debate celebrado en la jornada de ayer, donde fue condenado a prisión perpetua, luego de ser hallado autor del asesinato de la maestra Gloria Vilte, hecho ocurrido el 30 de enero de 2014 en el barrio Los Perales de nuestra ciudad.
A Romero en las dos primeras audiencias se lo vio muy relajado, como si no le importara qué pasaba a su alrededor, pero en la jornada de ayer sus ojos estaban llenos de frío y no podía sostener ninguna mirada. Sabía que su suerte estaba echada y que las pruebas en su contra eran contundentes.
La fiscal de Cámara, Delia Ortíz, en su alegato solicitó la pena de prisión perpetua y fundamentó el pedido con el hecho en sí y cómo trató de ocultarse y mentir que había sufrido un robo cuando fue detenido. Además Ortíz no dejó pasar el "intento de conmover al Tribunal" con sus palabras, pero que en definitiva "terminó confesando el hecho".
Ana Lorena Madrid, representante de las hijas de la docente asesinada, le dijo a El Tribuno de Jujuy que "de las constancias que obran en la causa no podría haber otro tipo de sentencia que no sea la condena a prisión perpetua para el imputado".
"El imputado en todo momento trató de ocultar el hecho delictivo que había cometido y había procurado la impunidad del mismo", dijo. La defensa de Romero estuvo representada por Segundo Soria, quien en su alegato apuntó a las investigaciones preliminares, donde dejó sentado que su defendido "conoció causas de imputación sin poder defenderse". Y planteó el hecho como "homicidio culposo".
Las primeras horas del 30 de enero 2014 eran motivo de festejo para Romero, acababa de cumplir la mayoría de edad y (según su relato), había estado tomando alcohol horas antes y habría mezclado con pastillas, marihuana y pasta base.
Alrededor de las 0.30 Romero permanecía oculto en la plaza próxima a la rotonda donde inicia el puente Pérez en el barrio Los Perales.
A las 0.44 Gloria acababa de cortar una conversación telefónica con su hija Melisa. Caminaba presurosa sobre esa avenida, le quedaba un importante tramo hasta llegar a su casa en el barrio Belgrano.
Gloria Vilte no caminaba por gusto, es que tenía en su billetera apenas 30 pesos. Había caminado hasta Los Perales para que su cuñada le cortara el cabello gratis, por supuesto.
En manos de Romero quedó la vida de una mujer viuda, que luchó hasta el cansancio para que sus tres hijas estudiaran en una universidad. Caminaba entre 6 y 8 horas para llegar y trabajar en la Escuela N§ 365 de la localidad de El Huancar, en plena puna jujeña.
Recibió cuatro puñaladas, una de ellas le atravesó el corazón. Un puñal casero, casi oxidado de casi 15 centímetros de largo, fue el arma homicida que manipulaba Romero.
Emanuel Romero, de un pasado muy difícil, se va a pasar la mayor parte de su vida tras las rejas, fue condenado a prisión perpetua luego de ser hallado autor penalmente responsable del delito de "robo calificado por el uso de arma y homicidio críminis causa en concurso real".
A Romero en las dos primeras audiencias se lo vio muy relajado, como si no le importara qué pasaba a su alrededor, pero en la jornada de ayer sus ojos estaban llenos de frío y no podía sostener ninguna mirada. Sabía que su suerte estaba echada y que las pruebas en su contra eran contundentes.
La fiscal de Cámara, Delia Ortíz, en su alegato solicitó la pena de prisión perpetua y fundamentó el pedido con el hecho en sí y cómo trató de ocultarse y mentir que había sufrido un robo cuando fue detenido. Además Ortíz no dejó pasar el "intento de conmover al Tribunal" con sus palabras, pero que en definitiva "terminó confesando el hecho".
Ana Lorena Madrid, representante de las hijas de la docente asesinada, le dijo a El Tribuno de Jujuy que "de las constancias que obran en la causa no podría haber otro tipo de sentencia que no sea la condena a prisión perpetua para el imputado".
"El imputado en todo momento trató de ocultar el hecho delictivo que había cometido y había procurado la impunidad del mismo", dijo. La defensa de Romero estuvo representada por Segundo Soria, quien en su alegato apuntó a las investigaciones preliminares, donde dejó sentado que su defendido "conoció causas de imputación sin poder defenderse". Y planteó el hecho como "homicidio culposo".
Las primeras horas del 30 de enero 2014 eran motivo de festejo para Romero, acababa de cumplir la mayoría de edad y (según su relato), había estado tomando alcohol horas antes y habría mezclado con pastillas, marihuana y pasta base.
Alrededor de las 0.30 Romero permanecía oculto en la plaza próxima a la rotonda donde inicia el puente Pérez en el barrio Los Perales.
A las 0.44 Gloria acababa de cortar una conversación telefónica con su hija Melisa. Caminaba presurosa sobre esa avenida, le quedaba un importante tramo hasta llegar a su casa en el barrio Belgrano.
Gloria Vilte no caminaba por gusto, es que tenía en su billetera apenas 30 pesos. Había caminado hasta Los Perales para que su cuñada le cortara el cabello gratis, por supuesto.
En manos de Romero quedó la vida de una mujer viuda, que luchó hasta el cansancio para que sus tres hijas estudiaran en una universidad. Caminaba entre 6 y 8 horas para llegar y trabajar en la Escuela N§ 365 de la localidad de El Huancar, en plena puna jujeña.
Recibió cuatro puñaladas, una de ellas le atravesó el corazón. Un puñal casero, casi oxidado de casi 15 centímetros de largo, fue el arma homicida que manipulaba Romero.
Emanuel Romero, de un pasado muy difícil, se va a pasar la mayor parte de su vida tras las rejas, fue condenado a prisión perpetua luego de ser hallado autor penalmente responsable del delito de "robo calificado por el uso de arma y homicidio críminis causa en concurso real".
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"Voy a decir la verdad, en estos días que pasaron traté de hacer memoria y sin mentirles, no recuerdo nada de lo que pasó. No sé qué va a ser de mí, pero sé que dejé una familia rota", dijo Emanuel Romero en la apertura del debate celebrado en la jornada de ayer, donde fue condenado a prisión perpetua, luego de ser hallado autor del asesinato de la maestra Gloria Vilte, hecho ocurrido el 30 de enero de 2014 en el barrio Los Perales de nuestra ciudad.
A Romero en las dos primeras audiencias se lo vio muy relajado, como si no le importara qué pasaba a su alrededor, pero en la jornada de ayer sus ojos estaban llenos de frío y no podía sostener ninguna mirada. Sabía que su suerte estaba echada y que las pruebas en su contra eran contundentes.
La fiscal de Cámara, Delia Ortíz, en su alegato solicitó la pena de prisión perpetua y fundamentó el pedido con el hecho en sí y cómo trató de ocultarse y mentir que había sufrido un robo cuando fue detenido. Además Ortíz no dejó pasar el "intento de conmover al Tribunal" con sus palabras, pero que en definitiva "terminó confesando el hecho".
Ana Lorena Madrid, representante de las hijas de la docente asesinada, le dijo a El Tribuno de Jujuy que "de las constancias que obran en la causa no podría haber otro tipo de sentencia que no sea la condena a prisión perpetua para el imputado".
"El imputado en todo momento trató de ocultar el hecho delictivo que había cometido y había procurado la impunidad del mismo", dijo. La defensa de Romero estuvo representada por Segundo Soria, quien en su alegato apuntó a las investigaciones preliminares, donde dejó sentado que su defendido "conoció causas de imputación sin poder defenderse". Y planteó el hecho como "homicidio culposo".
Las primeras horas del 30 de enero 2014 eran motivo de festejo para Romero, acababa de cumplir la mayoría de edad y (según su relato), había estado tomando alcohol horas antes y habría mezclado con pastillas, marihuana y pasta base.
Alrededor de las 0.30 Romero permanecía oculto en la plaza próxima a la rotonda donde inicia el puente Pérez en el barrio Los Perales.
A las 0.44 Gloria acababa de cortar una conversación telefónica con su hija Melisa. Caminaba presurosa sobre esa avenida, le quedaba un importante tramo hasta llegar a su casa en el barrio Belgrano.
Gloria Vilte no caminaba por gusto, es que tenía en su billetera apenas 30 pesos. Había caminado hasta Los Perales para que su cuñada le cortara el cabello gratis, por supuesto.
En manos de Romero quedó la vida de una mujer viuda, que luchó hasta el cansancio para que sus tres hijas estudiaran en una universidad. Caminaba entre 6 y 8 horas para llegar y trabajar en la Escuela N§ 365 de la localidad de El Huancar, en plena puna jujeña.
Recibió cuatro puñaladas, una de ellas le atravesó el corazón. Un puñal casero, casi oxidado de casi 15 centímetros de largo, fue el arma homicida que manipulaba Romero.
Emanuel Romero, de un pasado muy difícil, se va a pasar la mayor parte de su vida tras las rejas, fue condenado a prisión perpetua luego de ser hallado autor penalmente responsable del delito de "robo calificado por el uso de arma y homicidio críminis causa en concurso real".
A Romero en las dos primeras audiencias se lo vio muy relajado, como si no le importara qué pasaba a su alrededor, pero en la jornada de ayer sus ojos estaban llenos de frío y no podía sostener ninguna mirada. Sabía que su suerte estaba echada y que las pruebas en su contra eran contundentes.
La fiscal de Cámara, Delia Ortíz, en su alegato solicitó la pena de prisión perpetua y fundamentó el pedido con el hecho en sí y cómo trató de ocultarse y mentir que había sufrido un robo cuando fue detenido. Además Ortíz no dejó pasar el "intento de conmover al Tribunal" con sus palabras, pero que en definitiva "terminó confesando el hecho".
Ana Lorena Madrid, representante de las hijas de la docente asesinada, le dijo a El Tribuno de Jujuy que "de las constancias que obran en la causa no podría haber otro tipo de sentencia que no sea la condena a prisión perpetua para el imputado".
"El imputado en todo momento trató de ocultar el hecho delictivo que había cometido y había procurado la impunidad del mismo", dijo. La defensa de Romero estuvo representada por Segundo Soria, quien en su alegato apuntó a las investigaciones preliminares, donde dejó sentado que su defendido "conoció causas de imputación sin poder defenderse". Y planteó el hecho como "homicidio culposo".
Las primeras horas del 30 de enero 2014 eran motivo de festejo para Romero, acababa de cumplir la mayoría de edad y (según su relato), había estado tomando alcohol horas antes y habría mezclado con pastillas, marihuana y pasta base.
Alrededor de las 0.30 Romero permanecía oculto en la plaza próxima a la rotonda donde inicia el puente Pérez en el barrio Los Perales.
A las 0.44 Gloria acababa de cortar una conversación telefónica con su hija Melisa. Caminaba presurosa sobre esa avenida, le quedaba un importante tramo hasta llegar a su casa en el barrio Belgrano.
Gloria Vilte no caminaba por gusto, es que tenía en su billetera apenas 30 pesos. Había caminado hasta Los Perales para que su cuñada le cortara el cabello gratis, por supuesto.
En manos de Romero quedó la vida de una mujer viuda, que luchó hasta el cansancio para que sus tres hijas estudiaran en una universidad. Caminaba entre 6 y 8 horas para llegar y trabajar en la Escuela N§ 365 de la localidad de El Huancar, en plena puna jujeña.
Recibió cuatro puñaladas, una de ellas le atravesó el corazón. Un puñal casero, casi oxidado de casi 15 centímetros de largo, fue el arma homicida que manipulaba Romero.
Emanuel Romero, de un pasado muy difícil, se va a pasar la mayor parte de su vida tras las rejas, fue condenado a prisión perpetua luego de ser hallado autor penalmente responsable del delito de "robo calificado por el uso de arma y homicidio críminis causa en concurso real".