Una pesada colcha con la figura de un tigre no dejaba ingresar ni un hilo de luz por la ventana de una habitación desordenada, sólo se oía el ruido del ventilador de una computadora que llevaba mucho tiempo encendida.
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Una pesada colcha con la figura de un tigre no dejaba ingresar ni un hilo de luz por la ventana de una habitación desordenada, sólo se oía el ruido del ventilador de una computadora que llevaba mucho tiempo encendida.
Un bebé de tres años totalmente desnudo y con los ojos cansados sostenía inocentemente un cartel que decía "For my friend", mientras se encendía una y otra vez el flash de un celular marca Nokia 8.
El hombre que sostenía el dispositivo móvil era Miguel Abdón Janco, el joven del barrio Los Molinos de nuestra ciudad, condenado por la Justicia Federal en diciembre de 2015 a cumplir la pena de 32 años de prisión, luego de comprobarse que filmaba mientras abusaba de su hermano de 9 y de sus ahijados de 4 y 3 años en reiteradas oportunidades, para luego subir el material pornográfico a una red internacional de pederastas en la "Internet Profunda" (Deep Web).
El 6 de enero de 2014 la División Delitos Tecnológicos de la Policía Federal Argentina recibió información de parte del FBI y de la Policía Australiana, sobre un usuario localizado en nuestra provincia que descargaba imágenes y videos con pornografía infantil a través de dos conocidas páginas virtuales, una ucraniana y otra, un foro denominado (The Love Zone), con sede en Australia, que congrega a la mayor cantidad de pedófilos en todas partes del mundo. Janco era uno de los miembros VIP del "selecto" grupo, y su membrecía la obtuvo luego de distribuir más de 50 MB de material pornográfico inédito, donde él mismo se filmaba abusando de sus dos hermanitos y de su ahijado.
En el foro era conocido como el usuario "miguelboysnew" y entre el 2012 y 2014 había subido la totalidad de siete videos y más de un centenar de fotografías de alto contenido pornográfico, que tomaba a sus víctimas desde la oscuridad de su habitación de la calle Cronista Comercial Nº 294 del barrio Los Molinos y de un domicilio del barrio Los Perales.
En 2012 Janco había aprendido con tutoriales en Youtube a entrar a la "Deep Web", que no puede ser detectado por motores de búsqueda como Google y es solo accesible a través de un software específico.
El pedófilo jujeño empleaba el TOR para entrar, la sigla de "The Onion Router", un sistema de operación que utilizó para acceder al foro The Love Zone, que llegó a contar más de 47 mil usuarios.
Miguel Janco trató siempre de estar vinculado a muchos niños, en Los Molinos tenía una escuelita de fútbol y era muy común verlo llevar de paseo al centro a sus hermanitos, que además les hiciera todo tipo de regalos, como también ocurrió con su ahijado de 3 años, luego de haberse ganado la confianza de sus amigos, los padres del niño.
Además, los investigadores descubrieron que Janco había subido a la página de pornografía infantil ucraniana con sede en Rusia, una sesión de fotos llamada "a beuty boy 3 years before to... ("un hermoso chico de 3 años antes de"...), y esos puntos suspensivos, daban cuenta de otro dantesco acto filmado y entregado a la subcultura de navegadores pederestas, con el fin de hacerles saber sobre "una nueva conquista".
“Logró la foto del saludo”
Janco había logrado “la foto del saludo”. El logro máximo del abuso sistemático: un menor sometido por un pedófilo posa con un cartel en donde se saluda a otro pedófilo con quien el primer abusador intercambia material. El receptor fue un hombre ucraniano, que posó de la misma manera con un niño de unos 4 años, de aspecto rubio, con el torso desnudo y sosteniendo un cartel que decía “para mi amigo Miguel”. Miguel Janco dormía en la misma habitación con su hermano de 9 años y según el informe de la psicóloga Marta Laura Barcat, “el niño confunde el mundo fantástico del real, presenta dificultades en su expresión oral que denota retardo del lenguaje, propio de niños que sufren abusos”. Janco manipuló y engañó a su hermano generándole confusión en el nivel de realidad y naturalizando dicha situación puesto que es la única realidad que conoce. El pederasta había inventado una historia de duendes, ya que “recordó que el niño le dijo que le tenía miedo a los duendes porque le hacen cosas feas, que lo buscaban en las noches y que se escondían en su cama”.
“Son tres víctimas y no hay más”
El hombre que se convirtió en un abusador de niños de clase mundial, debe cumplir condena hasta el 2046 en la cárcel Federal de la ciudad salteña de Güemes.
En su computadora hallaron una importante cantidad de fotografías de rostros de niños de nuestra ciudad, pero también de otros chicos de otros países.
Miguel Janco declaró ante el Tribunal Federal que lo condenó y dijo que “sólo abusó de tres niños” y “no hay más”.
Es que en sus cuentas de redes sociales visibles, en sus fotos de perfil aparecía junto a distintos niños, pero dijo que sólo eran conocidos y que nunca les hizo nada. Además, en un tramo de su declaración Janco dijo sin titubear que él se contenía pero que tenía un impulso de abusar de los menores que era muy difícil resistir.