Un Programa Nacional que permitirá mejorar la implementación de la Ley 26.862 de Reproducción Médicamente Asistida, lo que facilitará el acceso a los derechos previstos por la norma, fue creado a través de una resolución del Ministerio de Salud publicada ayer en el Boletín Oficial.
"Actualmente todo lo concerniente a la ley dependía del Ministerio de Salud y del Programa Nacional de Salud Sexual y Procreación Responsable pero faltaba un área específica que se ocupara de la norma y esto generaba vacíos y grises", indicó Gustavo Martínez, presidente de la Sociedad Argentina de Medicina Reproductiva (Samer) y miembro del Consejo Asesor creado recientemente que funcionara como consultivo del programa.
Martínez destacó que "es la primera vez desde que se sancionó la Ley que el Ministerio convoca a especialistas externos en forma orgánica y esto nos parece muy positivo".
Por un lado, el reciente Consejo ya reescribió algunos aspectos de la reglamentación de la Ley: "Hicimos un borrador que ahora debe aprobar el ministro (de Salud, Jorge) Lemus, en el que por ejemplo, definimos qué es específicamente la fecundación in vitro", sostuvo Martínez.
Y añadió: "También redactamos mejor las coberturas que contempla la ley que son cuatro de baja complejidad y tres de alta complejidad durante toda la vida, y especificamos que no es obligatorio que haya que hacerse primero los de baja, porque, por ejemplo, una mujer sin trompas no podría hacerse una inseminación".
Pero más allá de la reescritura de la reglamentación, el Consejo funcionará como apoyo ante cuestiones que se presenten en el ministerio vinculadas a la aplicación de la Ley.
"Por ejemplo, una obra social no quiere cubrir el tratamiento a una mujer de 45 años con óvulos propios, entonces nosotros evaluaremos desde el punto de vista médico y aconsejaremos", describió.
Una tarea que continuará el Programa, y que se venía haciendo desde que se sancionó la ley en julio de 2013, es facilitar los métodos de reproducción asistida a personas de pocos recursos.
Más allá de su conformidad con la creación del Programa, Martínez recordó que desde Samer plantearon que la Ley 26.862 "es meramente de cobertura, es decir, que plantea qué hay que cubrir, cómo, en qué casos, pero le faltan cuestiones de fondo como".
Según se estableció en la resolución publicada ayer, el Programa Nacional de Reproducción Médicamente Asistida funcionará en el marco de la Secretaría de Promoción, Programas Sanitarios y Salud Comunitaria.
"Actualmente todo lo concerniente a la ley dependía del Ministerio de Salud y del Programa Nacional de Salud Sexual y Procreación Responsable pero faltaba un área específica que se ocupara de la norma y esto generaba vacíos y grises", indicó Gustavo Martínez, presidente de la Sociedad Argentina de Medicina Reproductiva (Samer) y miembro del Consejo Asesor creado recientemente que funcionara como consultivo del programa.
Martínez destacó que "es la primera vez desde que se sancionó la Ley que el Ministerio convoca a especialistas externos en forma orgánica y esto nos parece muy positivo".
Por un lado, el reciente Consejo ya reescribió algunos aspectos de la reglamentación de la Ley: "Hicimos un borrador que ahora debe aprobar el ministro (de Salud, Jorge) Lemus, en el que por ejemplo, definimos qué es específicamente la fecundación in vitro", sostuvo Martínez.
Y añadió: "También redactamos mejor las coberturas que contempla la ley que son cuatro de baja complejidad y tres de alta complejidad durante toda la vida, y especificamos que no es obligatorio que haya que hacerse primero los de baja, porque, por ejemplo, una mujer sin trompas no podría hacerse una inseminación".
Pero más allá de la reescritura de la reglamentación, el Consejo funcionará como apoyo ante cuestiones que se presenten en el ministerio vinculadas a la aplicación de la Ley.
"Por ejemplo, una obra social no quiere cubrir el tratamiento a una mujer de 45 años con óvulos propios, entonces nosotros evaluaremos desde el punto de vista médico y aconsejaremos", describió.
Una tarea que continuará el Programa, y que se venía haciendo desde que se sancionó la ley en julio de 2013, es facilitar los métodos de reproducción asistida a personas de pocos recursos.
Más allá de su conformidad con la creación del Programa, Martínez recordó que desde Samer plantearon que la Ley 26.862 "es meramente de cobertura, es decir, que plantea qué hay que cubrir, cómo, en qué casos, pero le faltan cuestiones de fondo como".
Según se estableció en la resolución publicada ayer, el Programa Nacional de Reproducción Médicamente Asistida funcionará en el marco de la Secretaría de Promoción, Programas Sanitarios y Salud Comunitaria.
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Un Programa Nacional que permitirá mejorar la implementación de la Ley 26.862 de Reproducción Médicamente Asistida, lo que facilitará el acceso a los derechos previstos por la norma, fue creado a través de una resolución del Ministerio de Salud publicada ayer en el Boletín Oficial.
"Actualmente todo lo concerniente a la ley dependía del Ministerio de Salud y del Programa Nacional de Salud Sexual y Procreación Responsable pero faltaba un área específica que se ocupara de la norma y esto generaba vacíos y grises", indicó Gustavo Martínez, presidente de la Sociedad Argentina de Medicina Reproductiva (Samer) y miembro del Consejo Asesor creado recientemente que funcionara como consultivo del programa.
Martínez destacó que "es la primera vez desde que se sancionó la Ley que el Ministerio convoca a especialistas externos en forma orgánica y esto nos parece muy positivo".
Por un lado, el reciente Consejo ya reescribió algunos aspectos de la reglamentación de la Ley: "Hicimos un borrador que ahora debe aprobar el ministro (de Salud, Jorge) Lemus, en el que por ejemplo, definimos qué es específicamente la fecundación in vitro", sostuvo Martínez.
Y añadió: "También redactamos mejor las coberturas que contempla la ley que son cuatro de baja complejidad y tres de alta complejidad durante toda la vida, y especificamos que no es obligatorio que haya que hacerse primero los de baja, porque, por ejemplo, una mujer sin trompas no podría hacerse una inseminación".
Pero más allá de la reescritura de la reglamentación, el Consejo funcionará como apoyo ante cuestiones que se presenten en el ministerio vinculadas a la aplicación de la Ley.
"Por ejemplo, una obra social no quiere cubrir el tratamiento a una mujer de 45 años con óvulos propios, entonces nosotros evaluaremos desde el punto de vista médico y aconsejaremos", describió.
Una tarea que continuará el Programa, y que se venía haciendo desde que se sancionó la ley en julio de 2013, es facilitar los métodos de reproducción asistida a personas de pocos recursos.
Más allá de su conformidad con la creación del Programa, Martínez recordó que desde Samer plantearon que la Ley 26.862 "es meramente de cobertura, es decir, que plantea qué hay que cubrir, cómo, en qué casos, pero le faltan cuestiones de fondo como".
Según se estableció en la resolución publicada ayer, el Programa Nacional de Reproducción Médicamente Asistida funcionará en el marco de la Secretaría de Promoción, Programas Sanitarios y Salud Comunitaria.
"Actualmente todo lo concerniente a la ley dependía del Ministerio de Salud y del Programa Nacional de Salud Sexual y Procreación Responsable pero faltaba un área específica que se ocupara de la norma y esto generaba vacíos y grises", indicó Gustavo Martínez, presidente de la Sociedad Argentina de Medicina Reproductiva (Samer) y miembro del Consejo Asesor creado recientemente que funcionara como consultivo del programa.
Martínez destacó que "es la primera vez desde que se sancionó la Ley que el Ministerio convoca a especialistas externos en forma orgánica y esto nos parece muy positivo".
Por un lado, el reciente Consejo ya reescribió algunos aspectos de la reglamentación de la Ley: "Hicimos un borrador que ahora debe aprobar el ministro (de Salud, Jorge) Lemus, en el que por ejemplo, definimos qué es específicamente la fecundación in vitro", sostuvo Martínez.
Y añadió: "También redactamos mejor las coberturas que contempla la ley que son cuatro de baja complejidad y tres de alta complejidad durante toda la vida, y especificamos que no es obligatorio que haya que hacerse primero los de baja, porque, por ejemplo, una mujer sin trompas no podría hacerse una inseminación".
Pero más allá de la reescritura de la reglamentación, el Consejo funcionará como apoyo ante cuestiones que se presenten en el ministerio vinculadas a la aplicación de la Ley.
"Por ejemplo, una obra social no quiere cubrir el tratamiento a una mujer de 45 años con óvulos propios, entonces nosotros evaluaremos desde el punto de vista médico y aconsejaremos", describió.
Una tarea que continuará el Programa, y que se venía haciendo desde que se sancionó la ley en julio de 2013, es facilitar los métodos de reproducción asistida a personas de pocos recursos.
Más allá de su conformidad con la creación del Programa, Martínez recordó que desde Samer plantearon que la Ley 26.862 "es meramente de cobertura, es decir, que plantea qué hay que cubrir, cómo, en qué casos, pero le faltan cuestiones de fondo como".
Según se estableció en la resolución publicada ayer, el Programa Nacional de Reproducción Médicamente Asistida funcionará en el marco de la Secretaría de Promoción, Programas Sanitarios y Salud Comunitaria.