Luego de conocerse el fallecimiento de un joven motociclista, que tras cortarse los frenos de su rodado impactó violentamente en la pared de una vivienda en uno de los accesos del barrio El Chingo, su cuñada apuntó a la atención del personal del hospital "Pablo Soria" y dijo que "estuvo varias horas sin ser atendido".
Romina Nieto es cuñada de Gabriel Armando Guilarte, un joven de 24 años tras un accidente a bordo de una motocicleta marca Motomel de 110cc de cilindrada acompañado por su mujer, por la pronunciada bajada de acceso al mencionado barrio. El hecho tuvo lugar el último 28 de junio alrededor de las 23.
Romina Nieto es cuñada de Gabriel Armando Guilarte, un joven de 24 años tras un accidente a bordo de una motocicleta marca Motomel de 110cc de cilindrada acompañado por su mujer, por la pronunciada bajada de acceso al mencionado barrio. El hecho tuvo lugar el último 28 de junio alrededor de las 23.
La motocicleta en la que circulaba Guilarte cortó sus frenos y él terminó impactando de cabeza en la pared de una vivienda.
"Mi cuñado llegó al hospital Pablo Soria consciente y con un fuerte golpe en la cabeza. Lo vimos sentado en una camilla en la sala de observaciones, vomitaba sangre, pero no fue atendido a tiempo. Mi hermana (esposa de la víctima) le suplicaba a la enfermera que le brindara asistencia, porque el golpe que se había dado había sido de consideración, pero ella le decía que ya lo iban a atender", dijo Nieto.
La mujer manifestó que alrededor de las 4 de la madrugada su cuñado "hizo dos paros respiratorios y se lo llevaron de urgencia a la sala de terapia. Luego, como a las 7.30, un guardia le comunicó a mi hermana que mi cuñado ya estaba muerto".
"No le brindaron la atención necesaria, de nada sirve que Same traslade a las personas heridas de gravedad si van a ser depositados en una sala", dijo entre lágrimas Romina Nieto.
Guilarte tenía 24 años, era padre de tres niñas (la menor cuenta con apenas seis meses), se ganaba la vida con trabajos de albañilería y era el único sustento de su familia . Su mujer, que también fue protagonista del siniestro, sufrió una seria lesión en la rodilla izquierda y está enyesada.
Al momento de producirse el infortunado episodio, se supo que ninguno de los motociclistas llevaba puesto el casco de seguridad y los familiares de la víctima habían expresado cierto malestar por la demora de la ambulancia y del personal del Same luego del siniestro vial.
Según se pudo establecer, a la motocicleta que conducía el joven se le cortaron los frenos y debido a la velocidad que había ganado en plena bajada, Guilarte no pudo evitar maniobrar e impactar de forma violenta contra la pared de una vivienda.
"Mi cuñado llegó al hospital Pablo Soria consciente y con un fuerte golpe en la cabeza. Lo vimos sentado en una camilla en la sala de observaciones, vomitaba sangre, pero no fue atendido a tiempo. Mi hermana (esposa de la víctima) le suplicaba a la enfermera que le brindara asistencia, porque el golpe que se había dado había sido de consideración, pero ella le decía que ya lo iban a atender", dijo Nieto.
La mujer manifestó que alrededor de las 4 de la madrugada su cuñado "hizo dos paros respiratorios y se lo llevaron de urgencia a la sala de terapia. Luego, como a las 7.30, un guardia le comunicó a mi hermana que mi cuñado ya estaba muerto".
"No le brindaron la atención necesaria, de nada sirve que Same traslade a las personas heridas de gravedad si van a ser depositados en una sala", dijo entre lágrimas Romina Nieto.
Guilarte tenía 24 años, era padre de tres niñas (la menor cuenta con apenas seis meses), se ganaba la vida con trabajos de albañilería y era el único sustento de su familia . Su mujer, que también fue protagonista del siniestro, sufrió una seria lesión en la rodilla izquierda y está enyesada.
Al momento de producirse el infortunado episodio, se supo que ninguno de los motociclistas llevaba puesto el casco de seguridad y los familiares de la víctima habían expresado cierto malestar por la demora de la ambulancia y del personal del Same luego del siniestro vial.
Según se pudo establecer, a la motocicleta que conducía el joven se le cortaron los frenos y debido a la velocidad que había ganado en plena bajada, Guilarte no pudo evitar maniobrar e impactar de forma violenta contra la pared de una vivienda.
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Luego de conocerse el fallecimiento de un joven motociclista, que tras cortarse los frenos de su rodado impactó violentamente en la pared de una vivienda en uno de los accesos del barrio El Chingo, su cuñada apuntó a la atención del personal del hospital "Pablo Soria" y dijo que "estuvo varias horas sin ser atendido".
Romina Nieto es cuñada de Gabriel Armando Guilarte, un joven de 24 años tras un accidente a bordo de una motocicleta marca Motomel de 110cc de cilindrada acompañado por su mujer, por la pronunciada bajada de acceso al mencionado barrio. El hecho tuvo lugar el último 28 de junio alrededor de las 23.
Romina Nieto es cuñada de Gabriel Armando Guilarte, un joven de 24 años tras un accidente a bordo de una motocicleta marca Motomel de 110cc de cilindrada acompañado por su mujer, por la pronunciada bajada de acceso al mencionado barrio. El hecho tuvo lugar el último 28 de junio alrededor de las 23.
La motocicleta en la que circulaba Guilarte cortó sus frenos y él terminó impactando de cabeza en la pared de una vivienda.
"Mi cuñado llegó al hospital Pablo Soria consciente y con un fuerte golpe en la cabeza. Lo vimos sentado en una camilla en la sala de observaciones, vomitaba sangre, pero no fue atendido a tiempo. Mi hermana (esposa de la víctima) le suplicaba a la enfermera que le brindara asistencia, porque el golpe que se había dado había sido de consideración, pero ella le decía que ya lo iban a atender", dijo Nieto.
La mujer manifestó que alrededor de las 4 de la madrugada su cuñado "hizo dos paros respiratorios y se lo llevaron de urgencia a la sala de terapia. Luego, como a las 7.30, un guardia le comunicó a mi hermana que mi cuñado ya estaba muerto".
"No le brindaron la atención necesaria, de nada sirve que Same traslade a las personas heridas de gravedad si van a ser depositados en una sala", dijo entre lágrimas Romina Nieto.
Guilarte tenía 24 años, era padre de tres niñas (la menor cuenta con apenas seis meses), se ganaba la vida con trabajos de albañilería y era el único sustento de su familia . Su mujer, que también fue protagonista del siniestro, sufrió una seria lesión en la rodilla izquierda y está enyesada.
Al momento de producirse el infortunado episodio, se supo que ninguno de los motociclistas llevaba puesto el casco de seguridad y los familiares de la víctima habían expresado cierto malestar por la demora de la ambulancia y del personal del Same luego del siniestro vial.
Según se pudo establecer, a la motocicleta que conducía el joven se le cortaron los frenos y debido a la velocidad que había ganado en plena bajada, Guilarte no pudo evitar maniobrar e impactar de forma violenta contra la pared de una vivienda.
"Mi cuñado llegó al hospital Pablo Soria consciente y con un fuerte golpe en la cabeza. Lo vimos sentado en una camilla en la sala de observaciones, vomitaba sangre, pero no fue atendido a tiempo. Mi hermana (esposa de la víctima) le suplicaba a la enfermera que le brindara asistencia, porque el golpe que se había dado había sido de consideración, pero ella le decía que ya lo iban a atender", dijo Nieto.
La mujer manifestó que alrededor de las 4 de la madrugada su cuñado "hizo dos paros respiratorios y se lo llevaron de urgencia a la sala de terapia. Luego, como a las 7.30, un guardia le comunicó a mi hermana que mi cuñado ya estaba muerto".
"No le brindaron la atención necesaria, de nada sirve que Same traslade a las personas heridas de gravedad si van a ser depositados en una sala", dijo entre lágrimas Romina Nieto.
Guilarte tenía 24 años, era padre de tres niñas (la menor cuenta con apenas seis meses), se ganaba la vida con trabajos de albañilería y era el único sustento de su familia . Su mujer, que también fue protagonista del siniestro, sufrió una seria lesión en la rodilla izquierda y está enyesada.
Al momento de producirse el infortunado episodio, se supo que ninguno de los motociclistas llevaba puesto el casco de seguridad y los familiares de la víctima habían expresado cierto malestar por la demora de la ambulancia y del personal del Same luego del siniestro vial.
Según se pudo establecer, a la motocicleta que conducía el joven se le cortaron los frenos y debido a la velocidad que había ganado en plena bajada, Guilarte no pudo evitar maniobrar e impactar de forma violenta contra la pared de una vivienda.