Ricardo Tolaba, trabajador de radio con raíces abrapampeñas, hace periodismo recorriendo la Puna en busca de algún suceso que reflejar a través de Radio Nacional La Quiaca, medio en el que se desempeña desde el año 1990.
Siendo niño anheló estar algún día en una emisora radial, cuando por su imaginación pintaba miles de cosas al escuchar radio. ¿Quién estará hablando dentro de la caja radial?, diría, mientras su abuela horneaba el pan en el horno de barro.
Se encauzó hacia los caminos del periodismo tras ser docente por 5 años en escuelas rurales de la Puna cuando llegó la primera emisora de frecuencia modulada a Abra Pampa de la familia Vilte. Allí se incorporó al programa periodístico de "Chacho Nolasco" que se emitía los fines de semana con sus respectivos guiones, libretos y preproducción. Fue ese el primer paso que despertó enormes expectativas y afinidades por los medios de comunicación.
Luego, Ricardo Tolaba emigraba hacia La Quiaca para terminar sus estudios y seguir la carrera de docente, pero en busca de una fuente laboral probó cualidades para el ingreso a un canal televisivo al que no pudo ser, llegando así sin esperarlo por recomendación del extinto Ricardo Villegas a Radio Nacional La Quiaca, siendo recibido en aquel momento por Rodolfo Ramírez.
Así ingresaba Ricardo Tolaba a Radio Nacional La Quiaca como movilero, trabajando adhonorem el primer año, recorriendo calles quiaqueñas en bicicleta, transmitiendo los sucesos diarios.
"De un hobbie pasó a ser un trabajo, lo que significa que es sinónimo de compromiso, responsabilidad y más aún cuando se trata de un medio de comunicación, yo abrasé esta profesión con mucho amor, es por eso que para mí no hay feriado ni fin de semana y siempre ando con el grabador en mano", cuenta Tolaba.
Ricardo se define como un periodista de calle por el constante contacto con la gente de los pueblos puneños. "He gastado muchas zapatillas caminando las calles de La Quiaca y pueblos de la Puna y cuando uno camina se identifica mucho porque comparte con la sociedad y esto hace que uno se sienta más comprometido, porque es transmitir la realidad de un pueblo y cuando el paisano escucha esto por la radio la verdad que se siente contento e identificado". Tolaba compartió con nosotros una anécdota que vive por siempre en su mente. "Cuando me contrató Radio Nacional comencé a enviar información a Buenos Aires sobre historias y costumbres de la Puna, como la quema de pecados en Cochinoca, el toreo de la vincha en Casabindo, la feria de pascuas de Abra Pampa, la Mancafiesta de La Quiaca, de la Pachamama, del carnaval y con testimonios trasladándome a cada unos de los lugares".
"Agradezco a la vida, a Dios, a Radio Nacional, a mi familia esposa e hija, que me apoyaron en cada momento" dijo Tolaba cerrando el diálogo y sintiéndose orgullosamente abrapampeño.
Siendo niño anheló estar algún día en una emisora radial, cuando por su imaginación pintaba miles de cosas al escuchar radio. ¿Quién estará hablando dentro de la caja radial?, diría, mientras su abuela horneaba el pan en el horno de barro.
Se encauzó hacia los caminos del periodismo tras ser docente por 5 años en escuelas rurales de la Puna cuando llegó la primera emisora de frecuencia modulada a Abra Pampa de la familia Vilte. Allí se incorporó al programa periodístico de "Chacho Nolasco" que se emitía los fines de semana con sus respectivos guiones, libretos y preproducción. Fue ese el primer paso que despertó enormes expectativas y afinidades por los medios de comunicación.
Luego, Ricardo Tolaba emigraba hacia La Quiaca para terminar sus estudios y seguir la carrera de docente, pero en busca de una fuente laboral probó cualidades para el ingreso a un canal televisivo al que no pudo ser, llegando así sin esperarlo por recomendación del extinto Ricardo Villegas a Radio Nacional La Quiaca, siendo recibido en aquel momento por Rodolfo Ramírez.
Así ingresaba Ricardo Tolaba a Radio Nacional La Quiaca como movilero, trabajando adhonorem el primer año, recorriendo calles quiaqueñas en bicicleta, transmitiendo los sucesos diarios.
"De un hobbie pasó a ser un trabajo, lo que significa que es sinónimo de compromiso, responsabilidad y más aún cuando se trata de un medio de comunicación, yo abrasé esta profesión con mucho amor, es por eso que para mí no hay feriado ni fin de semana y siempre ando con el grabador en mano", cuenta Tolaba.
Ricardo se define como un periodista de calle por el constante contacto con la gente de los pueblos puneños. "He gastado muchas zapatillas caminando las calles de La Quiaca y pueblos de la Puna y cuando uno camina se identifica mucho porque comparte con la sociedad y esto hace que uno se sienta más comprometido, porque es transmitir la realidad de un pueblo y cuando el paisano escucha esto por la radio la verdad que se siente contento e identificado". Tolaba compartió con nosotros una anécdota que vive por siempre en su mente. "Cuando me contrató Radio Nacional comencé a enviar información a Buenos Aires sobre historias y costumbres de la Puna, como la quema de pecados en Cochinoca, el toreo de la vincha en Casabindo, la feria de pascuas de Abra Pampa, la Mancafiesta de La Quiaca, de la Pachamama, del carnaval y con testimonios trasladándome a cada unos de los lugares".
Esto lo llevó a ser uno de los seleccionados entre 10 de todo el país para ser capacitados por una semana en Buenos Aires. Allí al final de la formación en la residencia de Olivos, tras una cena y junto al presidente Carlos Menem recibió sorpresivamente el decreto a pase de planta permanente, acabando con su trabajo en negro. "Eso me marcó para toda la vida". Consultado por situaciones que le marcan la vida en su tarea periodística, respondió sobre la situación en que viven muchas familias puneñas en lugares muy recónditos de la Puna y sin los mínimos servicios básicos. "Muchas veces hasta me cae una lágrima, son cosas que me conmueven". Para Tolaba, el periodismo recae en aquella "persona encargada de transmitir la realidad tal cual se presenta, con su lado bueno y malo, sin censuras, decir lo que uno siente. Para ser periodista hay que mamar la realidad, hay que estar en contacto con la fuente y para eso hay que caminar". Además dijo que no comparte con el periodismo militante. He cumplido el sueño de ese niño de la Puna que un día soñaba con estar en un medio radial, tras años de sacrificio. "Hoy estoy aquí, contento por el logro, agradezco a Dios, a mi persona, a mi familia. Radio Nacional es mi segunda casa, gracias a ella llevo adelante mi familia".
"En la actualidad sigo recorriendo las calles y pueblos. Como hace 15 años atrás, no cambio nada más allá de mi crecimiento profesional", dijo Ricardo quien emite en Radio Nacional La Quiaca desde las 18 hasta horas cero con Panorama 16 y Noche Nacional.
"En la actualidad sigo recorriendo las calles y pueblos. Como hace 15 años atrás, no cambio nada más allá de mi crecimiento profesional", dijo Ricardo quien emite en Radio Nacional La Quiaca desde las 18 hasta horas cero con Panorama 16 y Noche Nacional.
"Agradezco a la vida, a Dios, a Radio Nacional, a mi familia esposa e hija, que me apoyaron en cada momento" dijo Tolaba cerrando el diálogo y sintiéndose orgullosamente abrapampeño.
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Ricardo Tolaba, trabajador de radio con raíces abrapampeñas, hace periodismo recorriendo la Puna en busca de algún suceso que reflejar a través de Radio Nacional La Quiaca, medio en el que se desempeña desde el año 1990.
Siendo niño anheló estar algún día en una emisora radial, cuando por su imaginación pintaba miles de cosas al escuchar radio. ¿Quién estará hablando dentro de la caja radial?, diría, mientras su abuela horneaba el pan en el horno de barro.
Se encauzó hacia los caminos del periodismo tras ser docente por 5 años en escuelas rurales de la Puna cuando llegó la primera emisora de frecuencia modulada a Abra Pampa de la familia Vilte. Allí se incorporó al programa periodístico de "Chacho Nolasco" que se emitía los fines de semana con sus respectivos guiones, libretos y preproducción. Fue ese el primer paso que despertó enormes expectativas y afinidades por los medios de comunicación.
Luego, Ricardo Tolaba emigraba hacia La Quiaca para terminar sus estudios y seguir la carrera de docente, pero en busca de una fuente laboral probó cualidades para el ingreso a un canal televisivo al que no pudo ser, llegando así sin esperarlo por recomendación del extinto Ricardo Villegas a Radio Nacional La Quiaca, siendo recibido en aquel momento por Rodolfo Ramírez.
Así ingresaba Ricardo Tolaba a Radio Nacional La Quiaca como movilero, trabajando adhonorem el primer año, recorriendo calles quiaqueñas en bicicleta, transmitiendo los sucesos diarios.
"De un hobbie pasó a ser un trabajo, lo que significa que es sinónimo de compromiso, responsabilidad y más aún cuando se trata de un medio de comunicación, yo abrasé esta profesión con mucho amor, es por eso que para mí no hay feriado ni fin de semana y siempre ando con el grabador en mano", cuenta Tolaba.
Ricardo se define como un periodista de calle por el constante contacto con la gente de los pueblos puneños. "He gastado muchas zapatillas caminando las calles de La Quiaca y pueblos de la Puna y cuando uno camina se identifica mucho porque comparte con la sociedad y esto hace que uno se sienta más comprometido, porque es transmitir la realidad de un pueblo y cuando el paisano escucha esto por la radio la verdad que se siente contento e identificado". Tolaba compartió con nosotros una anécdota que vive por siempre en su mente. "Cuando me contrató Radio Nacional comencé a enviar información a Buenos Aires sobre historias y costumbres de la Puna, como la quema de pecados en Cochinoca, el toreo de la vincha en Casabindo, la feria de pascuas de Abra Pampa, la Mancafiesta de La Quiaca, de la Pachamama, del carnaval y con testimonios trasladándome a cada unos de los lugares".
"Agradezco a la vida, a Dios, a Radio Nacional, a mi familia esposa e hija, que me apoyaron en cada momento" dijo Tolaba cerrando el diálogo y sintiéndose orgullosamente abrapampeño.
Siendo niño anheló estar algún día en una emisora radial, cuando por su imaginación pintaba miles de cosas al escuchar radio. ¿Quién estará hablando dentro de la caja radial?, diría, mientras su abuela horneaba el pan en el horno de barro.
Se encauzó hacia los caminos del periodismo tras ser docente por 5 años en escuelas rurales de la Puna cuando llegó la primera emisora de frecuencia modulada a Abra Pampa de la familia Vilte. Allí se incorporó al programa periodístico de "Chacho Nolasco" que se emitía los fines de semana con sus respectivos guiones, libretos y preproducción. Fue ese el primer paso que despertó enormes expectativas y afinidades por los medios de comunicación.
Luego, Ricardo Tolaba emigraba hacia La Quiaca para terminar sus estudios y seguir la carrera de docente, pero en busca de una fuente laboral probó cualidades para el ingreso a un canal televisivo al que no pudo ser, llegando así sin esperarlo por recomendación del extinto Ricardo Villegas a Radio Nacional La Quiaca, siendo recibido en aquel momento por Rodolfo Ramírez.
Así ingresaba Ricardo Tolaba a Radio Nacional La Quiaca como movilero, trabajando adhonorem el primer año, recorriendo calles quiaqueñas en bicicleta, transmitiendo los sucesos diarios.
"De un hobbie pasó a ser un trabajo, lo que significa que es sinónimo de compromiso, responsabilidad y más aún cuando se trata de un medio de comunicación, yo abrasé esta profesión con mucho amor, es por eso que para mí no hay feriado ni fin de semana y siempre ando con el grabador en mano", cuenta Tolaba.
Ricardo se define como un periodista de calle por el constante contacto con la gente de los pueblos puneños. "He gastado muchas zapatillas caminando las calles de La Quiaca y pueblos de la Puna y cuando uno camina se identifica mucho porque comparte con la sociedad y esto hace que uno se sienta más comprometido, porque es transmitir la realidad de un pueblo y cuando el paisano escucha esto por la radio la verdad que se siente contento e identificado". Tolaba compartió con nosotros una anécdota que vive por siempre en su mente. "Cuando me contrató Radio Nacional comencé a enviar información a Buenos Aires sobre historias y costumbres de la Puna, como la quema de pecados en Cochinoca, el toreo de la vincha en Casabindo, la feria de pascuas de Abra Pampa, la Mancafiesta de La Quiaca, de la Pachamama, del carnaval y con testimonios trasladándome a cada unos de los lugares".
Esto lo llevó a ser uno de los seleccionados entre 10 de todo el país para ser capacitados por una semana en Buenos Aires. Allí al final de la formación en la residencia de Olivos, tras una cena y junto al presidente Carlos Menem recibió sorpresivamente el decreto a pase de planta permanente, acabando con su trabajo en negro. "Eso me marcó para toda la vida". Consultado por situaciones que le marcan la vida en su tarea periodística, respondió sobre la situación en que viven muchas familias puneñas en lugares muy recónditos de la Puna y sin los mínimos servicios básicos. "Muchas veces hasta me cae una lágrima, son cosas que me conmueven". Para Tolaba, el periodismo recae en aquella "persona encargada de transmitir la realidad tal cual se presenta, con su lado bueno y malo, sin censuras, decir lo que uno siente. Para ser periodista hay que mamar la realidad, hay que estar en contacto con la fuente y para eso hay que caminar". Además dijo que no comparte con el periodismo militante. He cumplido el sueño de ese niño de la Puna que un día soñaba con estar en un medio radial, tras años de sacrificio. "Hoy estoy aquí, contento por el logro, agradezco a Dios, a mi persona, a mi familia. Radio Nacional es mi segunda casa, gracias a ella llevo adelante mi familia".
"En la actualidad sigo recorriendo las calles y pueblos. Como hace 15 años atrás, no cambio nada más allá de mi crecimiento profesional", dijo Ricardo quien emite en Radio Nacional La Quiaca desde las 18 hasta horas cero con Panorama 16 y Noche Nacional.
"En la actualidad sigo recorriendo las calles y pueblos. Como hace 15 años atrás, no cambio nada más allá de mi crecimiento profesional", dijo Ricardo quien emite en Radio Nacional La Quiaca desde las 18 hasta horas cero con Panorama 16 y Noche Nacional.
"Agradezco a la vida, a Dios, a Radio Nacional, a mi familia esposa e hija, que me apoyaron en cada momento" dijo Tolaba cerrando el diálogo y sintiéndose orgullosamente abrapampeño.