Una multitud de fieles peregrinó ayer hacia el Santuario de Nuestra Señora del Rosario, de Río Blanco y Paypaya. Desde tempranas horas, la columna partió desde la iglesia Catedral con diecisiete bandas de sikuris provenientes de distintas localidades de la provincia y vecinos que se sumaron durante el camino.
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Una multitud de fieles peregrinó ayer hacia el Santuario de Nuestra Señora del Rosario, de Río Blanco y Paypaya. Desde tempranas horas, la columna partió desde la iglesia Catedral con diecisiete bandas de sikuris provenientes de distintas localidades de la provincia y vecinos que se sumaron durante el camino.
También participaron de la muestra de fe cerca de sesenta fieles de la parroquia Cristo Obrero, de Retiro de la provincia de Buenos Aires, quienes en su ingreso al santuario portaron una bandera con la imagen de la santa patrona y del padre Carlos Mujica.
Además, se dispusieron puestos de merienda y de hidratación para las familias que se apostaron desde muy temprano para presenciar la llegada de la Virgen.
Bajo el lema "María, Santuario de Vida, fortalece mi familia" y el son de las melodías de los sikuris, los peregrinos recibieron a la patrona en el "Campito de la Virgen", con mucha emoción agitando los pañuelos blancos como símbolo de bienvenida.
La celebración litúrgica se inició a las 8.30 y fue presidida por el obispo de Jujuy, monseñor César Daniel Fernández. Tras la lectura del Evangelio dio la bienvenida a las familias, parroquias de todas las Diócesis y comunidades.
Ante los miles de peregrinos, el obispo Fernández llamó a fortalecer a la familia e hizo mención a los flagelos que más preocupan, como la
violencia, las adicciones en los adolescentes y la disolución del grupo familiar.
"Hace tres años hemos decidido implementar una pastoral de atención, cuidado y acompañamiento a nuestra familia, preguntando a muchos qué pasaba adentro y afuera de la casa, cuáles eran los mayores dolores y sufrimientos", expresó Fernández.
En primer lugar, mencionó la violencia ocasionada por los hombres hacia las mujeres y que algunas veces llegan a enfermarlas psicológicamente, "esas son situaciones que nos dejan sumamente tristes", indicó.
Seguidamente se refirió a las adicciones, "una peste que ha invadido a los jóvenes" y resaltó que otro de los problemas que preocupa es la disolución de la familia, "a veces el padre y la madre por tantas razones justificadas o no, terminan abandonando el hogar, despreocupándose de los hijos", expresó consternado.
En este contexto, el obispo instó a fortalecer la enseñanza de la fe, recordándoles a los presentes que alguna vez, cada uno de ellos fue llevado de la mano a la iglesia, "nos hicieron promesar a la Virgen o a algún santo, ese es el tesoro más valioso que le dejamos a los nietos", concluyó.
Cabe mencionar que la peregrinación de los enfermos se realizará el próximo domingo 21, fecha que coincide con la celebración del Día de la Madre.
TESTIMONIOS
RUBÉN PUENTES, PEREGRINO :Hace 42 años que peregrino. Para mi familia es muy importante asistir a la misa de la Virgen de Río Blanco y Paypaya. Siempre pedimos por la salud y la protección de mi familia.
PATRICIO VELÁSQUEZ, PEREGRINO: Peregrino hace años, empecé haciéndolo por la Virgen de Sixilera y ahora acompañamos a la patrona de Río Blanco. Venir a misa es una alimentación espiritual, una grandeza de Dios.